La representante en Colombia de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU Juliette de Rivero reveló que ha recibido denuncias por el asesinato de 180 líderes sociales. Además, publicará un documento con el registro de muertes provocadas por el uso excesivo de la fuerza durante el paro nacional.
Redacción Web/LN
Juliette de Rivero, la representante en Colombia de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU dio detalles de las denuncias que ha recibido de asesinatos de líderes sociales, las cuales ya van en 180. A su vez, también confirmó que dará a conocer un documento con un registro muertes provocadas por el uso excesivo de la fuerza durante las protestas sociales. Instó a que estos casos no queden en la impunidad.
“Es cierto que lo que ocasionaron estas protestas fueron las grandes desigualdades que existen en Colombia y la necesidad, sobre todo de los jóvenes, de pedir más oportunidades, más acceso a la educación, al empleo y fue en su mayoría una movilización pacífica, importante, democrática. Eso hay que valorarlo. También hubo instantes y momentos de violencia, hubo muchas pérdidas humanas por el uso excesivo de la fuerza pública y creo que es un balance de lo que ocurrió y de lo que se puede mejorar en la gestión de las manifestaciones. Cómo se deben gestionar las manifestaciones para evitar este tipo de casos de uso excesivo y también cómo garantizar la manifestación pacífica e incitar a los jóvenes de usar ese derecho de manifestación pacífica”, indicó.
A su vez, la funcionaria recalcó que es de suma importancia que el Gobierno Nacional asuma el compromiso de cero tolerancias frente a los abusos que se presentaron durante el paro nacional.
“Yo creo que lo que ha sido muy importante es el compromiso del Gobierno de tener cero tolerancia frente a los abusos que han podido ocurrir y el compromiso de investigar y de sancionar esos abusos y de hacerlo también en la jurisdicción ordinaria. Es muy importante que el Estado investigue esos casos de abuso y que no queden impunes. Que las reformas que se están proponiendo para la Policía sean examinadas, que haya un debate público abierto y amplio sobre las necesidades de reformar la Policía para tratar de mejorar estas gestiones de manifestaciones hacia el futuro”, recalcó.
Finalmente, Juliette de Rivero manifestó que ha recibido denuncias de 180 homicidios de personas defensoras de Derechos Humanos, de los cuales 67 ya están verificados y 30 están en proceso de verificación.
“Esta cifra es muy preocupante, muy elevada pero no representa toda la violencia que se sufre en los territorios. También hay otras formas de violencia como son los confinamientos de las comunidades, las restricciones a su movilidad y las amenazas que sufren personas defensoras de Derechos Humanos en el país. El asesinato de todo líder y de toda lideresa es una tragedia para su comunidad y para el país porque ellos son las voces de sus comunidades muchas veces ante actores armados muy violentos que quieren vulnerar los derechos de estas comunidades”, finalizó.