Enrico Peñaranda, artesano empírico que por años ha embellecido las calles de Neiva con sus carrozas durante el San Pedro, cuenta cómo es el proceso de realización de cada una de ellas y cómo el arte ha estado siempre presente en su vida.
Caía una fuerte lluvia en la ciudad de Neiva aquella tarde de mayo. El clima de la capital huilense estaba fresco y aún así, las gotas de sudor en la frente de Enrico Peñaranda, eran más que evidentes, estaba algo afanado por terminar de pintar las flores y las hojas que harán parte de la carroza para el desfile folclórico departamental de las fiestas del San Pedro 2022. Lleva 33 años en esta labor de ser el creador de las más coloridas y representativas carrozas que han acompañado a las candidatas de los diferentes certámenes y, en cada una de ellas, imprime todo su esfuerzo y creatividad como artesano.
En el suelo de su taller pone las figuras recién pintadas para que comiencen a secarse, mientras realiza esta actividad, recuerda con una gran sonrisa en su rostro la primera carroza que realizó. Fue en 1989, con 21 años de edad, que Enrico asumió el reto de crear una carroza para su hermana quien era candidata del reinado popular de esa época. “Antiguamente los barrios eran los que se encargaban de hacer las carrozas de las candidatas populares, mi hermana estaba participando en ese reinado y como toda la vida he hecho manualidades, decidí hacerle la carroza a ella. Esa primera carroza tenía estatuas de San Agustín acompañadas por orquídeas”, relató Enrico.
Desde muy niño, Enrico tuvo esa inclinación por hacer arte con sus manos. En su infancia hizo parte de varios talleres de arte del pintor neivano Omar Gordillo Solano, y a su vez, de la mano de su abuela, Luz de Sánchez, aprendió a hacer figuras decorativas para los ponqués del negocio de su familia, la pastelería La Granadina. Conforme pasaba el tiempo, también desarrolló destreza en el manejo de la plastilina y el origami.
“Siempre he hecho manualidades, mi profesora fue mi abuelita porque desde muy pequeño me ponía a hacer muñequitos en azúcar para los ponqués en la panadería de mis abuelos y me enseñó a hacer pajaritos, pollitos, palomas y así, aprendí a manejar plastilina y el porcelanicrón”, afirmó.
De esta manera, poco a poco Enrico fue creando obras guiado por el arte que lleva en la sangre heredado de sus ancestros, y una vez realizó su primera carroza, no pudo parar y continuó su camino haciendo carrozas para las candidatas populares. Con el pasar de los años, también comienza a diseñarlas y realizarlas para los certámenes departamentales y nacionales, alusivos a lugares emblemáticos del Huila y objetos tradicionales con alto valor cultural.
Los materiales que más suele utilizar Enrico para elaborar una carroza son: papel, cartón madera y alambrón. En cuanto al proceso, este requiere de un arduo trabajo durante meses, en el cual están involucradas varias manos, pues aparte de los ayudantes que él contrata, sus tres hijos también le colaboran en ciertas labores. “Primero se saca un diseño, se hace un dibujo, lo que sería un boceto, y con base en ese dibujo se empieza a elaborar la carroza. Luego miramos cuáles son las figuras que se necesitan, si hay que tallar el icopor, empapelar. Después se pintan esas figuras y por último se hace el montaje”, explicó.
El trabajo de Enrico no solo se limita a hacer carrozas, también se ha encargado de diseñar y montar escenografías para las veladas de elección y coronación de las reinas de los diferentes certámenes en el Parque de la Música Jorge Villamil Cordovez. Además, elabora escenarios y murales con diferentes temáticas para eventos empresariales, restaurantes, colegios, entre otros. Igualmente, hace artesanías en totumo y en madera.
Para Enrico, el mayor reto a la hora de realizar su trabajo, se convierte al mismo tiempo en su mayor satisfacción, ya que considera que lo más difícil es lograr hacer algo bonito que sea del agrado de las personas, pero lo que más disfruta de ser artesano es precisamente asumir ese desafío de crear obras de arte, mostrarlas y ver que a otros les gusta. “Lo que más me gusta de ser artesano es la satisfacción de mostrar a las personas mi trabajo y que les guste y lo más difícil es hacer algo bonito que resalte y llame la atención”.
Para este año 2022, este artesano huilense de larga trayectoria quiere seguir mostrando su talento por medio de la realización de dos carrozas, una para el desfile folclórico departamental llamada ‘El San Pedro se vive desde la casa’ y una para el desfile folclórico nacional con el nombre de ‘Represa de Betania, un destino lleno de emoción y vida’.