Para el Presidente la caída en los precios de la cotización del petróleo sumado a las altas tasas tributarias que deben pagar los empresarios y la corrupción en la cadena exportable, son los principales obstáculos para mejorar los indicadores.
LA NACIÓN dialogó con Díaz sobre estos y otros aspectos fundamentales para la economía del país y de la región durante el Encuentro de Economía y Competividad que llevó a cabo la Universidad Corhuila.
¿Cómo avanza 2016 en materia de exportaciones?
Tenemos fuertes indicadores que nos indican una caída, en buena parte por la baja en los precios del petróleo y los commodities. Cabe recordar que la caída ha llevado a la economía de US$60 mil millones a pasar a US$35 mil millones en ventas en este tipo de servicios en 2015. Por eso esperamos que los bienes y servicios no minero energéticos empiecen a presentar un efecto positivo en la economía. El signo negativo no se va a borrar hasta el 2018, tenemos un trabajo fuerte por hacer.
¿Qué pasa con la meta del Gobierno Nacional?
La meta de los exportar USD30 mil millones en bienes no minero-energéticos a 2018 se debe mantener pero se deben diversificar mercados porque países como Venezuela, Ecuador, Perú, Chile y México también han tenido caída en su economía por el petróleo.
¿A qué mercados se debe apuntar?
Los empresarios deben apuntarle a países europeos y asiáticos, pero también hay una gran oportunidad en África, tenemos con que posicionarnos y aquí hay una gran demanda.
¿Qué oportunidades tiene el Huila?
Indudablemente es un departamento con muchas oportunidades. La oferta exportable del Huila en productos piscícolas, frutícolas y de café lo hacen muy apetecible en mercados internaciones.
¿Cómo le va al Huila a nivel nacional en exportaciones?
Es un departamento que no está en los primeros lugares del escalafón nacional. Le falta tener una cultura exportadora, tiene productos y herramientas como la Zona Franca que pueden ayudarlo a mejorar.
¿Qué obstáculos tienen las exportaciones?
Colombia es un país costoso para permitir la exportación de productos del centro del país a los puertos. La reforma tributaria de 2014 elevó la carga tributaria para los exportadores haciéndola una de las más altas de la región. La corrupción afecta el sistema y la falta de infraestructura también es un gran obstáculo.