Nuevamente se avivó la controversia por la propuesta de una Asamblea Nacional Constituyente. Aunque algunos sectores políticos ven con buenos ojos esta iniciativa, otros consideran que no es la solución idónea para tantos problemas que enfrenta el país, empezando por la polarización. Igualmente, los nueve puntos propuestos por el Presidente de la República, también han dividido opiniones.
Johan Eduardo Rojas López
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Con el cambio del ministro del Interior, nuevamente se avivó la polémica por la búsqueda del presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, de consolidar una Asamblea Nacional Constituyente. Y es que, tras su llegada, Juan Fernando Cristo, mencionó que una de sus tareas como ministro del Interior será tender los puentes para una Asamblea Nacional Constituyente, que según recalcó siempre estará alineada con las normas vigentes, pues dependerá exclusivamente del consenso con todos los sectores del país.
El nuevo ministro del Interior dijo que la idea es llevar a cabo un diálogo abierto y sin timideces sobre las reformas que requiere el país, por tanto, la Constituyente sería “acotada” a unos temas urgentes y que han estado bloqueados en el Congreso y el país en general. Eso sí, sostuvo que, en caso de que se den las condiciones, ese proceso se convocaría en el próximo gobierno.
“Es un acuerdo nacional que, eventualmente, puede o no –y eso surgirá de las conversaciones–, terminar en una constituyente que no se convocaría ni elegiría (en este periodo). Sería un proceso que comienza ahora y que si llegamos a un acuerdo político nacional se elegiría en el próximo gobierno, no en este”, comentó el nuevo jefe de la cartera.
Ahora bien, sobre las críticas que recibió por haber dicho en el pasado que no estaba de acuerdo con una constituyente, Cristo se defendió y respondió que “sigo pensando que tiene que ser fruto de la unión de todos los colombianos, de un acuerdo nacional y no de la imposición de un sector a otro (…) el Juan Fernando Cristo que dijo repitan conmigo la inviabilidad de la constituyente, era el que decía y sigue pensando que una Constituyente no es posible en Colombia sin un acuerdo nacional, que una constituyente no es posible en Colombia ya durante el periodo del presidente Petro”.
Por otro lado, fue claro y enfatizó que dialogará con “todos los sectores del país, con la oposición, con las altas cortes, con los sindicatos, con los gremios y los empresarios”.
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Puntos propuestos por Petro
Ante todo esto, Petro Urrego advirtió que, antes de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente, es necesario avanzar en consolidar el poder constituyente y pactar un acuerdo nacional sobre varios temas. Por ello, propuso nueve puntos para tal fin, entre esos: garantía inmediata al derecho universal a la educación, la salud y las pensiones; nuevo ordenamiento territorial; el desarrollo económico y social de los territorios excluidos; la reforma agraria; la adaptación a la crisis climática; la reforma a la justicia; la reforma política; el pacto por una economía productiva; la verdad judicial y el perdón social para una paz definitiva.
Entre el apoyo y el rechazo
Son múltiples las reacciones que ha suscitado este anuncio dado por el Gobierno Nacional, entre ellas, la del exvicepresidente Germán Vargas Lleras, quien indicó que le gusta la idea de convocar una Asamblea Nacional Constituyente. “Yo supongo que Juan Fernando Cristo y el presidente Gustavo Petro llegaron a un acuerdo. A mí me gusta la declaración que escuchamos ayer, me gusta la afirmación de convocar una Constituyente, pero de no romper el orden constitucional y de convocarla bajo un acuerdo nacional, pero bajo las reglas de la Constitución del 91″, explicó el político que ha sido duramente señalado por sentar su posición.
Añadió además que, “si logramos ese acuerdo político podríamos acelerar ese proceso para ya mediante un acuerdo político con todos los sectores, una ley aprobatoria en el Congreso podría tramitarse en el Congreso en un par de semanas. Mediante un acuerdo político estoy seguro de que la Corte Constitucional se pronunciaría en poco tiempo. Si hay ese interés del Gobierno de poner en marcha un proceso pongámoslo ya, no sigamos estos dos años debatiendo sobre esa posibilidad porque eso sí sería una discusión estéril”.
Al igual que él, el expresidente Ernesto Samper indicó que apoya la iniciativa.
Por su parte, el expresidente Iván Duque, precisó que “Una Asamblea Nacional Constituyente tiene como objetivo perpetuar en el poder al actual Gobierno y al Pacto Histórico. El tal “Acuerdo Nacional” es una fachada para provocar una ruptura institucional. Ese proceso generará incertidumbre, desconfianza y fragilidad institucional. El Congreso y las Cortes deben negar ese camino hacia el modelo chavista impulsado ahora por quienes han sido los áulicos del terrorismo y los más vivos exponentes del clientelismo y la corrupción”.
“Se equivoca el Presidente”
Julio Cesar Triana Quintero, representante a la Cámara por el Huila, rescató que el nuevo ministro del Interior ha advertido que cualquier intento de constituyente debe tramitarse en el marco constitucional de Colombia y “eso quiere decir que por primera vez un funcionario del Gobierno reconoce que aquí no se pueden hacer constituyentes interpretando el acuerdo de paz o promoviendo constituyentes populares desde los territorios como lo ha venido proponiendo el Presidente”.
Para él, el Presidente se equivoca priorizando nueve puntos que solo le interesan a él, y se equivoca, porque una Constituyente nace de un consenso nacional. “Para que esa Constituyente tenga éxito, tiene que haber primero una gran convocatoria nacional de todos los sectores, no solamente los sectores afines al Gobierno, sino también de aquellos que no estamos de acuerdo con muchas de las propuestas, con muchas de las ideas del actual Gobierno. A partir de ahí puede haber posibilidades reales de una reforma a la Constitución”, ahondó Triana Quintero, quien agregó que, para el gran diálogo nacional, lo primero que Petro Urrego debe recuperar es su credibilidad.
Finalmente, reformar la Constitución para traerla a la actualidad y conectarla con la situación que vive el país tal vez sea necesario, según el congresista. Sin embargo, el problema es hacerlo con una ideología sesgada y llena de caprichos, dado que las reformas constitucionales tienen que atender el clamor nacional.
Los aciertos
La representante a la Cámara por el Huila, Leyla Marleny Rincón Trujillo, también se refirió a la controversia y dijo que, lamentablemente algunos sectores, incluida la oposición, de forma engañosa han querido posicionar el mensaje que el Gobierno busca atajos constitucionales para llevar a cabo sus reformas; “Considero que esa duda, si existió en algún momento, está totalmente superada con el nombramiento del doctor Cristo. El Presidente ha sido claro en explicar múltiples veces qué es el “poder constituyente” que no es más que el ejercicio pleno de los derechos políticos de los y las colombianas en la búsqueda de garantizar derechos cómo: la vida, la salud, la educación, la vivienda, los servicios públicos, el empleo, la seguridad, etc; algunos de estos son derechos fundamentales que hoy en día por múltiples razones no se materializan”.
Rincón Trujillo califica como un acierto histórico el hecho de que el Presidente de una nación ponga en discusión frente a la opinión pública y a la sociedad estos temas, que son esenciales. “Me refiero tanto a las reformas que se han venido discutiendo en el Congreso de la República como a la discusión de una eventual Asamblea Nacional Constituyente. Hasta ahora este tipo de temas no se habían discutido en el seno de la sociedad colombiana y en mi opinión con el solo hecho que se origine dicha discusión, sin importar su resultado, fortalece el carácter democrático de Colombia y su sociedad”, indicó la congresista, quien añadió que los puntos propuestos por Petro Urrego son pertinentes para su discusión, no obstante, eso no quiere decir que tenga que estar de acuerdo con todos.
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En desacuerdo
El diputado del Huila, Rodrigo Lara Sánchez, en dialogó con LA NACIÓN dijo estar en desacuerdo total con dichos anuncios debido a que, según su criterio, aunque es permitido por la Constitución, no es la salida o el camino que se quiere.
“La idea de una Asamblea Nacional Constituyente no es viable porque existe una alta polarización en el país y uno no sabe en medio de tantas diferencias que existen y tantos odios que se vienen generando que puede salir de un proceso constituyente. Lo que yo sí creo es que podemos lograr y pienso que el Presidente ha perdido esta oportunidad en estos dos primeros años, es convocar un gran acuerdo en el que reúna verdaderamente a todos los actores sociales a hablar y trabajar sobre temas que logren solucionar la problemática que vive el país”, manifestó Lara Sánchez.
Mencionó igualmente, que hay muchos puntos que son necesarios tratar, pero no necesariamente a la luz de una Asamblea Nacional Constituyente, dado que “esto puede ser una manera de enrarecer mucho más el ambiente que se vive de polarización y yo pienso que se pierde más bien un momento de trabajar a conciencia para entre todos lograr mejores resultados”.
“El país no quiere un proceso constituyente”
Para el concejal de Neiva, Felipe Trujillo, el nuevo ministro del Interior quiere enfrentar el calvario de la falta de coherencia que lo persigue, luego de que estuviera públicamente en contra del proceso constituyente impulsado por el presidente Petro meses atrás. “Si usted revisa las cifras que arrojó el estudio de Invamer en las semanas pasadas puede concluir que el país no quiere un proceso Constituyente. Así que el Gobierno sigue con su agenda de imposiciones ideológicas y no la agenda de las inversiones para solucionar los problemas del país”, comentó el cabildante.
Concluyó que el Presidente Petro calienta el escenario electoral del 2026 antes de tiempo, y por tanto, “debemos defender la democracia y no caer en este juego”.