La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la Jurisdicción Especial para la Paz, decidió aceptar de manera excepcional el sometimiento de Salvatore Mancuso como sujeto incorporado a la fuerza pública, entre 1989 y 2004.
Redacción Web/LN
El proceso para que el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso fuera aceptado en la JEP fue largo. Tras varias audiencias en las que participó de manera voluntaria de forma virtual, la Jurisdicción Especial para la Paz tomó este viernes una decisión definitiva sobre la intención de Mancuso de comparecer ante el tribunal.
Mancuso ya había hablado en la JEP manera verbal, siendo testigo en otro juicio en la Corte Suprema, y luego lo hizo de manera escrita. Su intención de sometimiento había sido expresada desde el 2017. Finalmente, este 17 de noviembre la JEP aceptó de manera excepcional el sometimiento de Mancuso como sujeto incorporado a la fuerza pública, entre 1989 y 2004. “Es decir, la JEP considera que Mancuso ejerció un rol de bisagra o punto de conexión entre paramilitares y la fuerza pública”, informó el tribunal.
“La decisión es el resultado de las exhaustivas contrastaciones y los análisis de los aportes de verdad hechos por el exjefe paramilitar durante cuatro días en una Audiencia Única de Aporte de Verdad, llevada a cabo en mayo pasado, por orden de la Sección de Apelación de la JEP, así como de la información que posteriormente aportó”, explicó la JEP.
De acuerdo con la Jurisdicción, la contrastación realizada por la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de lo dicho por Mancuso consistió en verificar si sobre los hechos mencionados en la Audiencia Única de Aporte de Verdad hay investigaciones, procesos o condenas. A partir de la contrastación hecha por la JEP, la Sala concluyó que en lo declarado por Mancuso ante la JEP había elementos presentes, efectivos, suficientes y novedosos respecto a hechos que ya se conocían o han sido investigados por la justicia colombiana.