Las acciones delictivas orquestadas por grupos armados ilegales no dan tregua en el Huila. Tan solo un día después del hostigamiento a las estaciones de Policía de San Luis y Teruel, se presentó una masacre en zona rural de Hobo. Cinco fueron los asesinados, dos de ellos oriundos del mismo municipio y los otros provenientes de Putumayo, Caquetá y Venezuela. Uno de los muertos sería alias ‘Caquito’, señalado de cobrar extorsiones.
Johan Eduardo Rojas López
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Como Eliecer Bautista Díaz de 48 años; Hernando Vela Bautista de 27 años; Nelson Fabián Vargas alias ‘Caquito’ de 19 años; y Stiven Camilo Alvarado de 22 años, fueron identificados cuatro de los cinco asesinados en la masacre que se registró el pasado 21 de julio en Hobo, en el centro del Huila. A la fecha, hay un muerto sin identificar.
Los dos primeros son oriundos del municipio y los otros tres eran desconocidos en la región, sin embargo, de acuerdo a lo informado por las autoridades competentes son provenientes del Caquetá, Putumayo y Venezuela.
“Conocidos los hechos se inicia un trabajo articulado con el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, de la Fiscalía General de la Nacional y seccional de Policía Judicial”, informó el coronel Carlos Téllez Betancourt, comandante del Departamento de Policía Huila, quien adelantó que, ya se cuenta con personal de apoyo para fortalecer algunas estaciones de Policía.
La versión que manejan las autoridades es que la masacre habría sido perpetrada por hombres del frente ‘Iván Díaz’, de las disidencias. Esto debido presuntamente a un “ajuste de cuentas”. “Se identifica una persona que es conocida con el alias de ‘Caquito’ que tenía una orden de captura vigente por el delito de extorsión, hurto y concierto para delinquir. La información que tenemos es que se trataría de una retaliación por parte de un grupo armado a esta persona, ya que estaría realizando extorsiones y hurtos a nombre de la estructura”, comentó el Coronel.
Escalada violenta
Los hechos se presentaron en la vereda Agua Fría en donde se reportó una ráfaga de fusil en un punto muy cercano a la escuela del mismo territorio. Según Yhon Alber Mora Lizcano, alcalde de Hobo, la información le fue suministrada de manera extraoficial cerca de las 9:00 de la noche del 21 de julio.
“Lo que registraron fue muy posiblemente una incursión armada en ese sector desde las 7:00 de la noche y a eso de las 9:00 de la noche me fue comunicado que había unas personas que habían fallecido en el lugar. El motivo por el cual la comunidad me comenta es porque de los que fallecieron hay dos personas trabajadoras y campesinas de la región, nacidos en esa vereda”, manifestó el mandatario.
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Inicialmente se oficializó la muerte de los dos campesinos de la zona, pero horas más tarde se confirmó otro cuerpo de una persona desconocida en la región, con un cartel que decía: “Por ladrones. Farc EP”. Sin embargo, desde ese momento se hablaba de dos cuerpos que fueron encontrados posteriormente en la vereda El Porvenir, aledaña a Agua Fría.
“Se desconocen los grupos armados que hacen presencia en la región. Son situaciones que han venido alterando el orden público y la sana convivencia del territorio, pero no tengo mayor información con qué fundamentar el hecho sucedido. De por sí Hobo es un municipio muy pacifico; a nivel departamental ha habido alteraciones de orden público, pero aquí se han venido tomando medidas propicias para garantizar la seguridad no solamente de funcionarios, sino de toda la comunidad”, aclaró la primera autoridad del municipio, quien a última hora y tras lo sucedido fue invitado al consejo de seguridad departamental que se desarrolló ayer en horas de la tarde en Neiva.
¿Hubo advertencia?
Mora Lizcano especificó que la preocupación es latente y más aún debido a que, según lo expresado por la comunidad, tres días antes, algunos habitantes del sector habían expuesto su extrañeza por la presencia de foráneos que acababan de arribar a la zona.
“Agua Fría históricamente es la vereda en donde mayor presencia ha habido de grupos armados de manera ilegal, precisamente por ser ese corredor que limita con Algeciras y Campoalegre, además de contar con unas características muy favorables para quienes llegan a la región. Y esa noche hicieron presencia como dando a conocer un manejo de control”, expuso el Alcalde.
Dijo además que, hasta donde conoce, los delincuentes se movilizaron en motos, pero se desconoce por donde entraron y salieron a la vereda que solamente tiene una vía de acceso, igualmente, no se tiene rastro de paradero de los atacantes.
¿Y los cuerpos?
Fueron los mismos familiares de los campesinos asesinados que gozaban de un importante y favorable reconocimiento entre la ciudadanía, quienes decidieron bajar los cuerpos al casco urbano del municipio sobre las 5:00 de la mañana. Lo que se sabe es que los dos campesinos eran personas dignas que tenían buen comportamiento social y contaban con el aprecio de la comunidad. El trayecto es de 45 minutos aproximadamente.
“Ellos tomaron la decisión de levantar a sus seres queridos (tío y sobrino) de donde habían quedado, es decir, sobre la vía y desplazarlos hasta el área urbana. Posteriormente la administración municipal desplazó un vehículo para que la comunidad y la autoridad de la acción comunal, hicieran el levantamiento del tercer cuerpo que no tenía dolientes”, concluyó el mandatario, mientras que anunció que, durante el consejo de seguridad no se especificó la llegada de más policías en su municipio, en donde luchan por el insuficiente pie de fuerza existente.
Concejales amenazados
Por su parte, Gustavo Triana Rodríguez, presidente del Concejo de Hobo, Huila, manifestó que en la corporación edilicia hay dos compañeros suyos que hace un par de meses fueron amenazados.
“Aquí la seguridad se le da cada quien, porque ninguno contamos con esquemas de seguridad; aquí cada uno se cuida como puede y no es más. Entonces, la verdad no sé, esperar a ver qué pasa. Hemos estado con hermetismo en esos temas porque tenemos que cuidarnos y cuidar a nuestras familias, y uno no sabe en la calle con quien hable. De hecho, ya cursan denuncias”, aseguró el cabildante.
Señaló además que aparte de la zozobra y la incertidumbre, la sorpresa abunda entre los habitantes del municipio que no terminan de creer y asimilar los hechos sucedidos en la zona rural. “En este caso uno no sabe a quién achacarle los hechos; la información dice que entraron en camioneta y esa vereda no tiene salida, sino solo una entrada. Uno se pregunta de dónde provino esta masacre debido a que es un cuello de botella”, insistió.
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Importancia de la medida de contención
Ante esto, el secretario de Gobierno y Desarrollo Comunitario de la Gobernación del Huila, Edgar Martín Lara, sostuvo que todo sigue siendo materia de investigación para definir con exactitud lo ocurrido y determinar qué grupos armados hacen presencia en esa zona del departamento.
“Todo es producto de la investigación, yo no puedo asegurar quién está operando allí. Nosotros tenemos sobre varias fronteras del departamento situaciones difíciles. Es necesario que fortalezcamos y garanticemos esa contención, es decir, que estos grupos que están siendo combatidos en el Cauca no pasen para el territorio y eso es lo que se planteó en el consejo de seguridad”, indicó el servidor público.
Explicó que el consejo de seguridad se realizó hasta ayer como recomendación de las Fuerzas Militares que se encontraban actuando durante el fin de semana. El Puesto de Mando Unificado se realizó únicamente como reacción a los ataques del fin de semana y, allí no fueron invitados los entes gubernamentales.
“Nosotros estamos enterados de todos los temas, pero dejamos para ayer lunes el consejo de seguridad con todos sus componentes para mirar el tema de qué es lo que se está haciendo y cómo vamos a responder a la ciudadanía con lo que está pasando”, aclaró.
Petición al Alto Comisionado de Paz
Mencionó que, durante las fiestas de San Juan y San Pedro, el Huila recibió 1.066 efectivos para la Policía Metropolitana de Neiva y 1.700 para el resto del departamento, además se contó con la presencia de grupos especiales.
“Hoy hay más de 180 hombres del Ejército Nacional preparándose para atender las contingencias urbanas y hemos tenido un incremento de pie de fuerza, sin embargo, lo que hemos pedido es que sea más contundente. Está el plan que el Ejército, la Policía y el Ministerio de Defensa, están promocionando y lo que queremos es que sea más rápido que vengan al departamento del Huila; digamos que se está haciendo de forma sincronizada a los períodos que ellos tienen, pero no a las necesidades del departamento”, indicó el secretario de Gobierno y Desarrollo Comunitario.
Para él, se podría decir que estas personas vienen con unas misiones específicas al Huila, aunque eso lo debe determinar la investigación que aún no está terminada. “Desde la Gobernación del Huila se ha elevado para el Alto Comisionado de Paz, la necesidad que haya en Neiva la verificación de estos hechos y de los que siguen porque nos están afectando grupos que están en el proceso de paz”, puntualizó, advirtiendo que se están tomando medidas para incrementar el pie de fuerza.
Finalmente, el gobernador del Huila, Rodrigo Villalba Mosquera, detalló que se analizaron “uno a uno” los hechos ocurridos los últimos días. “Lo que estamos viendo es la estrategia de unos grupos armados que reaccionan a unas medidas del Gobierno Nacional cuando levantan el cese al fuego. Hemos tomado algunas medidas con la fuerza pública, la primera, es el fortalecimiento de pie de fuerza con la Policía y el Ejército; estos puestos de Policía sobre la Cordillera Central se van a fortalecer todos. Hay una articulación muy clara entre los distintos organismos de las fuerzas pública”, informó el mandatario de los huilenses.
Pasar del diálogo a la acción
Carlos Julio González Villa, senador de la República, insistió al Gobierno Nacional en la urgente necesidad de pasar del diagnóstico a la acción en materia de seguridad en el sur del país.
“Urgentemente necesitamos una acción integral, determinada por la voluntad política de no permitir que avancen estas expresiones de criminalidad que están generando incertidumbre, dolor y sufrimiento entre la población civil. Convocamos a que se excluya la población civil del conflicto y a que se determinen rápidamente las condiciones de un acuerdo de paz que tenga reglas y respete los derechos humanos”, comentó González Villa.
Inconforme con las “respuestas”
Por su parte, el diputado del Huila, Rodrigo Lara Sánchez, dijo que, es muy llamativo que una vez se suspende el cese al fuego en el departamento del Huila, se incrementan estos actos que alteran la tranquilidad.
“Es la manera de llamar la atención y decir que están presentes y, por eso, se espera una respuesta de las Fuerzas Militares y de la Policía y en general la solidaridad de todos los ciudadanos. No son tiempos fáciles; desafortunadamente estos grupos han venido incrementando su número, presencia y acciones en el departamento del Huila y, por eso, hacemos un llamado para que se tomen acciones concretas que permitan controlar estos grupos que operan en el Huila”, afirmó Lara Sánchez, mientras dijo que es fundamental evitar que se sigan fortaleciendo e imponiendo normas de convivencia.
“Yo creo que no han funcionado las visitas del alto gobierno, esperamos mucho más y esa es la realidad. Yo me siento inconforme de lo que hasta hoy hemos visto de respuesta, queremos ver respuestas más concretas, que nuestra gente se sienta más tranquila”.