No son muy claras las motivaciones, el procedimiento contractual ni el objetivo final del viaje que, con numerosa comitiva oficial y privada No son muy claras las motivaciones, el procedimiento contractual ni el objetivo final del viaje que, con numerosa comitiva oficial y privada, adelantará el alcalde de Neiva Pedro Hernán Suárez por tres países de Suramérica durante diez días. Ni tampoco han sido suficientes ni concretas las explicaciones que se han dado para justificar este masivo desplazamiento que, oh sorpresa, coincidirá con un partido de la Selección Colombia en Santiago de Chile el 11 de septiembre, ni la organización privada que les servirá para su capacitación parece ser la más calificada o de grandes pergaminos como para concitar tan enorme interés. Ni más faltaba que nos opusiéramos a que nuestros gobernantes y demás líderes políticos, sociales y económicos amplíen su visión del mundo y de las cosas de Estado y de administración pública; muy bien que se preocupen por conocer tantas experiencias que a lo largo y ancho del planeta nos pueden enseñar cómo invertir, planificar, crear prospectiva y desarrollo sobre nuestras regiones. Pero qué bueno, y mejor, que todo ello se hiciera antes de ser elegidos o nombrados, y no comprometiendo recursos públicos, grandes o medianos, ni dejando una especie de vacío de poder temporal como el que tendremos en la ciudad durante los diez días de la gira internacional de Suárez y su cohorte. Ahora bien, se si trata de una misión oficial ello conlleva una serie de obligaciones y derechos tanto jurídicos como de emolumentos, en el caso del Alcalde y sus funcionarios, que no nos han aclarado con precisión. ¿Renuncian el Alcalde, sus secretarios y asesores a los viáticos a que tienen derecho legalmente en una misión oficial? ¿El sueldo durante los diez días se girará o lo devolverán, o se trata de permisos no remunerados? ¿La organización que, pagada, les capacitará, tiene los suficientes pergaminos para que sea necesario dar la vuelta por Río de Janeiro, Santiago de Chile, Curitiba y Buenos Aires? ¿En esas ciudades conocerán experiencias de primera mano, es decir con los gobiernos locales, que es lo clave en estos casos? ¿Han coordinado agendas con los alcaldes de esas cuatro importantísimas urbes? De entrada el Celadel, Centro Latinoamericano de Estudios Locales, no genera el impacto que uno esperaría para que el gobierno de Neiva, y sus concejales y empresarios, abran tal espacio en sus agendas para embarcarse en un periplo de estas dimensiones. Por ahora vemos que no pasa de ser una de tantas organizaciones privadas de consultores que, legítimamente, hacen sus negocios por los países latinos. Si lo que algunos, o todos, quieren es un buen paseo adobado con algo de conocimientos, pues nada impide que soliciten vacaciones anticipadas o permisos no remunerados y lo hagan, pero si en este caso es misión oficial para “la realización de visitas internacionales de observación de experiencias y buenas prácticas empresariales”, esperamos los correspondientes informes y resultados que justifiquen la gira.