La Usco informó que 13 de sus cuentas bancarias fueron embargadas. Para el profesor Hernando Gutiérrez la universidad “está desinformando porque pretende hacer ver a los catedráticos como responsables de esta potencial crisis”.
A través de un comunicado oficial la Universidad Surcolombiana (Usco) oficializó un rumor que venía desde hace algunas semanas y es el embargo de algunas de sus cuentas bancarias: la alma máter precisó que son 13 en total, siete de ellas congeladas este año.
Lo anterior significa que, aunque haya plata en las cuentas, definitivamente no se pagará a tiempo “los honorarios de contratistas, proveedores de servicios como aseo y vigilancia, y algunos docentes catedráticos”, pues, “al estar embargadas, no se puede realizar el cumplimiento de estas obligaciones”, recalcó la institución. Como también que es “algo que nunca había sucedido en la universidad”.
La Usco cuenta son sedes en Neiva, Pitalito, Garzón y La Plata, y no dio a conocer el número concreto de personas perjudicadas directa e indirectamente, que serían decenas de trabajadores.
De otra parte, cabe anotar que la mayoría de docentes y personal administrativo de planta no se verían afectados porque esos recursos de funcionamiento, son girados por el Gobierno Nacional.
Los embargos obedecen a medidas cautelares decretadas por jueces, en el marco de múltiples demandas laborales que han interpuesto trabajadores contra la institución en distintas administraciones de varios rectores.
En el comunicado oficial detalla que se trata de “procesos de demandas instauradas ante los estrados judiciales por los docentes catedráticos, vinculados en su mayoría a la universidad, quienes reclaman una liquidación distinta de sus prestaciones sociales pagadas por la universidad desde hace varios años”.
Los saldos en contra
En su pronunciamiento la rectora Nidia Guzmán también asegura que ha venido corrigiendo yerros en el pago a los profesores catedráticos y que mediante un plan especial ha estado saldando demandas perdidas, no obstante, las cuentas siguen congeladas.
“Desde mi llegada al cargo como rectora realizamos los estudios y revisiones jurídicas para corregir y establecer los reconocimientos justos en lo sucesivo, como también ordenar un plan de pago de estos pasivos litigiosos que ascienden a la fecha a más de 6.000 millones de pesos. Es así como el año anterior, se dispusieron para este fin, 1.000 millones de pesos, y para este año se tienen proyectados pagar más de 1.800 millones de pesos, asumiendo la obligación establecida por los tribunales, y que no había sido cancelados desde años anteriores. Incluso se tiene proyectado, poder hacer una asignación presupuestal mayor el siguiente año, que permita disminuir aún más este pasivo. Sin embargo, no ha sido posible que sean descongeladas o desembargadas estas cuentas, debido a que estas solicitudes de embargo nacen por petición de las partes demandantes y los jueces de la república las hacen efectivas”.
De igual manera se refiere a una crisis financiera y recordó que en el país otras universidades enfrentan una desfinanciación “debido a la fórmula que establece el Gobierno Nacional a través de la Ley 30 de 1992 para el giro de los recursos, que tiene como base para el incremento anual, el IPC, lo que es insuficiente para soportar el desarrollo de la institución, y los gastos de funcionamiento que han crecido por la ampliación de cobertura”. Además, que con la Ley de Gratuidad ahora cuentan con menos recursos y dependen del Gobierno Nacional.
En dos semanas
Precisamente, una fuente extraoficial le informó a LA NACIÓN que es posible que los pagos se puedan realizar la otra semana, si llega una transferencia por $1.800 millones del Ministerio de Educación, por concepto de Ley de Gratuidad.
Además, ya habría un acuerdo con una abogada que representa a los docentes y en dos semanas varias cuentas serían desembargadas, en suma, se podrá pagar tanto a los contratistas, como a los proveedores y docentes catedráticos, de la Usco, que cuenta con acreditación de alta calidad en modalidad Multicampus.
“Desinforma”
Para el docente y sindicalista Hernando Gutiérrez el comunicado de la Usco falta a la verdad. De acuerdo con su visión, a los profesores les están desconociendo el pago de una bonificación y una prima de servicios, a las cuales tienen derecho los profesores de planta y esa es la causa de los problemas que tiene hoy embargadas las cuentas de la universidad. El lío ha sido la fórmula de liquidación.
“Está desinformando porque pretende hacer ver a los catedráticos como responsables de esta potencial crisis que enfrenta la universidad, cuando ellos no son los responsables, de hecho, no es un problema de esta administración, es una ‘bomba’ que se viene cocinando desde hace muchos años en la universidad, administración tras administración”.
Aseguró que los exrectores “han hecho caso omiso del problema, se han mantenido en su línea de no querer respetar a los profesores catedráticos, hasta que al fin y al cabo les reventó eso, los profesores que demandaron. Y de hecho, ya en otras administraciones ha habido reconocimientos, ha habido pagos”.
Aseveró que “la señora Nidia ha desconocido totalmente los derechos que tienen los catedráticos”. Pero en general, “la responsabilidad es fundamentalmente de las administraciones, no es esta la actual la única que tiene responsabilidad frente al hecho”.
“La universidad ha sido muy deficiente, tal vez lo peor que tenga la universidad es su acompañamiento jurídico, tiene un ejército de burócratas abogados que se desempeñan como asesores jurídicos y se ganan un infierno de plata, pero son lo más incompetente, lo más ineficiente, lo único que hacen es tratar de favorecer las medidas arbitrarias que toman la administración”, aseveró.
La próxima semana uno de los sindicatos de la Usco se pronunciará sobre este tema.
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