Los Ángeles, Estados Unidos, vive una de sus peores tragedias por cuenta de la acción de devastadores incendios, el Palisades y el Eaton. Ha sido una larga semana de emergencias, que dejan 11 muertos, más de mil edificaciones arrasadas y 153.000 personas evacuadas. La ciudad norteamericana se encuentra bajo el toque de queda y la Guardia Nacional fue desplegada para evitar los saqueos.