Tras una semana de luchar por seguir con vida, la muerte arrebató la existencia de la joven estudiante Angélica Dayana Castañeda Sarmiento esta madrugada de sábado. LA NACIÓN, NEIVA Tras una semana de luchar por seguir con vida, la muerte arrebató la existencia de la joven estudiante Angélica Dayana Castañeda Sarmiento esta madrugada de sábado. La joven estudiante de Grado Once en el colegio Inem, sufrió graves heridas en la cabeza, al accidentarse en la motocicleta en que se transportaba con un primo en momentos que asaltantes los empujaron, en el norte de Neiva, el pasado sábado 14 de enero. El percance ocurrió hacia las 8:00 p.m. a la altura de la Carrera Segunda con Calle 40 en el barrio Cándido Leguízamo. Allí, la joven de 15 años de edad y su primo Alejandro Sarmiento Suárez, chocaron en la motocicleta Yamaha RX-115 contra un árbol, luego que dos asaltantes le empujaron la cabrilla. Los delincuentes, identificados por las autoridades, al parecer comenzaron a perseguir a los primos Sarmiento desde que salieron de la casa en el barrio El Jardín rumbo a donde unos amigos en Cándido. “Salimos de la casa a encontrarnos con unos amigos y a reclamar una plata en Cándido”, dijo Sarmiento Suárez, al recordar que a la altura de la Avenida 26 con Carrera Sexta en el barrio Las Granjas, fueron abordados por los asaltantes que se transportaban en una motocicleta Yamaha RX-115 de color azul, parrilla blanca y sin placas, “nos salieron dos manes a quitarme mi moto, entonces yo me les escapé…”. El joven y su prima llegaron al sector de la glorieta de la Universidad Surcolombiana para tomar la Carrera Segunda y llegar donde sus amigos, pero fueron alcanzados por los delincuentes. “En la recta de la Segunda me iban a cerrar otra vez para quitarme la moto…”, señaló Alejandro. Agregó que en su intento por escapar de los hermanos asaltantes, acelera su motocicleta y llegando a la Calle 40 desacelera para girar a la izquierda e ir en busca del CAI en la Carrera Primera. Sin embargo, son alcanzados por los delincuentes que lo sobrepasan y los hacen accidentar. “Ellos venían pegaditos, cuando estaba frenando para voltear, me pasaron y le metieron una patada a la cabrilla, me descontroló la moto, me di contra el sardinel y un árbol”, explicó Alejandro. El fuerte golpe contra el árbol originó que Angélica Dayana saliera expulsada de la moto y se golpeara la cabeza contra la calle, sufriendo graves lesiones. “Mi prima cayó en el pavimento, ella quedó convulsionando”, manifestó su primo Alejandro, quien sufrió laceraciones en los brazos y piernas. LA NACION presenta sus condolencias a familiares y amigos.