Hasta el cuarto ingresaron los sicarios que le segaron la existencia a William Humberto Herreño Bustos, de 50 años de edad, en el barrio Dolcey Andrade en la comuna Nueve de la ciudad. Los responsables huyeron del lugar luego de lograr su cometido. Las autoridades investigan los móviles del crimen.
En el norte de Neiva, se registró un nuevo hecho de sicariato que cobró la vida de un celador. La víctima fue identificada como William Humberto Herreño Bustos, de 50 años de edad.
Respecto al caso se supo que siendo las 08:30 de la noche del pasado lunes, la comunidad reportó que habían escuchado varios disparos en el barrio Dolcey Andrade, ubicado en el norte de Neiva.
El hallazgo
Fue así como la patrulla se trasladó al lugar en donde fueron informados sobre un homicidio en el lote 61 de la manzana número 3. En la inspección encontraron a una persona de sexo masculino que yacía sin signos vitales en su propia cama con dos heridas ocasionadas con arma de fuego.
La arremetida
Cuentan los testigos, que hombres desconocidos ingresaron arbitrariamente al hogar y aprovecharon que William Humberto, dormía para abrir fuego contra su humanidad. Una vez que lograron su cometido emprendieron la huida con rumbo desconocido.
Desafortunadamente ninguno de sus seres queridos se percató de la llegada de los asesinos. Su esposa en ese momento se encontraba comiendo en la casa de su hija, que queda diagonal a la vivienda en donde se registró el ataque armado.
Solamente hasta que sonaron los proyectiles, fue que se percataron del crimen. Tras la llegada de La Policía Judicial, se acordonó el sitio para que la escena no fuera alterada. De inmediato los peritos forenses iniciaron las indagaciones y la recopilación de testimonios para dar con la individualización y captura de los sicarios.
Tras las pistas
Surtidos los actos urgentes, se procedió con el levantamiento del cadáver que fue llevado al Instituto de Medicina Legal. Ahora se averigua cuáles fueron las razones que motivaron este acto violento. Su familia se encuentra llevando a cabo los trámites de rigor para darle su cristiana sepultura.