Tras casi un año de gestiones y de tocar puertas y corazones de buena voluntad, el hogar de paso La Casa Donde Mamá abrió sus puertas. Lo que era sólo un sueño se convirtió en realidad gracias al esfuerzo de un grupo de personas que “con las uñas” lograron gestar y sacar adelante una iniciativa sin ánimo de lucro, con carácter social, para ayudar a los más necesitados.
Yaneth Ibarra y Yesid Jiménez se conocieron por casualidad, pero sus afinidades sociales y de amor por el prójimo los llevó a crear el hogar de paso, un lugar que servirá de refugio a quienes tengan familiares en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital San Antonio o allegados de reclusos que vengan fuera de Pitalito y no cuenten con los recursos para pagar un hotel.
A Pitalito llega gente de todas partes que no tienen cómo pagar una noche para dormir, tales como familiares de pacientes del Hospital San Antonio, quienes deben permanecer en vigilia para cuidar a sus parientes enfermos.
Conscientes de esta necesidad y con ayuda de muchos amigos que poco a poco ayudaron con elementos materiales y gestiones, lograron arrendar una vivienda en el barrio Trinidad, donde fue inaugurado el hogar de paso el fin de semana anterior.
Yesid Jiménez, gestor de la obra, se mostró satisfecho de haber conseguido el objetivo. “Ahora lo que viene es seguir trabajando por la comunidad, todos los días estaremos en horas de la noche en el hospital identificados con chalecos para buscar aquellas personas que no tengan donde pasar la noche y así poderles ofrecer un albergue. Este es un proyecto a largo plazo que sacaremos adelante con la ayuda de Dios y las personas de buen corazón”, afirmó Jiménez.
