La educación de las emociones es fundamental para sacara delante los proyectos entre los estudiantes. Para el experto Edgar González ‘en nuestras manos esta juzgar determinadas situaciones como: beneficiosas o catastróficas para nosotros, todo depende del cristal con que lo vea’. La educación de las emociones es fundamental para sacara delante los proyectos entre los estudiantes. Para el experto Edgar González ‘en nuestras manos esta juzgar determinadas situaciones como: beneficiosas o catastróficas para nosotros, todo depende del cristal con que lo vea’. Edgar Javier González Vargas Especial LA NACION Iniciaremos una serie de artículos donde aprenderemos acerca de los Errores del Pensamiento más comunes con los que convivimos durante nuestra vida y que marcan de manera significativa el bienestar propio e inclusive, pueden llegar a afectar las relaciones con los seres queridos y la manera de alcanzar nuestras metas. En esta primera entrega, hablaremos acerca de las posturas que nos ayudan a resolver las situaciones que aparentemente son de difícil control y que de no intervenir a tiempo, irán deteriorando poco a poco nuestro entorno familiar, laboral e inclusive el bienestar personal. De ahí, la importancia de: primero, entender como enfrentamos las diferentes situaciones para así tener una mayor claridad acerca de la manera adecuada de controlar nuestros pensamientos y mejorar como personas en armonía con nuestros seres queridos y el entorno. Es decir, en nuestras manos esta juzgar determinadas situaciones como: beneficiosas o catastróficas para nosotros, “todo depende del cristal con que lo vea” o “cada quien habla de la fiesta según como le fue” rezan estos dos conocidos refranes. Donde, ante las diferentes situaciones que vivimos a diario, podemos escoger si actuamos de manera Impulsiva, Evitativa o Asertiva y así mismo, esperamos la solución o no del reto que se nos presenta. Desmenucemos más detenidamente estos tres conceptos para continuar. ***La postura Impulsiva es aquella donde generalmente actúo sin medir las consecuencias, llevado por el frenesí y una gran carga emocional, lastimando a otros, transgredo las reglas sociales y morales e inclusive, ofendo a mis seres queridos. Actitud que desafortunadamente no aporta a la solución de los retos y por el contrario, me genera un efecto rebote, pues toda esa violencia y energía que emplee para lastimar o agredir, me va a afectar poco a poco, ya que, irá deteriorando mi soporte social, pues son escasas las personas que querrán acompañar a un ser que actúa sin medir las consecuencias. ***La postura Evitativa es resultado de esconderme o de esperar falsamente a que las cosas se resuelvan por si solas, solicitando inclusive, que otros las arreglen mientras nos escondemos tras una cortina de temores, y en algunos casos, de falso mal genio, pues este enfado es un temor que trata de ocultar nuestra incapacidad para enfrentar los retos o mejor dicho, la imposibilidad de “coger el toro por los cachos”. Pues guardamos la esperanza de que nadie vuelva a hablar del tema o que no nos topemos con algo que nos recuerde aquella situación que no pudimos resolver. ***Postura Asertiva es la que verdaderamente resuelve las diferentes situaciones por difíciles que estas parezcan, pues mide las consecuencias frente a las ganancias, valorando el riesgo de lastimar a otros o afectarse a sí mismo, es común encontrarla en personas conciliadoras y justas. Ahora, en base a las tres posturas Impulsiva, Evitativa y Asertiva, lo único que resta es detectar en cual de ellas nos ubicamos según como enfrentemos los retos que se nos presentan en la vida, es el primer paso para promover pensamientos más asertivos. Luego, dentro de la variada gama de los Errores del pensamiento, identificaremos por cuales nos inclinamos, por tal motivo, para la segunda entrega hablaremos acerca de los tres primeros errores: Todo o nada, Catastrofista y Descalificar lo positivo. *Psicólogo Especialista en adicciones Sub director Fundación SALEM Neiva – Huila Teléfonos: (8)872 1397 – 314 453 9125 ‘Ahora, en base a las tres posturas Impulsiva, Evitativa y Asertiva, lo único que resta es detectar en cual de ellas nos ubicamos según como enfrentemos los retos que se nos presentan en la vida, es el primer paso para promover pensamientos más asertivos’.