Algunos sucesos recientes

Los esbozo ligeramente. Los cruentos enfrentamientos de las fuerzas del orden con los protestantes del Catatumbo, crisis que hasta hoy (jueves) no ha podido solucionar el mejor jugador de póker que tenemos en la Casa de Nariño; los anuncios de otros paros por diferentes gremios económicos; la sin salida en que se halla en busca de asilo el ex agente de inteligencia gringa, Edward Snowden; las revelaciones hechas por el diario O Globo del Brasil, sobre espionajes por parte de Estados Unidos en varios países latinoamericanos, incluida Colombia, hecho que originó una tímida y cobardona pedida de explicación por la cancillería de la patria del falso don JuanMa; la mención de esta en el continente americano dentro de las naciones con más alta corrupción, especialmente en el sector público, incluidos los medios de comunicación ¡qué vergüenza que también se vean permeados por el soborno; los frecuentes e inéditos cuestionamientos de S.S. “Che” (este sí que tiene los pies en la tierra, sin creerse el más papista de los “modestos” argentinos), propendiendo por la aplicación de los verdaderos dictados de moral, evangelización y humildad que debe ofrecer el clero en todas sus jerarquías; el pánico banderizo que no pueden disimular las camarillas politiqueras con las listas a cuerpos colegiados-sobre todo Senado-que promulgará el Centro Democrático bajo la égida de su fundador el Mejor Gran Colombiano Álvaro Uribe Vélez –que pena con sus rabiosos, frustrados y viscerales malquerientes- (Me gustó mucho su primer cuatrienio. En el segundo, le reventaron las llamadas “chuzadas”. Desde cuando empecé a ejercer el periodismo en 1967, los comunicadores siempre fuimos objetos de interceptaciones telefónicas. Es decir, ello ha sido una constante). Entonces, que se sigan rasgando las vestiduras las Teodoras viudas de Chávez con los Cepedas, y Cepedan… de otra manera para hacerle el juego a la guerrilla con las tales Marchas Patrióticas y demás pretextos para alimentar las pretensiones de las “monjitas de la caridad” que en La Habana reciben instrucción de los politicastros para doblegar al frágil traidor que no es el Santo de devoción de los colombianos.
Los únicos que están tranquilos son los que llevan consigo el estado de alma de la verdadera doctrina conservadora-entiéndase militancia- no usufructuarios de la prebendas del poder para su beneficio personal, de sus familias y roscas.
Con el magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado quedó sepultada su ideología. Hoy, otro Álvaro preconiza la autoridad y el orden, que son pilares esenciales en los que se forman con el talante conservador legado de Gómez, que con Uribe, sus principios, como el ave Fénix han surgido de las cenizas.