La administración de Neiva había presentado al Concejo, en las modificaciones al Estatuto Tributario, que se terminara la excepción del impuesto predial a la Universidad Surcolombiana (USCO) y al Hospital Universitario de Neiva. Como era de esperarse, tuvieron dolientes esas instituciones, incluyendo concejales, y lograron que siguieran disfrutando de ese beneficio del no pago. Soy egresado de la USCO, pero el tema de los impuestos no se trata de “amores”.
Es un tema de principios constitucionales. Aunque los municipios tengan la potestad directa de establecer el impuesto predial, eso no quiere decir que no tengan en cuenta la Constitución. Pues, precisamente, en la Constitución se estableció en el preámbulo que para asegurar la “justicia y la igualdad” se fijaron unos principios que son la base de todo. Uno de ellos es la solidaridad (todos ponen) y en materia tributaria dejó claro que “El sistema tributario se funda en los principios de equidad, eficiencia y progresividad” (Art. 363). Punto. En los alegatos presentados para seguir favoreciendo a la USCO y el Hospital Universitario pasaron de agache aquellos principios tributarios, y se basaron fue en “amores”, “gratitudes” y “pobreza”. Que sigan sin pagar porque “no generan ganancias económicas”.
Si ese fuera el criterio, las familias pobres y vulnerables no deberían pagar predial, pues estas ¡sí que no generan ganancias económicas! Lo que hacen es sobrevivir y aun así deben pagar el predial. Que la función de la USCO y del Hospital Universitario es ¡social! y por eso no deben pagar predial. Si ese fuera el criterio, toda familia neivana cumple una función social y aun así tienen el deber impositivo de pagar el predial. Que tenemos una ¡deuda histórica! con la USCO porque ha formado un mundo de gente. Si ese fuera el criterio, pues también tenemos una deuda histórica con la población pobre y vulnerable, por la misma condición en que están, y además tienen el deber de ser los primeros en educar y formar a sus hijos, y por eso tampoco deberían pagar el predial.
Entonces, es claro, que la USCO y el Hospital Universitario de Neiva no sigan pagando el predial no es razonable con el principio de igualdad, pues siguen gozando de un beneficio excesivo: no pagan un peso. Mientras que los demás, así sean pobres, deben pagarlo. Lo razonable es que las instituciones paguen lo justo, de acuerdo con el principio solidario (todos ponen). La administración de Neiva hizo lo correcto: propuso terminar la excepción (no pago) del predial para la USCO y el Hospital Universitario acorde con principios constitucionales y tributarios. No se pudo.