Los grupos armados de manera ilegal, durante los dos últimos años, han utilizado las redes sociales para delinquir, sin ningún control. En la actualidad manejan TikTok, X, WhatsApp, Telegram, YouTube, Facebook e Instagram, para extorsionar, reclutar y hacer propaganda política. Según expertos, los subversivos no solo han entendido la dinámica, sino que, además le han sacado el mayor provecho a cada red social, yendo un “paso más adelante”.
Johan Eduardo Rojas López
johan.rojas@lanacion.com.co
Debido al amplio despliegue de las redes sociales, que permiten traspasar fronteras y llegar a diversidad de público, los grupos armados de manera ilegal han optado por utilizarlas para su beneficio. Desde allí ‘afilan’ sus estrategias y delinquen con mayor facilidad, sin ningún tipo de control. Esta dinámica en el Huila se ha recrudecido durante los dos últimos años y se teme que sigan ‘un paso adelante’.
Según el coronel Henry Herrera Arenas, comandante de la Novena Brigada, desde comienzos del año pasado (2023), los grupos subversivos empezaron a aprovechar todos los medios de lucha o herramientas que les funcionan para divulgar sus ideologías, sumar gente a sus filas y amedrentar a la población civil. Sin embargo, esa estrategia se ha pulido durante el 2024.
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Así operan a través de redes sociales
Sostuvo que TikTok es utilizada para engañar a “jóvenes incautos” y mostrarles una opción de vida en sus filas; WhatsApp, Telegram y el correo electrónico, para extorsionar, hacer citaciones y establecer comunicación con familiares de los secuestrados, además de terminar de “enamorar” a quienes vienen de otras redes sociales, en aras de generar confianza.
“Hay perfiles sin fotos, otros con imágenes, escudos de diversos grupos armados y otros con el rostro de miembros armados que se dedican a enamorar jóvenes. Utilizan armas, vehículos, dinero, música y todas las herramientas para convencer”, aseveró el comandante de la Novena Brigada.
Por su parte, Facebook e Instagram, al no ser redes sociales en las que encuentren el público que buscan, las utilizan para extraer información que requieren mediante trabajo de inteligencia; en X (antes Twitter) exponen sus ideales frente a la coyuntura del país y lo utilizan con fines políticos. Finalmente, en YouTube suben videos propagandistas, justificando sus discursos “trasnochados”. Allí se pretende generar empatía.
“Uno se da cuenta que ellos son muy activos y están vigentes en las distintas redes sociales. Claro que existe preocupación de que lleguen a otras redes sociales porque los bandidos siempre van a estar mutando y cambiando su actuar criminal. Ellos están mirando qué tipo de plataformas impactan y qué escenarios les sirven para tener una ventaja. Es algo complejo de manejar, la verdad, porque ellos emplean todas las redes sociales; inclusive sabemos que hay nuevas plataformas digitales en las que nosotros no hemos ingresado. Manejan tanta información que se quedan cortos”, expresó el coronel.
Y es que se trata de cuentas pasajeras que se cambian o eliminan con facilidad, luego de haber efectuado su cometido.
¿Qué se puede hacer?
Manifestó también que, como normalmente sucede, la delincuencia común se ha ‘pegado’ de ese actuar para sacar provecho. Ante ello, desde el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones de Colombia (TIC), la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional, se viene trabajando para contrarrestar esta realidad mediante investigaciones y el cierre de algunas cuentas.
Mientras tanto, el Ejército Nacional desarrolla campañas para que los padres de familia fiscalicen lo que consumen los menores de edad y que la población civil en general no se exponga a través de redes sociales, facilitando el actuar criminal de los delincuentes. Sumado a eso, cuentan con el Comando Cibernético y de Ciberseguridad, donde se detectan alertas y amenazas, además de la Dirección de Comunicaciones Estratégicas.
“Pero ellos no han dejado las prácticas tradicionales: constriñen a la población civil, reúnen a las comunidades en profundidad, impiden que llegue la presencia del Estado y la empresa privada a esos sectores para que traigan progreso, para seguir vendiendo su discurso trasnochado y se sigan sintiendo abandonados”, dijo Herrera Arenas, quien aprovechó para hacer un llamado al Alto Gobierno para que “siga invirtiendo en la población civil en zonas rurales vulneradas para lograr un control integral de los territorios”.
“Son sugestivos y estrategas”
William Calderón Vargas, coordinador de la Red Nacional de Iniciativas Ciudadanas por la Paz y contra la Guerra, Redepaz, en el Huila, dijo que los grupos armados residuales que operan en el sur del país han “modernizado” algunos de sus procesos mediante la utilización activa de las redes sociales.
Desde esa perspectiva, se pretende someter a la ciudadanía para que accedan a sus pretensiones, “algo muy delicado porque son muy sugestivos y estrategas a la hora de emitir sus contenidos a través de las mismas redes sociales. Ellos entendieron muy bien los beneficios que tiene cada red social y así mismo las usan”.
Indicó que las organizaciones delincuenciales tienen mucha sutileza para poder enviar a cierto grupo poblacional la información que ellos necesitan emitir. “Ellos entienden que la masividad está en las redes sociales, incluso en zonas vulnerables, y eso hace que se opere de forma indiscriminada, sin entrar en limitaciones como en otros países. De allí la importancia de que el Gobierno limite ese uso”, afirmó Calderón Vargas.
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Su verdad
Para él, esa problemática se puede combatir con las mismas redes sociales, pero entendiéndolas muy bien y “poniéndose a tono”, es decir, expresando su verdad. Es importante que las fuerzas militares y de policía “den un paso adelante” porque se seguirán expandiendo por otras plataformas digitales. Incluso podrían estar utilizando también la inteligencia artificial.
Recalcó que para los hombres armados las emisoras clandestinas, páginas web y su equipo de prensa (porque lo tienen), no han sido suficientes porque se limitaban un poco, por ende, buscan otras alternativas.
“Para todos es sabido que los conflictos internacionales han sido ampliamente divulgados por redes sociales y cada una de las partes expone su verdad, justificando sus acciones. Ese ejemplo lo están siguiendo los grupos armados: utilizando mecanismos para poder facilitar y justificar su acción delictiva”, reseñó el coordinador de Redepaz.
La generación Z y Alfa, las más expuestas
Por su parte, Henry Rubiano Daza, especialista en Comunicación Digital, precisó que las redes sociales son herramientas que posibilitan la comunicación hacia beneficios particulares y, en ese sentido, el problema es el uso que se les da. En este caso, al saberlas utilizar, están llegando a una mayor población, especialmente perteneciente a la generación Z (1995 – 2009) y Alfa (a partir de 2010, considerados nativos digitales).
“Estar conectados es tener la posibilidad de ser más efectivos en lo que queremos comunicar de acuerdo con nuestros intereses. Entonces, claro que es un peligro y eso nos lleva a pensar en los problemas de adicción a las redes sociales, como la pornografía y el consumo indiscriminado, lo que genera que muchos se arriesguen a todo por encajar en algo. De allí que, para combatir esa realidad, se deben utilizar las mismas redes sociales. Esa es la solución”, expuso el profesional en Ciencias Sociales.
¿Van un paso más adelante?
Según el experto, “simplemente ellos están haciendo mejor las cosas en cuanto a la utilización de redes o están siendo más efectivos. Van un paso más adelante”, así suene crudo. Esto para él devela otra realidad que sufre el país y expone las necesidades existentes al interior de las comunidades, que deslumbradas “por los ofrecimientos” acceden a las pretensiones. Es así como, para los grupos armados, tanto Facebook como Instagram son quizás menos útiles para reclutar “porque las generaciones que allí quedan son mayores”.
“Claro que debemos estar preocupados por cómo están siendo utilizadas”, detalló Henry Rubiano Daza, quien agregó que, “lamentablemente, están siendo mejor utilizadas por ellos que por la misma sociedad en general y el mismo Gobierno. Con material dinámico, explícito y corto. Y esto no es nuevo, solo que ha existido más cobertura”.
Romantizan para llegar de manera directa a las comunidades
Ana Silva Cerón, politóloga y experta en marketing político, a su vez, ahondó que cada generación encuentra de una forma diferente la manera de atraer lo que busca y eso lo han entendido los grupos armados, quienes han empezado a comunicar de manera diferente, saltándose las reglas flexibles interpuestas por las mismas redes sociales.
“Han encontrado la manera de pasar por encima de las normas que tiene cada red social y han romantizado el ejercicio que desarrollan, teniendo claro un estudio de mercado. Han sabido llegar de forma masiva, directa y convincente. Dan un aire de cercanía con las comunidades que, en últimas, se pueden llegar a sentir acogidas. Siempre el uso de las redes sociales es negativo cuando cae en manos equivocadas”, añadió Silva Cerón.
Para la experta, el problema radica también en que Colombia está muy atrasada en cuanto a reglamentación de redes sociales y captación de bases de datos, lo que le da mayor cobertura sobre las comunidades a diversos sectores. “A todas las esferas institucionales se les olvida lo que es la comunicación en Gobierno para tener una comunicación más cercana y asertiva con la población. Ese vacío es aprovechado para delinquir”, concluyó.
Se están bloqueando cuentas
La Defensora del Pueblo en el Huila, Johana Elena Rojas Herrera, en esa misma línea, dejó claro que, en el departamento, sí se están utilizando las redes sociales para actividades criminales.
“La Fiscalía, en consejos de seguridad, nos han indicado que están bloqueando ese tipo de cuentas, pero más se demoran en hacerlo que los grupos armados en volverlas a abrir”, aseguró.
Por último, el coronel Carlos Eduardo Téllez Betancourt, comandante del Departamento de Policía Huila, mencionó que a través de las investigaciones que se han realizado se han dado cuenta de que hay ofrecimientos de diversas índoles para “cautivarlos” y hacer que se presenten en zonas rurales del Cauca. La invitación, entonces, es a denunciar ante las autoridades competentes y manejar las redes sociales de manera prudente.
