Aydee Marciglia Bello, viceministra de Vivienda, visitó ayer el Huila con el propósito de firmar un convenio con la Gobernación para mejoramientos de vivienda en 10 municipios del departamento. La funcionaria aseguró que el gobierno Petro ha entregado más subsidios que los anteriores. Aníbal Rodríguez, presidente de Camacol Huila, desmintió la afirmación.
Carolina Argüello Cruz
Carolina.arguello@lanacion.com.co
En su visita a Neiva, la viceministra de Vivienda, Aydee Marciglia Bello, se refirió a los esfuerzos que viene adelantando el Gobierno Nacional para la reactivación y fortalecimiento de la construcción, aseguró que en comparación a lo que advierte el sector, las cifras demuestran un avance significativo.
Para la funcionaria en lo corrido de 2024, en el marco del programa de subsidios para la adquisición de vivienda, se ha venido trabajando tal como en 2015 cuando inició Mi Casa Ya. Sin embargo, este programa de política pública que reduce el déficit cuantitativo está en proceso de rediseño debido a la crisis fiscal que atraviesa la Nación.
“Es más, aumentamos el número de subsidios. Hace tres semanas asignamos el subsidio número 50.000, si miran el promedio histórico de asignación de subsidios antes de pandemia, por años, se asignaba aproximadamente 38.000 subsidios, entonces, no entiendo. Las cifras de asignación a mí me dan otra realidad”, indicó.
Señaló que ha habido un repunte en la adquisición de vivienda, sin embargo, “claramente, hay mucho por hacer, mucho por trabajar”. La viceministra Bello añadió que la reactivación económica del sector de la construcción es un compromiso del Gobierno Nacional.
“Estamos trabajando muy de la mano con el sector constructor, tenemos una buena relación con Camacol, con quien estamos mirando alternativas porque conoce también la situación presupuestal actual, estamos trabajando decretos de reactivación económica que pueden ayudar a potenciar no solo la vivienda VIS. El Ministerio ha tenido unos recortes de recursos importantes, no sabemos qué va a pasar con la Ley de Financiamiento, muy posiblemente no pase, lo que implica que vamos a tener muchos menos recursos para la asignación de subsidios”, acotó.
Tasa de interés
En el reciente Congreso de la Construcción, uno de los puntos abordados fue el alto porcentaje en tasas de interés para vivienda nueva, a lo que la funcionaria refirió que desde el Ministerio se han firmado pactos con la banca y el sector solidario para la disminución de puntos porcentuales, así como de requisitos para acceder a ellos, teniendo en cuenta las familias que no tienen cómo demostrar sus ingresos.
“Hace un año las tasas de interés estaban sobre el 16%, a hoy estamos hablando del 10% o hasta menos para la adquisición de vivienda. Ha habido un reajuste en tasas de interés muy significativo, casi más de 5 o 6 puntos porcentuales. Estamos trabajando en varios frentes para poder reducir este déficit”, manifestó.
Reactivación
La viceministra Aydee Bello, además, dijo que el Ministerio de Vivienda estableció recientemente un decreto para la reducción de la cuota de ingreso para que sea más fácil acceder al crédito de vivienda NO VIS.
“Si uno mira juiciosamente las cifras, ellas muestran un repunte, después de pandemia, el sector se vino abajo y estamos en el proceso de recuperación”.
De acuerdo con la funcionaria, la meta de asignación corresponde a 220.000 subsidios para adquisición de vivienda, de los cuales 123.000 ya fueron entregados. En vivienda rural, se considera llegar a 20.000 100% financiadas por el estado, siendo ya efectivas 13.000.
Convenio
El Ministerio de Vivienda, la Gobernación del Huila y las Alcaldías de Neiva, Garzón, Pitalito, Altamira, Teruel, El Agrado, Palermo, Tarqui, Colombia, Guadalupe firmaron un convenio para el mejoramiento de vivienda por una inversión de $15.529.800 millones, de los cuales el Gobierno Nacional aportará $10.179 millones, con el propósito de reducir el déficit cualitativo que tiene que ver con el mejoramiento de la calidad de vida en materia de infraestructura y que será desarrollado por medio del Fondo de Vivienda de Interés Social – Fonvihuila.
“Los recursos por unidad habitacional depende de dónde estén ubicadas, para mejoramientos urbanos, son 12 salarios mínimos, y para rurales, hasta 18”, explicó.
“La construcción de vivienda nueva no es una prioridad del Gobierno Nacional”
Al paso de los anuncios de la viceministra de Vivienda, Aydee Bello, Aníbal Rodríguez, presidente de Camacol Huila, desmintió que los subsidios hubiesen aumentado, por el contrario, se redujeron en comparación al Gobierno anterior y en 2025 quedará un déficit de 30.000.
“Lo que se definió en el Plan de Desarrollo es que durante el cuatrienio del presidente Petro se otorgarían 50.000 subsidios de Mi Casa Ya anualmente. Hasta el momento, en 2023 y 2024 sí se cumplió la meta, pero para el año 2025, de los 50.000, lo que nos han dicho es que, se reduce a 20.500. Ahí estaríamos con un déficit cercano a los 30.000 subsidios. En efecto, en Colombia se llegaron a comercializar, en el mejor año, 170 mil viviendas de interés social y prioritario, de las cuales en el último año del presidente Duque fueron financiadas con Mi Casa Ya aproximadamente 90 mil”.
Respecto a los subsidios que se entregarían durante los cuatro años de gobierno, el representante del sector de la construcción manifestó que la meta era de 400.000 mejoramientos de vivienda y “hasta ahora, después de 2 años de haber iniciado el gobierno, se han ejecutado 10.000 en todo el país, hay en ejecución aproximadamente 17.000 y están en estructuración con gobernaciones y municipios otros 70.000”.
Advirtió que si se continúa por esa senda podrían llegar apenas a 130 mil mejoramientos.
“La construcción de vivienda nueva no es una prioridad del Gobierno Nacional, la actual ministra de vivienda, Helga María Rivas, manifestó que su énfasis iba a estar en el hábitat y en el mejoramiento de vivienda, pero no en construcción de vivienda nueva”.
Aníbal Rodríguez reiteró su llamado al Gobierno Nacional para que apoye de manera contundente y con acciones palpables la reactivación del sector constructor que no se ha levantado del todo después de la pandemia del Covid-19.
“Lo que requerimos para dinamizar la construcción de vivienda nueva es otorgar subsidios a las familias para que puedan lograr su cierre financiero. Si no existen estas ayudas por parte del Gobierno Nacional, la demanda de vivienda de interés social cae de manera significativa y eso lo demuestran las cifras históricas en la comercialización de vivienda”.
Precisó que la construcción de vivienda genera demandas de insumos a la industria por $100 millones, mientras que los mejoramientos una demanda $10 millones.
“Lo que significa que, si vamos a inyectarle dinamismo a la demanda agregada para el sector industrial, la prioridad sería construir vivienda nueva, sin decir que los mejoramientos no son importantes. Reconocemos que hay que hacerlo, que aporta al mejoramiento de la calidad de vida de la población porque implica resolver problemas de necesidades básicas insatisfechas como deficiencia en batería sanitaria, pisos, estructuras de edificaciones y en cubiertas, pero deberíamos tener un equilibrio entre déficit cualitativo y cuantitativo”.
