En el país se sigue hablando de cómo cientos de miles de colombianos cayeron durante los últimos meses en una masiva estafa por internet, a través de la criptomoneda ‘Daily COP’.
Detrás de ‘Daily COP’, según las investigaciones de las autoridades, estaba una organización ilegal cuyo propósito era atraer a inversionistas ofreciéndoles la oportunidad de invertir su dinero con la promesa de rendimientos diarios del 0.5%. Así las cosas, se creó un complejo holding empresarial compuesto por al menos 14 compañías con el propósito de darle una fachada de legitimidad a sus transacciones con monedas virtuales.
Las investigaciones arrojaron que más de 120.000 personas de todo el país “invirtieron” en ‘Daily COP’, logrando que la organización ilegal moviera por lo menos, $130.000 millones.
Todo este dinero fue destinado, de acuerdo con la Fiscalía General de la Nación, para comprar bienes suntuosos como vehículos de alta gama; y para constituir compañías inmobiliarias, de tecnología, de software y de publicidad. Y los “inversionistas” nunca recibieron las ganancias prometidas.
Por estos hechos, en octubre pasado, hubo varios capturados que deberán responder por los delitos de lavado de activos, concierto para delinquir, captación masiva y habitual de dineros, así como enriquecimiento ilícito de particulares.
En medio de todo este caso, se ha conocido además que reconocidos influenciadores digitales promocionaron ‘Daily COP’.
Vale la pena hacer dos reflexiones. Por un lado, es necesario llamar la atención sobre la candidez de muchas personas a la hora de aceptar propuestas que ofrecen extraordinarios rendimientos económicos. La frase que “de eso tan bueno no dan tanto” debería estar presente en este tipo de situaciones.
Y por el otro lado, es urgente revisar el papel que cumplen los influenciadores en las redes sociales. Ellos también son responsables del contenido que divulgan.