Eduardo Gutiérrez Arias
Con bastante frialdad están registrando los medios de comunicación de masas la realización del Encuentro Nacional de Municipios y Ríos, durante los días 4, 5 y 6 de diciembre próximo, en el Centro de Convenciones José Eustasio Rivera de la capital huilense. El evento, que inicialmente fue convocado para los primeros días de noviembre y debió ser aplazado por los problemas que generó en el transporte aéreo el paro de Avianca, es organizado por la Federación Colombiana de Municipios y por la Alcaldía de Neiva.
Si se cumple la agenda, los alcaldes asistentes podrán escuchar a funcionarios y ministros del alto gobierno sobre los temas más álgidos de la vida política, económica y social del país. El tema de los ríos en la construcción de nuestras ciudades, que propuso el alcalde anfitrión Rodrigo Lara Sánchez, dado su interés y esfuerzo porque Neiva recupere el rio Magdalena como eje central de su desarrollo y que el país la mire en el futuro como la Capital del Rio Magdalena. Pero en la agenda están incluidos la mayoría de ministros con sus propios temas de políticas públicas de estado. El Ministro del Interior con el tema de la paz y el diálogo Nación/Municipios. Los ministros de educación, salud y vivienda sobre las perspectivas del sistema general de participaciones y la política social. El Ministro de Hacienda se referirá a la financiación territorial en lo que resta del actual gobierno. El Ministro del Transporte tendrá el tema de la sostenibilidad y navegabilidad del rio Magdalena. El Ministro de Agricultura disertará sobre el cierre de brechas en el campo colombino. El Fiscal General sobre la transparencia y el buen gobierno. El Vicepresidente hará la instalación del Encuentro y el Presidente lo clausurará.
Como se observa, la agenda tiene un alto interés para los alcaldes pero no da margen para el diálogo y el debate entre el gobierno central y las autoridades territoriales en los temas a tratar. Tampoco se abordarán asuntos que hoy son preocupación central para la mayoría de municipios del país cuyas rentas no alcanzan para financiar los costos administrativos de los mismos, menos para hacer inversión y desarrollo, limitándose a ejecutar los recursos que se les asignan por el sistema general de participaciones, en la forma definida por el gobierno central. La autonomía administrativa cada vez se pierde más. Creo que sólo una constituyente democrática, posibilitará la descentralización y autonomía que los entes territoriales del país y sus comunidades desean para resolver sus problemas y necesidades.