Un profundo orgullo sentí al observar a Laura Sofía, una encantadora ‘Chapolerita’ de aproximados 10 años de edad qué, con su versatilidad y dulzura, atraía tanto a conocidos como a forasteros para promocionar su café; ese mismo que su familia ha cultivado de generación en generación en la mágica finca La Esmeralda, situada en la vereda Monte Bonito del municipio de Pitalito, Huila.
Esto ocurrió en el corazón de CAFÉS DE COLOMBIA EXPO 2024, la feria de cafés especiales más relevante y concurrida de nuestro país, organizada por la Federación Nacional de Cafeteros en Corferias (Bogotá) el fin de semana pasado.
En un escenario diferente al de nuestra región, reafirmé una vez más la fortaleza del café con marca Huila. Junto a la representación institucional del Comité de Cafeteros y la Cámara de Comercio, se hicieron presentes grandes y consolidadas cooperativas de nuestro departamento como Cadefihuila y Coocentral.
Un aspecto que llamó poderosamente la atención fue el esfuerzo realizado por más de 25 pequeños productores de nuestro departamento. Estos, en colaboración con trilladores, tostadores y comercializadores de la región, unieron fuerzas para financiar el stand (Huila Coffee Farmers) en esta feria. No exagero al decir que fue impresionante observar el considerable flujo de personas que acudían a visitarlos.
Todo barco necesita navegar largas distancias durante un extenso periodo de tiempo para llegar a puerto. En el transcurso de esta travesía, deberán enfrentarse a tormentas implacables, a la incertidumbre del vasto océano y hacer lo que sea necesario para mantener la moral de su tripulación a tope. Naufragar no es una alternativa.
Sea también el momento para reconocer a Germán Bahamón, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, por la templanza y certeza con las que ha guiado los destinos de la institucionalidad cafetera. Durante tres días, recorrí la CAFÉ EXPO 2024, donde intercambié palabras con cientos de asistentes a la feria, así como con aquellos que laboran en la cadena productiva, medios de comunicación, compradores extranjeros, entre otros; todos coincidieron en un sentimiento: hoy se respira MÁS FEDERACIÓN.
Durante las últimas décadas, las miles de familias cafeteras del Huila, junto con la gobernación del departamento, han realizado esfuerzos significativos para elevar nuestra caficultura al nivel en el que se encuentra hoy. Sin duda, este logro no habría sido posible sin el apoyo de la Federación Nacional de Cafeteros.
La caficultura representa unidad, y es fundamental que todos los huilenses lo comprendamos. Neiva, nuestra capital, debe esforzarse al máximo para posicionarse en el ámbito del café; nuestra economía requiere una dirección clara, y esta es la ruta a seguir. Las generaciones presentes y futuras no nos perdonarán si desperdiciamos esta oportunidad.
Segundilla: Se aproximan las elecciones cafeteras, la institucionalidad no puede distraerse con cantos de sirena.