Desconocidos colocaron una bandera alusiva a la guerrilla del Eln en un puente peatonal de la capital huilense. El hecho se produce en medio del “paro armado” decretado por ese grupo ilegal en el país.
Redacción Web/LN
Con una bandera alusiva al Eln amaneció hoy viernes un puente peatonal de la ciudad de Neiva, en momentos en que esa guerrilla decretó un “paro armado” en el país.
La bandera fue ubicada en plena carrera Segunda con calle 21, hasta donde llegó personal de la Policía Metropolitana de Neiva y bajo protocolos, que incluyó el despliegue de un canino anti-explosivos, procedió a desmontarla.
El episodio causó esta madrugada numerosas reacciones de sorpresa entre quienes se movilizaban por ese sector de la ciudad rumbo a sus quehaceres diarios.
Históricamente, el Eln no ha hecho presencia en el departamento del Huila. Sin embargo, desde el año pasado esa guerrilla ordenó el envío de un grupo de hombres armados para buscar tomar el control de antiguos corredores de las Farc en el norte del departamento. Se trata de una comisión, que inteligencia militar ha identificado como “Estructura Centro Sur”, bajo la dirección del Frente de Guerra Oriental del Eln que delinque en Arauca.
De hecho, ayer, las autoridades reportaron la captura en flagrancia de Adriana Lucía Calabaz, una presunta integrante del Eln, en la vereda Rio Blanco del municipio de Baraya. En el mismo operativo, realizado por la Policía, el Ejército, la Fuerza Aérea Colombiana y la Fiscalía, fueron aprehendidos dos menores de edad. También fueron decomisados material de guerra, explosivos, prendas de uso privativo de las Fuerzas Militares y dinero en efectivo (al parecer producto del cobro de cuotas extorsivas a la población).
Esta mujer permanece en Neiva, en donde empezó a ser judicializada por los delitos de fabricación, tráfico y porte de armas de fuego, municiones y explosivos de uso privativo de uniformes de las Fuerzas Militares.
En diciembre de 2021, otros tres presuntos miembros del Eln fueron capturados en jurisdicción del municipio de Villavieja. Uno de los planes que tenía este reducto era atentar contra la vida del director de la emisora Alfa Estéreo, William Gutiérrez, en Neiva.