Libertad de prensa

Hoy, de nuevo, el mundo voltea sus ojos unos minutos hacia uno de los derechos esenciales a la condición del ser humano, esto es la libertad a informar y a ser informados. Hoy, de nuevo, el mundo voltea sus ojos unos minutos hacia uno de los derechos esenciales a la condición del ser humano, esto es la libertad a informar y a ser informados. Este 3 de mayo ha sido definido por la Organización de las Naciones Unidad y la Unesco como el Día Mundial de la Libertad de Prensa, que se convierte en un llamado a defender la libertad de expresión, puntal de los derechos individuales, la base de sociedades sanas y una fuerza de transformación social. En 1993 la Asamblea General de las Naciones Unidas, a iniciativa de los países miembros de la Unesco, proclamó esta fecha con la idea de fomentar la libertad de prensa en el mundo al reconocer que una prensa libre, pluralista e independiente es un componente esencial de toda sociedad democrática. La fecha recuerda la instauración de la Declaración de Windhoek sobre libertad de ejercicio del periodismo. Ocasión apenas propicia para rendir tributo de esta manera a los numerosos periodistas alrededor del mundo que, por decisión profesional, ponen en peligro sus vidas en el esfuerzo de informar a sus sociedades y de promover el libre flujo de la información. La libertad de prensa, así entendida genéricamente, constituye la base de todas las demás libertades y es el fundamento de la dignidad humana. La existencia de medios de comunicación libres, pluralistas e independientes es esencial para ejercer ese derecho; a su vez la libertad de los medios de comunicación supone la libertad de opinión, entraña el derecho de investigar, recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión, como se enuncia en el Artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos.  Una libertad que es esencial para la existencia de sociedades sanas y dinámicas. Lastimosamente este 3 de mayo vuelve el nombre de nuestro país a ponerse en primera fila de la lista negra de mayores violadores de este derecho fundamental, máxime ahora con la desaparición, al parecer secuestro, del periodista francés Romeo Langlios en medio de combates en Caquetá. Pero no sólo por este caso, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) este año volvió ha incluido en su lista a Venezuela, Cuba, Honduras y Colombia porque en estos países existen situaciones que afectan seria y gravemente el goce y disfrute de derechos fundamentales, entre ellos la libertad de expresión por el hostigamiento a la labor de los periodistas. Si bien Colombia ha mejorado sustancialmente, pasando de cifras aterradoras de decenas de asesinatos anuales de periodistas a un caso en 2011 de homicidio, los peligros siguen acechando en muchísimas formas, bien sea intimidación armada, extorsión económica, presión política o gubernamental, débiles condiciones laborales, ausencia de capacitación profesional o la misma autocensura. Y en los años recientes los ataques oficiales, en forma de normas y de persecuciones judiciales, contra la libertad de prensa en Internet, convertido hoy en el periódico libre y abierto más grande de la historia. Como bien lo señalan la misma ONU y la Unesco, esta es una ocasión para llamar a la defensa de la libertad de prensa; nos brinda la oportunidad para izar la bandera de la lucha en defensa de la libertad de prensa, como el único medio para defender las demás libertades. DESTACADO “El Día Mundial de la Libertad de Prensa, que se convierte en un llamado a defender la libertad de expresión, puntal de los derechos individuales, la base de sociedades sanas y una fuerza de transformación social”. EDITORIALITO La venta de la Electrificadora del Huila sigue en la lista, según lo anunció el ministro de Minas Mauricio Cárdenas. Sólo que no está definido el cronograma.  La venta es un hecho. Ojalá que la medida no nos coja de sorpresa y nos quedemos viendo un “chispero”.