El cierre temporal de los servicios de hospitalización en la clínica Esimed de Neiva (antigua Saludcoop) terminó colapsando el sistema de salud en la capital huilense.
La reubicación de por lo menos 200 pacientes actualmente hospitalizados puso en evidencia la gravedad de la crisis en la prestación de los servicios medico asistenciales.
Adicionalmente se requieren por lo menos otras 250 camas para atender de la demanda y no hay disponibilidad. Alarmante.
“Tenemos 71 pacientes en urgencia retenidos. Además, tenemos registrados 165 pacientes más. En la red hay 250 pacientes que tienen que ser reubicados en cualquier lado y no hay disponibilidad”, explicó el representante de Esimed Neiva.
En su opinión, el panorama es desolador.
“Clínica Mediláser, colapsada, no se puede caminar por urgencias. En Uros, las urgencias las tiene en todos los pasillos. Tampoco hay cupos”.
Clínicas colapsadas
Según directivos de Esimed el panorama es crítico.
“En observación 38 pacientes, 12 prioritarios. En total tenemos 115 pacientes a quienes tenemos que buscarles cama. Medilaser reporta que han declarado una emergencia funcional y por lo tanto no pueden recibir pacientes. La clínica Uros con emergencia funcional y tampoco puede recibir pacientes. Igual el hospital de Neiva”, explicó Carlos Eduardo Ramírez.
“Las clínicas no tienen capacidad para atender servicios de hospitalización. En muchos casos están revisando la situación de cada paciente para remitirlos a hospitalización en casa para terminar el tratamiento”, precisó.
“En la clínica Uros Cafesalud tenía 82 pacientes, en Medilaser 49 pacientes y 14 en el Hospital. De resto, en el régimen contributivo 18. Esta semana dimos autorización solo a 24 pacientes. Sin embargo eso no quiere decir que esas 24 camas se puedan reemplazar con pacientes que están en la clínica Esimed. Las clínicas Uros y Medilaser tiene cualquier número de pacientes en los pasillos, esperando una camita que le desocupen”, reveló el médico Orlando Silva Duarte, coordinador de Cafesalud.
“Si había insuficiencia de camas, con el cierre de la hospitalización se necesitan adicionalmente por lo menos otras 200 camas -mal contadas- para atender la demanda.
Esto se convirtió en un problema de salud pública”, subrayó Segura Ochoa.
“Esta situación es un grave problema de salud pública no sólo para Neiva ni para el Huila. También para los usuarios de Caquetá, Cauca, Putumayo, Cauca y sur del Tolima, para cinco departamentos que requieren los servicios de salud. Todas las clínicas están full, no hay donde ubicar pacientes”, recalcó Seguro Ochoa.
“Es un problema muy serio, muy grave. Es un tema que hizo crisis. El cierre de 200 camas nos produce un colapso en la red. Estamos buscando alternativas para evitar el cierre de servicios en el Hospital Universitario por flujo de recursos. Si no logramos unos recursos en diez días tendremos que cerrar algunos servicios, expresó el gobernador Carlos Julio González Villa.
La crisis examinada el viernes pasado en una mesa técnica extraordinaria, precipitará la declaratoria de una emergencia para enfrentar el fenómeno.
La emergencia
El Gobierno Departamental definirá mañana la declaratoria de una medida de excepción para enfrentar la grave crisis.
“En principio el gobierno considerará una emergencia funcional para mitigar la crisis, para encontrar soluciones concretas”, anunció el gobernador Carlos Julio González. “La medida obligará a las EPS, a activar su red prestadora de servicios de salud, evaluar los flujos de cajas y determinar acuerdos de pago”.
“La medida de excepción agiliza muchos trámites. Le permite a la administración funcionar de manera rápida y solucionar un problema. La misma ley lo dice que podrá declararse máximo por seis meses”, anotó el médico Luis Édgar Galvis.
“Una medida de excepción obliga a que todos los actores del sistema se comprometan a cumplir. La medida se adopta por un acto administrativo y define unas metas para cada actor”, señaló.
“La emergencia funcional, que no implica recursos, es una medida extraordinaria para atender una situación concreta. La declaratoria de emergencia debe comprometer a todos los actores, a la red pública y a la privada”, insistió el procurador regional Isaac Vargas.
“La situación de la salud es muy grave y debe obligar a tomar decisiones oportunas, inmediatas pero responsables”, reclamó la defensora regional del Pueblo Constanza Arias Perdomo.
“La institucionalidad llegó a un acuerdo que me parece el más oportuno. Impedir el cierre completo de la clínica Esimed y asegurar la rehabilitación. Se tocaron los temas financieros pero primó la atención a los pacientes”, opinó el personero delegado, Andrés Vargas.
Alcances
La medida de excepción definirá acuerdos para garantizar la atención oportuna para los pacientes, la revisión de los criterios para la clasificación de pacientes en el servicio de urgencias (‘Triage’), asegurar una valoración rápida y ordenada de todos los pacientes que llegan a los servicios de urgencias, especialmente a aquellos que requieren de una atención inmediata.
Esto permitirá que los pacientes sean clasificados según la prioridad clínica. Funcionarios del Centro Regulador de Urgencias recomendaron una directriz obligando a la red pública y privada de segundo nivel, a revisar las remisiones que sean vitales.
Solución
Por ahora la clínica Esimed no será cerrada como propuso el gerente General. Se buscará en estos diez días un plan de contingencia para cerrar piso por piso mientras se refacciona totalmente y se compran nuevos equipos. El ascensor estará listo en diez días.
Alarmante déficit de camas
El cierre de los servicios como medida de seguridad ordenado por la Secretaría de Salud puso en evidencia el enorme déficit de camas en todas las instituciones de salud. La disponibilidad de camas es inferior a la abrumadora demanda, acrecentada por las remisiones no prioritarias procedentes de los 34 municipios del Huila y de los cuatro departamentos vecinos.
El volumen de urgencias en las redes pública y privada es superior a la capacidad instalada, la otra verdad.
“El déficit de camas en la ciudad es otra realidad. El hecho que tengamos pacientes en las áreas de expansión, que en teoría, deben ser para manejo de emergencias, muestra la gravedad a la que hemos llegado”, anotó el médico Faiver Segura.
“En la región estamos tan graves que en una emergencia adicional no tenemos como atender esa demanda”, afirmó Guillermo Riveros, jefe de Referencia del Hospital Universitario.
El dilema: cerrar o no cerrar
El cierre intempestivo de los servicios de hospitalización (adultos y pediátrica), además de radiología a imágenes diagnósticas desató el debate.
La medida fue adoptada mediante Resolución 0707 por incumplir los estándares mínimos contemplados en el Sistema General de Habilitación.
“No vimos ninguna mejoría, ni inversiones, ni gestión administrativa nacional o regional para corregir los hallazgos, superar las fallas y mejorar los servicios”, explicó la secretaria de Salud del Huila, Yanid Paola Montero.
El gerente General de Esimed, Sergio Vélez Castaño admitió que “la entidad pasa por un momento muy complejo, el gobierno no ha invertido todos los recursos, cumplir todos los compromisos ha tenido serias dificultades. Las normas son muy importantes pero no pueden estar por encima dela vida de las personas”, insistió Vélez Castaño.
“Yo cumplo la norma, hay que sacar a los pacientes, listo, pero donde los ubico, nadie los recibe porque no tienen camas. Las clínicas están en más del cien por ciento, igual el hospital. Comfamiliar tiene 140 pacientes que no ha podido ubicar en red externa. En el Hospital las urgencias están sobresaturadas. Este es un problema muy grave”, afirmó el ejecutivo nacional.
Vélez Castaño propuso en Neiva el cierre total de la clínica mientras se habilita la infraestructura.
La norma es muy importante pero no pueden estar por encima de las personas. Tomaron una decisión de cerrar unos servicios pero nos dejaron abiertos campos muy ‘sui generis’, las cirugías, los quirófanos, es decir que yo puedo operar pero no puedo hospitalizar a nadie, algo loco”, afirmó.
“En estas condiciones -recalcó- es mejor que cierren toda la clínica”.
El secretario de Salud de Neiva, Faiver Segura, criticó la medida porque no tiene en cuenta el impacto que genera para los afiliados y pacientes.
“¿La única opción era cerrar? Hay otras sanciones incluso multas hasta por diez mil salarios mínimos que eran más procedentes afirmó el Secretario de Salud de Neiva, Faiver Segura Ochoa.
El gobernador Carlos Julio González Villa, defendió la medida. “Este es un problema estructural, endémico del modelo. Si aplicáramos las normas con toda la rigurosidad tendríamos que cerrar todas las clínicas. La Secretaría está cumpliendo estrictamente con las normas y por duras que sean, tenía que garantizar un servicio de calidad”, enfatizó el mandatario seccional.
“En estos casos de habilitación no hay términos medios, se cumple o no se cumple. No opera en este caso los planes de mejoramiento, usados para dilatar el cumplimiento de una norma, eso lo dejé expresamente en la norma que siendo senador redacté, recordó el mandatario seccional.
“La Secretaría de Salud tomó una medida como lo dice la ley. En este caso como hablamos de la prestación de un servicio que es un derecho constitucional hay que mira si se puede tomar una medida excepcional mientras se resuelve un problema. Obvio que está afectando a toda una población”, precisó el médico Luis Édgar Galvis.
El mandatario regional consideró que hay claros incumplimientos no solo financieros que deben examinarse para enfrentar el tema.
La cartera morosa tiene en jaque a la red pública y está generando problemas en el flujo de caja.
Cafesalud advirtió que se están haciendo acuerdos de pago para asegurar la prestación de los servicios, según el reporte que entregó el médico coordinador Orlando Silva Duarte.
“Cafesalud, la EPS más grande del régimen contributivo, atiende en la regional 54 municipios de Huila y Caquetá. Con la mayoría de los hospitales se tienen legalizados a través de contratos los servicios en la red primaria. La red está abierta. Con algunos hospitales donde se han hecho acuerdos de pagos por incumplimientos de Cafesalud nos han cerrado los servicios, pero la red está abierta.
Hay hospitales como los de Pitalito, Garzón y La Plata donde están abiertos los contratos de segundo nivel, en la mayoría de los municipios tenemos contratos, menos en El Pital donde la gerente se ha negado sistemáticamente a firmar contratos con Cafesalud. Con la red privada se tiene contratos”.
Soluciones de fondo
El gerente General de Esimed anunció claros compromisos para remediar la crisis en la entidad y mejorar las instalaciones.
¿Compromisos?
Me parece que el gobernador buscó soluciones a una problemática que tenemos. Con la solución planteada y los compromisos que adquirimos podemos esperar que en un corto tiempo podamos dar reapertura a la clínica en Neiva.
¿Qué se definió?
Se definió que se hará una revisión de la sanción que tenemos y unos compromisos de Esimed para mejorar las condiciones locativas y así superar esta sanción.
¿Qué va a pasar con los pacientes?
Los pacientes pueden estar tranquilos, tenemos diez días más, pero esta semana estamos buscando soluciones para que la hospitalización sea permanente.
¿Qué pasará con la clínica Esimed?
La clínica se va recuperar con unas inversiones tanto en instalaciones como en equipamiento.
¿Y el ascensor?
Ya se contrató la remodelación. Estará listo en diez días.
Congestión en los servicios de urgencia.