El senador Ariel Ávila habla con LA NACIÓN y reconoce que la ‘Paz total’ del Gobierno de Gustavo Petro está en “cuidados intensivos”. “Eso ha salido mal. Yo creo que el Gobierno cometió muchos errores por no tener un método claro”, advierte. El reconocido politólogo plantea la necesidad de reorganizar la inteligencia de las Fuerzas Militares e incrementar el pie de fuerza para enfrentar la inseguridad.
Claudia Marcela Medina García
El senador Ariel Ávila, una de las caras visibles del Partido Verde, se distancia por completo del Gobierno de Gustavo Petro y en esta charla con LA NACIÓN lanza fuertes críticas por el manejo que le ha dado a temas como la seguridad, la ‘Paz total’, la economía, entre otros.
¿Cuál es la radiografía hoy de las reformas en el Congreso de la República?
Hay dos tipos de reformas; las reformas del Gobierno, que son 7, y otras reformas que no son del Gobierno, pero que prometen tener un debate muy duro. De las reformas del Gobierno, yo creo que van a pasar dos. Está la que crea la jurisdicción agraria; ya se aprobó una reforma constitucional, ya se aprobó una ley estatutaria y queda la ley ordinaria. Está la reforma a la salud, que va por Cámara y a la cual no le veo ambiente. Está la reforma laboral, que se discute en Cámara, pero cada día que pasa es más complicado; tiene alguna probabilidad de pasar. Hay un proyecto de autonomía territorial dirigido a modificar el sistema general de participaciones; este yo creo que va a pasar. Está también la reforma política, pero que arrancó con pie izquierdo; yo no le veo mayor futuro. También está la reforma a la educación superior para cambiar la fórmula de financiamiento; esta tiene más probabilidades de pasar. El Gobierno metió además una reforma a la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, la cual puede pasar. Este es el balance de las reformas del Gobierno.
¿Y qué pasa con las que no son del Gobierno?
Son iniciativas que generan mucha polémica. Por ejemplo, está la del cannabis o marihuana de uso recreativo. Es una reforma que la vez pasada se hundió por muy pocos votos y es posible que esta vez se vuelva a hundir, pero va a generar un gran debate. Hay otro proyecto relacionado con los tratamientos para personas con parejas LGBTI; sectores religiosos se oponen. También está un proyecto para prohibir el aborto, que es de los famosos provida. Algunos van a pasar y otros no.
¿Qué va a pasar con la reforma tributaria o ley de financiamiento como la ha llamado el Gobierno Petro? ¿La ve necesaria en momentos en que el bolsillo de los colombianos anda tan golpeado?
Es una reforma altamente inconveniente. Esa reforma no es necesaria porque la plata de los ministerios no se ha ejecutado; está en los bancos. Esa reforma no me gusta.
¿A qué atribuye que el Gobierno Petro tenga la plata de los proyectos guardada en los bancos? ¿Cuál es el problema?
Hay una mezcla de varias cosas: algo de inexperiencia; hay miedo en los funcionarios de que los acusen de corruptos y por eso no ejecutan; están paralizados. Yo creo además que a la Casa de Nariño le ha faltado saber qué priorizar y qué no. En lugar de estar pidiendo más plata, debe es ejecutar.
¿Cree que deba hacer más cambios el Presidente en sus ministerios y entidades?
Yo esperaría que no, pero va a pasar porque muchos van a renunciar para lanzarse a las elecciones.
¿Hay alguna propuesta para recuperar la dinámica económica del país?
El Gobierno había anunciado un paquete con una serie de medidas contracíclicas, es decir, de inversiones sociales grandes, pero eso no ha arrancado. Nos dijeron: vamos a meter mucha plata en vivienda rural para reactivar la construcción, uno de los sectores más afectados en esta crisis económica. Y no ha pasado. También nos dijeron: vamos a meter plata en vías, en trenes, pero no ha pasado. Creo que hay mucho anuncio, pero hasta el momento no se está concretando. Yo quiero decir aquí que la plata pública es contracíclica; cuando hay una crisis económica, hay que invertir en vías y viviendas para reactivar la economía, por lo que el Gobierno debería en estos momentos estar haciendo eso contracíclico. La gente en la calle no tiene plata; hay mucho desempleo. Todo el mundo utiliza eso que llamamos estrategias contracíclicas.
Senador Ávila, hablemos ahora de la ‘Paz total’, ¿qué opinión tiene de la estrategia de acercamiento del Gobierno de Gustavo Petro con los grupos ilegalmente armados? ¿Ha servido?
Yo apoyo los procesos de paz porque es una forma de abreviar el sufrimiento de la gente, pero eso ha salido mal. Eso no está saliendo bien; esa es la verdad. Yo creo que uno puede apoyar procesos de paz, pero lo cierto es que eso ha salido mal. Y ha salido mal por tres razones: la primera, es culpa del Gobierno, es decir, el Gobierno no tuvo un método para llevar a cabo las negociaciones de paz y las conversaciones socio-jurídicas. La segunda, por la crisis de explosión de economías ilegales; cae el precio de la droga y eso lleva a que el precio de la minería y la trata de personas se disparen en todo el país. Y la tercera razón es que hay una especie de anarquía criminal, los grupos están combatiendo entre ellos, hay muchas dificultades de saber las zonas de ubicación. Esas tres razones llevan a que la ‘Paz total’ esté en cuidados intensivos. Al final, yo creo que vamos a lograr alguna cosita en el tema del Frente Comuneros del Sur, otra pequeña cosita en el tema de dos o tres grupos urbanos, pero los procesos grandes como Eln, Clan del Golfo, no van a quedar.
¿Cree que no va a pasar nada con el Eln?
Eso no va a funcionar. Conclusión: la ‘Paz total’ está en cuidados intensivos y va camino hacia el fracaso.
¿Y el Congreso qué piensa hacer? ¿Ustedes como congresistas?
No se puede hacer nada. Eso depende mucho del Gobierno. Eso no depende de senadores. Yo creo que el Gobierno cometió muchos errores por no tener un método claro. Esto es un tema que depende del Alto Comisionado para la Paz, por ejemplo.
En el entretanto, la seguridad se sigue deteriorando, ¿qué hacer?
En el tema de la seguridad, la situación es muy preocupante por dos razones. La primera, porque se ha disparado la extorsión y uno de los departamentos más afectados es el Huila y particularmente toda esa zona del Huila, Caquetá, sur del Tolima. Yo estoy muy preocupado por lo que está pasando en La Plata, Huila. La segunda, notamos una parálisis de la Fuerza Pública. El grupo que más ha crecido en términos criminales es el Clan del Golfo, con el que nunca ha habido una mesa de negociaciones ni un cese al fuego. Y la Fuerza Pública dice: nosotros no podemos actuar porque hay ceses al fuego; eso es falso. En el caso del Cauca, hace 6 meses no hay cese al fuego con las disidencias y no han podido controlar el Cauca. Hace dos meses no hay cese al fuego en el Huila con el Estado Mayor Central y no han podido controlar lo del Huila. A mí lo que me preocupa es una parálisis de la Fuerza Pública y yo no sé si es producto de lo que ellos dicen de que hay inseguridad jurídica, de que están desmotivados, o que ellos, literalmente, no quieren combatir, quieren sabotear. Y una última cosa: el problema de seguridad rural que tenemos se está mezclando con un gran problema de seguridad urbana en el sentido de que también tenemos las ciudades desbordadas, que no tienen nada que ver con ‘Paz total’. En el caso de Bogotá, hay extorsiones y eso nunca lo habíamos visto en Bogotá. Pero, tampoco se hace nada.
Volviendo al tema de las disidencias, ¿cómo entender la pelea entre los de ‘Iván Mordisco’ y ‘Calarcá’?
Eso hace parte de la anarquía criminal de la que he hablado como una de las razones por las cuales la ‘Paz total’ no ha funcionado. Las disidencias de ‘Mordisco’ y ‘Calarcá’ se rompen y lo que se va a formar es una guerra civil entre disidencias. Las disidencias del Estado Mayor Central no es un grupo guerrillero. Yo ahí veo que no va a pasar nada ni con ‘Calarcá’ ni con ‘Mordisco’.
¿Cómo devolverles la seguridad y tranquilidad a los huilenses y a los colombianos?
Si fuera el ministro de Defensa, yo reorganizaría la inteligencia; la inteligencia de las Fuerzas Militares quedó destruida después del escándalo de las carpetas, donde persiguieron periodistas en la época Duque. La inteligencia de la Policía tiene que tener articulación con la de las Fuerzas Militares y, luego, esa inteligencia tiene que tener articulación con la Dirección Nacional de Inteligencia y la Fiscalía. Lo primero que yo haría es crear un comando estratégico de inteligencia para poder articular. También destinaría Fuerzas de Tarea Conjunta para las organizaciones criminales. Por ejemplo, una Fuerza de Tarea única para el Clan del Golfo; lo que uno está viendo es que la Brigada del Ejército de un lado no se conecta con la otra. Yo creo que hay que pasar de la territorialización de las Fuerzas de Tarea Conjunta a unas Fuerzas de Tarea contra organizaciones criminales. También hay que mejorar la inteligencia de la Policía Nacional. Y una última cosa que yo haría es incrementar el pie de fuerza.
No puedo dejar pasar por preguntarle por uno de los hechos políticos importantes: la inminente elección de Gregorio Eljach como procurador General de la Nación, ternado por el presidente Petro, ¿cuál es su opinión frente a este tema?
El procurador se elige de una terna, un candidato lo pone el Consejo de Estado, un candidato lo pone la Corte Suprema de Justicia y un candidato lo pone el Presidente. Y el Congreso elige. ¿Qué pasó? El Consejo de Estado y la Corte Suprema eligieron dos políticos. Si usted va a criticar al Presidente por poner a Gregorio Eljach, tiene que criticar a la Corte Suprema y al Consejo de Estado. Lo ideal sería haber tenido una terna técnica, es decir, que el Consejo de Estado, la Corte Suprema de Justicia y el Presidente ternaran técnicos. Eso no pasó. Y la realidad es que a nosotros los senadores nos va a tocar votar entre lo que nos pusieron. Esto demuestra que en este tema de las elecciones de entes de control como Procuraduría y Contraloría hay que tomar decisiones de cómo se hace. Desafortunadamente, la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado pusieron en estos niveles la discusión.
¿No le preocupa el futuro de la Procuraduría?
Eso va a ser una Procuraduría muy politizada, sea cual sea el que gane. La pelea está entre Gregorio Eljach, ternado por el Presidente, y el señor Germán Varón Cotrino, muy cercano a Vargas Lleras. Hay un conflicto de interés muy grande porque Eljach era secretario del Senado, mientras que Varón Cotrino fue 16 años congresista. La cosa es complicada.
Otro tema más, ¿qué piensa de las insistentes advertencias del presidente Gustavo Petro de que lo quieren asesinar?
Si él dice que lo van a asesinar hay que creerle; hay que protegerlo. Y frente al tema del golpe blando, yo no veo ningún golpe blando ni que quieran tumbar al Presidente ni mucho menos a dos años de terminar su mandato. Respecto a la seguridad, si él se siente amenazado, que le refuercen la seguridad. Y sobre el golpe blando, creo que está viendo fantasmas en donde no los hay.
Por último, ¿cómo se ha sentido ahora como columnista de LA NACIÓN?
Yo estoy feliz. Yo fui columnista de El Espectador, de El País de España; llevaba dos años sin ser columnista. Y ahora con LA NACIÓN estoy contento, con libertad total de expresión.
