Así lo reveló un estudio hecho por científicos de la Universidad de Montpellier, Francia. Para el trabajo evaluaron a cerca de 30 personas entre los 21 y 69 años que aumentaban de peso cuando hacían ejercicio, y lo compararon con otro grupo de 15 voluntarios que, por el contrario, perdían peso. Cada uno de los participantes hizo varias series de cinco minutos de spinning con diferente porcentaje de intensidad. Los autores del trabajo, publicado en la revista Science & Sports, observaron que los que tendían a subir de peso quemaban grasa 20 por ciento más despacio de lo normal.
Esto se debe a que ciertas personas tienen un fenotipo que les impide eliminarla bien y los hace más propensos a subir de peso, incluso cuando hacen ejercicio. La recomendación para ellos, por lo tanto, es lo contrario a lo que les dicen a la mayoría: no hagan ejercicio. El hallazgo sirve para que los médicos no receten la misma rutina de actividad física para todos, sino que evalúen a cada paciente.
