El “pintor de los sueños”, el “arcano sexual develado” y el “surrealismo en traje metafísico disparate”, así describen importantes críticos, poetas y escritores a la obra del pintor huilense Filomeno Hernández.
Este maestro de la pintura, oriundo del municipio de Suaza, inició sus estudios en la Escuela de Bellas Artes en Neiva. En 1978, decide partir a España. “La meta era Barcelona. Yo quería otras cosas. Cuando llegué, me di cuenta de que Barcelona era el espacio para los escritores latinoamericanos. Para la pintura era más interesante salir a otros sitios. Italia ha sido muy especial. Allí existe una mentalidad más abierta hacia los latinos”, indica Filomeno, al hablar de su exposición en Neiva.
La obra de Filomeno Hernández se sumerge en el mundo del surrealismo y el erotismo, que plasman las profundidades de su proceso creativo. Así se refiere a sus obras el maestro que ha estado más de 35 años radicado en Suiza, y quien cuenta con el apoyo de ese país para exponer sus obras.
Los temas no son anecdóticos ni corresponden al decorado que llena las salas de exposiciones y las galerías. La temática de Hernández es el resultado de quien observa el mundo desde sus problemáticas, desde la desintegración.
La técnica de Filomeno
Filomeno usa en sus obras la técnica del grafito sobre poliéster. En algunas imprime una técnica mixta, aplicando un poco de tintas y lápiz de color a sus dibujos. Y en sus esculturas aparecen conceptos muy abstractos que en la mayoría son formas incluidas dentro de sus pinturas.
Concepto
La exposición que realiza por estos días incluye una serie de cuadros y esculturas que plasman su visión desde la mecanización del hombre, que se ha ido ampliando hasta incluir elementos eróticos y orgánicos. “La misma mecanización en la máquina de coser. La mecanización es algo más intencional y más preparada. El hombre casi esclavo de la mecánica. En el erotismo surgen elementos que son inconscientes, van surgiendo”, puntualiza Hernández.
Asimismo, expresa en sus dibujos conceptos ambientalistas, los impactos causados, la destrucción del mundo, resultados de los desastres naturales. “Estos paisajes se traducen en frustraciones del mundo, la destrucción, la sequedad, el árbol en destrucción. Lo que seguirá en toda la industrialización de la agricultura”.
Una gran trayectoria
Inició sus estudios en la Escuela de Bellas Artes en Neiva. En 1978 viajó y percibió el espíritu de Gaudí. Entre 1971 y 1981 estudió Artes Gráficas en la Stamperia d’Arte di Gerardo Lo Russo. En 1981 se radicó en Suiza donde estudió Francés y Literatura Hispanoamericana en la Universidad de Friburgo. Entre 1996 y 2002 vivió en Colombia y luego se radicó en Friburgo.
Recopilado
Durante su exposición se presenta un libro que, traducido al español, francés e inglés, recopila las distintas percepciones que más que ser críticos del arte, son escritores, amigos cercanos que escriben sobre sus pinturas.
Corrado Maltese lo considera el “pintor de los sueños y de la exuberante imaginación literaria”.
Jorge Eliécer Pardo dice: “Sus paisajes son producto de la observación, de la angustia del hombre contemporáneo que cuyo futuro se halla en el risco del abismo, en la antesala de la hecatombe”.
Para Jotamario Arbeláez es “el arcano develado en el laboratorio de un brujo atómico, tentándonos con la ostra roja del saber, las guerras intestinas de la paloma, todo un apocalipsis en cámara lenta, en fin, el surrealismo en traje metafísico disparate”.