Es usual que durante estas épocas cedamos ante el frenesí consumista y terminemos olvidando que el mejor regalo de todos, es poder seguir disfrutando, otro año más, de la compañía de nuestros seres queridos. Sin embargo, a diferencia de otras épocas, los humanos tenemos que enfrentarnos, de forma diaria, a factores y agentes que amenazan nuestra existencia, tales como virus, enfermedades y hábitos de vida poco saludables.
Para poner un ejemplo, podemos hacer referencia al Virus del Papiloma Humano y su vinculación con diferentes tipos de cáncer en hombres y mujeres. Es en el caso de las mujeres, donde este virus muestra mayor letalidad, siendo responsable de aproximadamente cincuenta muertes semanales, de acuerdo con cifras publicadas por el Observatorio Global del Cáncer. Dicho de otro modo, las cepas carcinogénicas de este virus matan anual y aproximadamente a 2600 mujeres. En el caso de los hombres, este virus se encuentra asociado al cáncer de ano, pene y orofaríngeo. La buena noticia es que, por medio de acciones como la vacunación y el tamizaje (con pruebas como la denominada “ADN VPH”), podemos contribuir a que las cifras empiecen a cambiar favorablemente.
En contraste, otros tipos de cáncer se encuentran asociados a la exposición que tenemos a ciertos tipos de radicación (como la solar y la ionizante) y sustancias (tabaco, asbesto, alcohol, entre muchas otras), llevando a que las estrategias para su prevención sean diferentes y especiales.
Desde un punto de vista jurídico, es posible evidenciar que el país está bien crudo en materia de armonización regulatoria y legislativa sobre el cáncer. Muestra de lo anterior, es que no contamos con una ley general del cáncer, pero si con varias leyes que han abordado aspectos puntales y aislados de los diferentes tipos de cáncer, dejando grandes zonas grises en torno a la protección económica, contractual, laboral y judicial de las personas con cáncer y de sus familiares. Como hijo de una sobreviviente de cáncer, quiero contribuir a que la realidad jurídica que enfrentan los pacientes y sus familiares cambie de forma radical y definitiva. En este sentido, quiero invitarlos a que me apoyen como @UnAbogadoContraElCáncer.