Siguiendo la hoja de ruta trazada por el presidente Juan Manuel Santos el Gobierno Nacional y la guerrilla de las Farc Siguiendo la hoja de ruta trazada por el presidente Juan Manuel Santos el Gobierno Nacional y la guerrilla de las Farc iniciarán este lunes las negociaciones de paz en Oslo, Noruega. Será el primer encuentro entre los negociadores de ambas partes para avanzar en el desarrollo de la agenda que se acordó durante seis meses de discretas conversaciones de paz. Los diálogos tendrán el apoyo de los gobiernos de Cuba y Noruega como garantes y el acompañamiento de los gobiernos de Venezuela y Chile, además de otros países que podrían participar. El proceso, según la hoja de ruta, será integral y simultáneo y contempla por primera vez, dejación de las armas y reincorporación de las Farc a la vida civil – en lo económico, social y político. También cese al fuego y de hostilidades, bilateral y definitivo, aunque no será una exigencia para iniciar las conversaciones, sino como producto de un acuerdo que deberá concretarse en menos de dos meses. Las conversaciones serán directas, discretas e ininterrumpidas hasta lograr un acuerdo final sobre el desarme. Esa es la meta y se encuentra bien avanzada. Aunque el Gobierno no ha dicho todo sobre los avances, por primera vez, se contempla la posibilidad de la desmovilización de las Farc. Y hay razones para creerlo. Tanto de parte del Gobierno como de las Farc. El primero creó las condiciones con iniciativas claves como la Ley de Víctimas y la Restitución de Tierras. El marco jurídico para la paz, le dio el soporte legal y despejó el camino. La justicia transicional le abre las puertas. Otras iniciativas que se tramitan en el Congreso, complementarán ese esfuerzo. Pero además, los negociadores del gobierno no fueron escogidos al azar. Todos tienen experiencia en negociación de conflictos. La presencia de dos generales, experimentados y con amplios conocimientos en el terreno militar, le imprimen otro componente significativo a la hora de la negociación. Los dos generales en retiro, serán, sin duda, una garantía. La selección de los negociadores de las Farc, con amplia experiencia y trayectoria, no fueron casuales. En el equipo están representados todos los sectores de esa organización insurgente, desde los más legendarios como el ‘Sargento Pascuas’ hasta los más ‘duros’. Y otro ingrediente, la sombra de ‘Tirofijo’ estará en la mesa con Sandra Ramírez, su compañera. Aunque Oslo, no definirá el rumbo, por lo menos marcará la pauta en la hoja de ruta que trazaron las partes y que se concretarán en Cuba, o en otro país, según las condiciones. Lo claro, es que nunca antes, Colombia había mantenido tanta esperanza, para poner fin al conflicto que lleva medio siglo.