Prácticamente ya perdimos la cuenta del número de meses que la pandemia está presente en nuestro día a día. La mayoría nos hemos acostumbrado a un estado de ánimo distinto al anterior a la llegada del COVID-19, pero ¿cómo está afectando realmente a la población colombiana?
Hemos hablado con la psicóloga Alejandra Pinilla, quien nos da su testimonio acerca de los cambios que ha percibido en sus pacientes y en la población en general, los sentimientos que provoca esta pandemia y las posibles consecuencias que puede tener respecto a la salud mental.
- ¿Cómo está afectando la crisis económica a la salud mental de la juventud colombiana?
Si bien, la sensación de bienestar y calidad de vida son determinantes para la salud mental, la agudización de la crisis económica en el País, debido a la pandemia por el covid-19 que ha afectado al mundo entero, se convierte en un factor alto de riesgo de enfermedad mental, que a la población colombiana más joven le genera sentimientos de temor, desesperanza, incertidumbre, frustración y generación de conflictos interpersonales, que pueden desarrollar trastornos de ansiedad, pánico, depresión, entre otros, que a su vez pueden evidenciarse en conductas aversivas y agresivas.
- ¿Ha notado un aumento de pacientes de este rango de edad?
Quizás la población que actualmente está teniendo mayor conciencia sobre la necesidad de actuar a tiempo frente al cuidado de su salud mental y emocional, es la población ubicada en la adultez temprana, es decir, las personas que sus edades oscilan entre los 30 y 45. En ese sentido, en mi consulta he notado que, durante este último año, la afluencia de consultantes de estas edades ha sido mayor, como también de niños y adolescentes, hijos de esta misma población.
- Sabemos que es difícil generalizar, pero ¿cree que nos hemos acostumbrado a vivir con la tristeza provocada por el COVID-19 o hemos sabido llevarlo de manera correcta?
De manera particular creo que somos altamente adaptables a las diferentes condiciones, pero esto no significa, necesariamente, llevarlas de manera correcta. Sin embargo, considero que más allá de habernos acostumbrado a una tristeza derivada por la pandemia del covid-19, creo y encuentro en mis pacientes una enorme e incontrolable sensación de incertidumbre que les ha generado diferentes alteraciones a nivel mental y emocional y que radican en el temor que ahora producen muchas actividades que antes eran normales en el día a día.
- ¿Qué cambios ha notado en sus consultas durante el último año y medio? ¿Distintos problemas?
Desde mi experiencia, quizás no ha sido tanto la diferencia entre los motivos de consulta, sino quizás la intensidad de los síntomas y la aceleración en el desarrollo de las alteraciones, desde la crisis de salud pública mundial derivada de la pandemia por el covid-19. Es decir, no es que ahora, a diferencia de antes, los pacientes consulten por lo que aparentemente es un ataque de ansiedad, de pánico o trastorno depresivo, sino que, durante el último año y medio los síntomas que llevan a los pacientes a consulta son más comunes y desarrollan crisis de salud mental y física aparentemente de manera más acelerada. De igual forma, los trastornos asociados al estrés laboral no son un problema de ahora, sino que son motivo de consulta más recurrente ahora, que antes de la pandemia por el covid-19.
- ¿Cree que tendremos consecuencias psicológicas como consecuencia del COVID-19?
Sobre el tema de la postpandemia hoy en día se está hablando bastante, y aunque aún no conocemos todo el impacto que a nivel psicológico se tendrá a raíz de la pandemia por el covid-19, sin duda esto ya ha cambiado la manera en la que nos relacionamos, nos comunicamos y hasta percibimos la proxemia del otro o los otros. Esto, es posible que se constituya como factor de riesgo para el desarrollo de trastornos mentales que serán cada vez más comunes en el futuro. Sin embargo, el motivo no es ser alarmistas o tener ideas fatalistas, pero sí realistas frente a que, lo que vivimos nos construye, cambia e impacta, de maneras positivas, pero también, negativas. Así que, el reto está en que, como profesionales de la salud mental debemos prepararnos para abordar con profesionalismo y calidad todas las condiciones derivadas de la pandemia en el futuro.
Cabe recordar que es posible solicitar ayuda psicológica de un especialista, de manera sencilla y a distancia, gracias a las posibilidades que ofrece internet.
Artículo en colaboración con doctoranytime.
