A manera de compensación por la cancelación del Desfile acuático con las candidatas al Reinado Nacional del Bambuco en el marco de la 63 edición del Festival en San Juan y San Pedro, los antiguos bogas y actuales lancheros del Río Magdalena en Neiva tuvieron su propio festival. Ayer sábado desde el puerto de La Gaitana hasta el puerto Caracolí, desfilaron con los Mitos y Leyendas, ante la ausencia de las reinas. Esta es la historia.
Hernán Galindo
Tras una protesta ante la cancelación este año del desfile acuático que, en cada una de las versiones del Festival hace parte de la programación del Reinado Nacional del Bambuco, como uno de los eventos que permite a las representantes un contacto con el pueblo, en esta oportunidad, previo acuerdo con los lancheros, se decidió realizar el Festival del Río.
El evento contó con la participación de los antiguos bogas y actuales lancheros que engalanaron sus vehículos de la mejor manera y de paso incluyeron como invitado especial a uno de los Mitos y Leyendas que giran alrededor de las fiestas tradicionales.
El evento sirvió para que los lancheros tuvieran la oportunidad de recibir algún recurso y mostrar que están organizados para prestar un buen servicio a propios y turistas que llegaron con motivo de la versión 63 del Festival del Bambuco en San Juan y San Pedro.
Los protagonistas
Los lancheros, herederos de los antiguos bogas que navegaban y transportaban las reinas en balsas que construían con sus propias manos con guaduas que amarraban con vejucos o alambres, se han modernizado y de paso asociado para prestar un servicio en lanchas a diferentes puntos que pueden ser escogidos por sus eventuales clientes.
A través de Asofluvial Ltda., 15 lancheros, en su mayoría herederos de los antiguos bogas, prestan el servicio de transporte por el Río Magdalena, especialmente a los turistas que quieren pasear por el afluente que nace en el Huila y cruza todo el país de sur a norte.
Lenin Montenegro, uno de los voceros de los lancheros, dijo que lamentablemente, en esta oportunidad no estuvieron las reinas, pero el año entrante volverán, “en razón a que no debemos dejar morir el río, hay que volver la mirada al río y por eso se desarrolló el Desfile Acuático con Mitos y Leyendas”, argumentó.
Agregó que la mayoría, como en su caso, son herederos de los antiguos bogas, a sus 42 años reafirma que es nacido, criado y vive en la ribera del Río Magdalena, lleva no menos de 25 años como pescador y lanchero.
Sobre la empresa y el servicio que prestan, indicó que la flota está integrada por 15 lancheros con embarcaciones totalmente equipadas y con las medidas de seguridad y las pólizas de responsabilidad contractual y extracontractual que permiten garantizar un buen servicio a los usuarios. Ayer salieron 12 a trabajar.
Otra voz
Uno de los lancheros más jóvenes, José Gabriel Reyes Aroca, dijo con orgullo que son herederos de los bogas, su padre le heredó el oficio a su abuelo y él ahora hace el relevo en un trabajo que los vincula al río que hace parte de su vida, de su cotidianidad. Con 37 años de edad, está trabajando desde los 12; “Yo comencé de una vez como motorista, primero con un motor 12, luego un 15 y ahora con un 40”, dijo al tiempo que se declaró un enamorado del río.
Dijo conocer el río, lo que le permite ir hasta la Represa de Betania y dormir amarrado a la pata del puente de El Juncal hasta que lleguen los ingenieros a trabajar. “Cuando el río del Oro, amanece crecido, el Magdalena se pasa y cubre la Isla que es la que queda al otro lado del brazo que normalmente conoce la gente, aquí frené al monumento a la Gaitana. Se unen los dos brazos”, contó.
Los lancheros pudieron en esta oportunidad atender a varios turistas, básicamente familias que llegaron hasta el Puerto de La Gaitana, no se pudo iniciar en las Damas, por el bajo caudal del río. Antes que observar el desfile con los Mitos y Leyendas, el interés de los turistas era hacer un recorrido en lancha por las aguas del río de la patria.
El Magdalena ligado a la historia
Igual que el desarrollo comercial, del transporte y otras actividades en Neiva y el Huila, el río Magdalena, ha sido protagonista en diferentes etapas de la historia regional, “el río siempre ha sido parte de la fiesta en Colombia, recuerden que los primeros San Juan que se celebraron fueron a la orilla del río, el paseo, el sancocho iban a hacer todo allá y por supuesto permanentemente la idea es que estemos dándole la cara al río”, sostuvo el gestor cultural Guillermo González.
González agregó que el Magdalena es la vena fundamental de Colombia y es una fuente de vida, es una fuente de generación de cultura, de tradiciones, de procesos sociales que se deben tener en cuenta y es lo que hicieron ayer, permitiendo que llegara la familia; papá, mamá y niños, casi todos fueron familias que disfrutaron de los Mitos y Leyendas.
Recordó que la comunicación inicialmente ingresa por el río Magdalena y va llegando a las diferentes ciudades, así que “el río es parte fundamental de nuestra cultura, nuestra tradición, nuestra historia y de nuestro proyecto social, y está claro que el año entrante dependiendo de una evaluación que se hará en materia de seguridad, volverán las reinas al río”.
“Al público hay que darle seguridad, mire la diferencia que hay entre el desfile de reinas, en el que usted veía gente tomando en todas partes, ayer fue el núcleo familiar el que disfrutó del río. Por eso, hasta que se haga un estudio serio sobre la seguridad en el río y en el Malecón, se podrá garantizar la realización del desfile acuático con las reinas”, concluyó.
Es la situación que afrontan los también herederos de una tradición como hacer balsas en guadua, que se transformaron en botes y lanchas. Además, comparten otra tradición que es ser pescadores artesanales, que bautizan sus embarcaciones con nombres como La Pitufa, La Neivana o La Perla, para citar algunos ejemplos.