El asesinato de Mauricio Orjuela Mejía, investigado por el homicidio del abogado Luis Gerardo Ochoa Sánchez en Pitalito, prendió las alarmas en Jefferson Polo Mejía, testigo estrella de la Fiscalía por el crimen del profesional del derecho. “Es muy raro que desaparezca un tiempo…y cuando aparece lo maten”, dijo el testigo.
Rafael Rodríguez C.
El testigo estrella de la Fiscalía, Jefferson Polo Mejía, por el homicidio del abogado y ex personero de Pitalito Luis Gerardo Ochoa Sánchez, se encuentra preocupado no solo por un mensaje de texto intimidante que le llegó a su teléfono celular, sino porque pocos días después mataron al sicario que asesinó al ex funcionario público.
“El mensaje está siendo muy claro, entiendo o entiendo…”, dijo Polo Mejía, al referirse al mensaje que recibió a su número celular por WhatsApp y el asesinato de Mauricio Orjuela, alias ‘El Duende’, en la noche del lunes pasado.
El joven, quien se encuentra con principio de oportunidad por el crimen del abogado Ochoa Sánchez, no descarta que el asesinato de Orjuela esté relacionado con este caso. “Es muy raro que desaparezca un tiempo, no se presente a las audiencias virtuales, no comparezca y cuando aparece lo maten…”, manifestó Polo Mejía.
Indicó que a Orjuela no lo buscaron para hacerle un susto. “No fue un solo disparo, no iban hacerle un susto, fue claro que lo iban a matar”.
Reiteró que el asesinato del joven fue una advertencia y su seguridad y la de su familia corre peligro. “El mensaje está siendo muy claro, entiendo o entiendo. Mi vida y la de mi familia sigue corriendo riesgo…”.
Sobre el mensaje que le llegó el pasado cinco de agosto a su WhatsApp, no dejo en duda que se trata de una amenaza en su contra por ser testigo en el caso del abogado y ex personero Ochoa Sánchez. “La semana pasada me llegó un mensaje a mi wasap diciéndome que la basura debe estar en su sitio, que gente que no sirve que no estorbe y que hay que dejarla donde pertenece”.
Sostuvo que la Fiscalía lo dejó solo. “Mi abogado se ha comunicado con la fiscal sobre mi tema de seguridad y dice que Bogotá aún no responde. La directora regional de Fiscalías en el Huila no ha hecho nada”.
Aseguró que, pese al mensaje intimidante, al asesinato de Orjuela y la desatención de la Fiscalía en su seguridad, seguirá adelante como testigo principal del ente acusador en el crimen de Ochoa Sánchez. “Pienso seguir firme en declarar, voy hasta donde me dejen llegar, sigo como testigo de la Fiscalía con principio de oportunidad”.
Indicó que ya se debe comenzar a conocer la verdad de lo sucedido en el caso del abogado Ochoa Sánchez. “Creo que es hora de que se empiece a destapar…dejemos de ocultar algo que para nadie es un secreto, el por qué lo mataron y quienes fueron…”.
Polo Mejía además pidió perdón a la familia del profesional del derecho por no haber denunciado a tiempo el plan para asesinarlo. “A la familia Ochoa Sánchez y la comunidad laboyana le pido perdón, porque un día escuché que iban a matar a un abogado y no denuncié a tiempo y hubiera evitado todo esto, pero desgraciadamente las cosas no son como uno quiere y a veces escuchar no es suficiente”.
El joven, ingresó al programa de testigos protegidos, luego de que la Jueza Séptima Penal Municipal de Neiva con Funciones de Control de Garantías, le otorgara el principio de oportunidad con el ente acusador en agosto de 2019, por las pruebas testimoniales que llevaron a la Fiscal 28 Seccional de Pitalito a llamar a juicio al exalcalde Miguel Antonio Rico Rincón y los demás procesados.
No obstante, en agosto de 2020 la Fiscalía lo sacó del programa de protección de testigos, por haber cometido dos faltas a las reglas del programa especial.
Tras la investigación, la Fiscalía ha vinculado además a Eduardo Villanueva Murcia, Mauricio Parra Rodríguez, César Alberto Sierra Avellaneda, Edgar Núñez Guzmán, Luis Mario Colorado Rodas, Jefferson Polo Mejía, Stwar Sterling Santacruz, Campo Elías Salas Murcia, Mauricio Ortiz Parra y Héctor Alexis Flórez Hurtatis.
