El reconocido presentador y director de Estilo RCN, Sergio Barbosa, escribió para LANACIÓN que el tema del favoritismo de la prensa no siempre resulta tan conveniente para las candidatas; es tanta la presión que comenzamos a ejercer los periodistas hacia determinada representante, que sin querer podemos estar logrando el efecto contrario.
No tenemos que pensar mucho ni hacer conjeturas, las carreras hablan por sí solas. En 1999 la prensa estaba al lado de Carolina Cruz, la representante del Valle del Cauca; desde su llegada al certamen su porte, estatura y belleza la daban como segura ganadora. Cada pronóstico y cada conjetura apuntaban a que sería la ganadora, para la prensa no había más pero: ¡¡¡shass¡¡ en el último minuto Carolina se quedó aplaudiendo a la señorita Cundinamarca que se alzaba con la codiciada corona. Sobra decir que Carolina se lo merecía, solo tenemos que analizar su brillante carrera.
Vámonos más lejos. En 1984 Margarita Rosa de Francisco fue la gran favorita desde su llegada, la prensa no hacía otra cosa que comentar su clase, porte, belleza y: ¡¡¡shass¡¡ , aplausos para Sandra Borda que se llevó la corona , no más revisamos hoy la carrera de Margarita , podemos pensar que la prensa tenía la razón.
Viajemos por el tiempo sin orden específico y vámonos para el año 2010. Desde su llegada a Cartagena Natalia Valenzuela la representante de HUILA fue elegida por la prensa como la reina de los colombianos; su belleza, porte y estatura la convertían en una de las mujeres más bellas que ha pasado por la competencia y: ¡¡SHASS!!, otra vez una nueva favorita se quedó aplaudiendo mientras veía como la corona se quedaba en la cabeza de la señorita Valle Catalina Robayo.
El año siguiente 2011 desde que se bajó del avión Melina Ramírez la representante del Valle se ganó los mejores comentarios por parte de la prensa que la eligió reina desde el primer día : ‘aplausos’, que es la favorita de Raymundo Angulo, que Diego Guarnizo la ama, que las señoras de la junta la adoran, que está sobrada y: ¡¡shass¡¡ nuevamente, una más se quedó aplaudiendo a Daniela Álvarez que se robó el show con un vestido amarillo de Amalín de Hazbún.
Y es que a los periodistas no hay quien nos contradiga, cuando decimos esa es la reina lo hacemos con más autoridad que los jurados, nos convertimos en expertos, adivinos y analistas; tal vez esa presión que ejercemos desde nuestro quinto poder, hace que cuando llegue el jurado internacional se piense que la gran favorita tiene otro tipo de influencias y por hacer más hacemos menos. Como dice mi mamá, esperemos que en este orden o desorden de ideas, no entre mi querida señorita Sucre Ariadna Gutiérrez y: ¡!shass¡¡¡ tenga que aplaudir con mucha fuerza.
