“Los ciudadanos deben escoger líderes políticos que tengan como objetivo lograr el cambio social, que estén dispuestos a romper los paradigmas que siempre nos han gobernado, buscando otras formas de trabajo por la sociedad y que no sea comprando votos”. Entrevista a Juan Diego Amaya, concejal de la ciudad de Neiva.
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¿Cuál ha sido su propósito como concejal de Neiva?
Cuando llegamos al Concejo dijimos que íbamos a utilizar nuestra credencial para procurar el cambio social y la buena administración pública. El cambio social es lograr que el ciudadano neivano cambie de chip, pensando más en el largo plazo que en el corto, superando la envidia a través del trabajo en equipo y entendiendo que hay nuevos desafíos como la pandemia y el calentamiento global que merecen mucha atención. Pero sobretodo el cambio social es votar bien, no por quien más me ofrezca a mí, sino por quien más lo ofrezca al municipio, pues la mejor forma de ayudarle a todos es sacando adelante a Neiva.
Por otro lado, la buena administración pública no es más que entender que los recursos públicos son escasos y no son suficientes para solucionar todos los problemas que tenemos y por eso es necesario priorizar bien en que los invertimos. Le pongo algunos ejemplos de mala administración pública cometidos por la actual administración municipal, invertimos 9 mil millones en cubiertas con paneles solares en escuelas públicas cuando en muchas de ellas no hay baños ni salones, aumentamos la planta de personal en 21 mil millones al año con asesores de hasta 11 millones al mes, de los cuales muchos no cumplen sus metas de plan de desarrollo, mientras tenemos la malla vial en pésimo estado; el centro materno infantil sin terminar y dejamos que le corten por no pago la energía a los colegios públicos.
¿Qué puede decirle a los neivanos que ha hecho durante estos casi tres años que lleva en el Concejo?
La principal función de un concejal es el control político, por eso hemos hecho importantes debates de control político donde realizamos denuncias como la contratación del PAE en el año 2020, evidenciando que la empresa inicialmente contratada para hacer interventoría tenía relación directa con Asoformando del Charco Nariño, la organización seleccionada para operar el PAE.
También hicimos una fuerte oposición y votamos en contra de la creación de la empresa de economía mixta de alumbrado público, pues no vemos como beneficia al municipio y si al socio privado, perdiendo Neiva una gran oportunidad para convertirse en una ciudad inteligente y al parecer tenía razón, hoy dos años después lo único que observamos es el cambio de las luminarias y algunas expansiones, pero nada de ciudad inteligente o de telegestión para la seguridad ciudadana. Seguimos sin entender para qué era necesario el socio privado.
También hemos denunciamos los muchos incumplimientos en las obras financiadas con el crédito de los 60.000 millones de pesos, incumplimientos que a la fecha persisten, solo basta con ver los dos proyectos de priorización especial de ese primer crédito, el Centro Materno Infantil que quince años después no entra aun en operación, y la Unidad Permanente de Justicia que solo tiene un 30% de avance de obra.
Pero además del control político hemos sido autores de dos acuerdos municipales, uno es Neiva Ciudad del Sol que busca promocionar la industria de la generación de energía a través de paneles solares en Neiva y, la Política Pública de Protección y Bienestar Animal, que ha sido una de nuestras banderas, pues consideramos que la grandeza de una sociedad se puede medir en la forma que trata a sus animales como lo mencionaba Gandhi, sobre todo en tiempos del cambio climático y del coronavirus. Estamos seguros que Neiva será un mejor lugar para vivir el día en que se trate de manera más amable la naturaleza y los animales.
Como segundo vicepresidente del Concejo en el año 2022, ¿Cuáles fueron sus logros?
Me postulé como segundo vicepresidente de la mesa directiva por invitación de Camilo Perdomo y Jorge Ramírez, con quienes a pesar de las diferencias políticas que puedan existir, tengo una relación respetuosa y amigable. Como mesa directiva nos propusimos un gran reto, que era el de escoger contralor para Neiva tras el fallido intento de dos mesas directivas anteriores.
Neiva era una de las pocas capitales que no había logrado escoger contralor, razón por la cual existía una acción preventiva de la procuraduría. Como mesa directiva hicimos una convocatoria dónde por primera vez se presentaron más de 6 universidades acreditadas en alta calidad dando como ganadora a la Universidad de Cartagena, que no es una universidad de mis afectos, pero tal y como lo dispone la ley, fue la ganadora en un proceso de selección que tuvo cualquier cantidad de ojos, incluyendo los míos. Yo quisiera ver a una Universidad Nacional o Javeriana realizando la prueba académica para escoger la terna, pero tras invitarlas, ninguna universidad de las mejores 10 del país manifestó estar interesada.
A pesar de lo polémico que era el proceso de elección (por lo que ha ocurrido en el pasado), de intentos de saboteo y de comentarios mal intencionados, se escogió contralor este año, que fue el doctor Gilberto Mateus, por quien no voté porque voté en blanco ya que considero ineficientes las contralorías municipales (cuestan más recursos públicos de los que recuperan), pero de quien tengo una buena imagen y espero que aporte a la solución de los problemas estructurales de Neiva, uno de ellos el mal uso de los recursos públicos.
¿Cuáles cree usted que son los principales problemas que tiene Neiva?
Creo que son varios, pero gran parte de los principales problemas de nuestro municipio pueden sintetizarse en el hecho de que la gran mayoría de los jóvenes no tienen oportunidad de construir su proyecto de vida en Neiva y esto quedó evidenciado en el estallido social del año 2021. Muchísimos jóvenes neivanos emigran a otras ciudades o fuera del país para poder hacer su vida, y gran parte de los que se quedan, sobre todo los de familias de bajos recursos, o le cargan los libros a un político en búsqueda de empleo, o se van a la Policía y Ejército, o tristemente terminan en manos de la delincuencia o de la droga. Neiva cambia el día en que sus jóvenes tengan la oportunidad de hacer su vida de forma digna acá, en el lugar donde crecieron.
Y, ¿cómo se logra eso?
Como hemos dicho, los ciudadanos deben escoger líderes políticos que tengan como objetivo lograr el cambio social, que estén dispuestos a romper los paradigmas que siempre nos han gobernado, que tengan claro un proyecto de sociedad, que sepan cómo generar riqueza a través de la creación de industrias productivas, que tengan el carácter y la claridad mental para definir las prioridades de inversión de los escasos recursos públicos que tenemos y que controlen la ambición y no caigan en la codicia pues esto lleva a la corrupción. Necesitamos líderes que tengan ganas de obtener poder para sacar adelante la sociedad y convertir ese poder en virtud, no en despotismo o perversión.
