Así quedó ponderado este lunes en el inicio del 84° Congreso Nacional de Cafeteros que se está realizando en la ciudad de Medellín y donde el Huila es uno de los invitados especiales por ser el productor número uno del país. Se destacó este producto agrícola como una pieza clave para consolidar la paz.

El Presidente Juan Manuel Santos exaltó este lunes el trabajo en equipo que ha emprendido junto con la Federación Nacional de Cafeteros para beneficiar a cientos de miles de familias cultivadoras, y dijo que la actividad tiene toda la tradición y el potencial para convertirse en el cultivo de la paz.

“El café tiene toda la tradición y el potencial para ser el cultivo de la paz. Porque el progreso cafetero necesita de la paz, y la consolidación de la paz necesita del apoyo de los cafeteros”, dijo el Presidente Santos en la clausura del 84° Congreso Nacional de Cafeteros.

“El café ha sembrado desarrollo y bienestar en nuestro suelo, y no tengo duda de que lo seguirá haciendo para orgullo y satisfacción de los colombianos ¡El café es y seguirá siendo nuestro producto insignia!”, precisó.

Enorme apoyo del Gobierno

El Primer Mandatario recordó que desde el comienzo de su Gobierno, la caficultura del país ha recibido un enorme apoyo para su bienestar “porque lo que es bueno para el café, es bueno para Colombia” y dijo que gracias al apoyo gubernamental, la cosecha alcanza los 14,2 millones de sacos, con un valor récord superior a los $7 billones.

El Acuerdo de Prosperidad Cafetera firmado días después de la inauguración del Gobierno del Presidente Santos, permitió la renovación de más de 620.000 hectáreas.

Recordó que las inversiones del Gobierno ascienden a más de $2,7 billones, que se suman a otros $6 billones que han sido irrigados por la Financiera Finagro para más de medio millón de proyectos cafeteros. Es como darle un crédito a cada caficultor.

“Nunca antes se habían destinado tantos recursos a un sector de la economía. Se trata de un esfuerzo combinado. Por eso, a mediados de 2016, mediante la firma del nuevo contrato de administración del Fondo Nacional del Café, renovamos la alianza entre el Estado y los cafeteros por 10 años más”, aseveró.

El Primer Mandatario dijo que se puede lograr alcanzar una expectativa de producir 20 millones de sacos, desde los 7 millones de hace 7 años gracias al logro de la paz.

‘La gran expansión cafetera se dio después de la Guerra de los Mil Días. Pues eso es lo que vamos a poder hacer con la firma de paz con las Farc, porque es una de las muchas oportunidades que se van a poder abrir con la paz. ¿Qué mejor que producir lo que más saben producir los colombianos? Ahí hay un reto muy importante’, señaló.

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Anunció que en los próximos días sancionará la Ley de Alivio Financiero que beneficia a quienes hoy son deudores de Finagro –a través del PRAN– y del Fonsa, y que no han podido pagar sus obligaciones.

Con esta ley se suspenderá el cobro de las deudas vencidas a 30 mil campesinos y productores agrícolas –entre ellos 18 mil cafeteros–, que podrán evitar el embargo y remate de sus tierras y acogerse a un periodo de gracia de dos años, para ponerse al día con sus obligaciones antes del 30 de junio de 2019.

El futuro

De la misma forma, dijo que lo que viene al futuro es continuar el trabajo para hacer del sector más competitivo y sostenible, y avanzar en la conquista de más mercados con nuestros cafés especiales.

Igualmente, capitalizar en las zonas de influencia, los beneficios que implica el fin del conflicto armado con las Farc.

“En cuanto al reto de ser más competitivos y sostenibles, es fundamental que mantengamos y fortalezcamos la política de renovación de cafetales que con tanto éxito hemos adelantado en los últimos años, asegurando así una caficultura joven y productiva como base de la prosperidad del sector en el futuro”, precisó.

El Jefe del Estado agregó que este esfuerzo debe soportarse –como lo está haciendo hoy– en la innovación en materia de resistencia a las enfermedades y la adaptación al cambio climático, de forma que la caficultura continúe siendo el referente mundial en sostenibilidad y calidad.

“Si algún sector puede aportar más efectivamente a la construcción y consolidación de la paz, es el cafetero, por su presencia institucional en las regiones, por su experiencia en la ejecución de obras, por su cultura de legalidad y trabajo, y por sus buenas prácticas”, explicó.

En ese sentido, señaló que las normas recientemente expedidas por el Gobierno en materia de contratación con entidades sin ánimo de lucro no aplican para la ejecución de los Comités Departamentales de Cafeteros cuando involucren recursos de la transferencia cafetera.

‘Es decir, pueden seguir trabajando como lo han hecho con tanto éxito hasta el momento’, puntualizó.