Este sábado, se llevará a cabo en la ribera del Río del Oro en Neiva, el ‘Festival Libro al Río’, una apuesta de la corporación NunaHuil, por la conciencia ambiental y el sentido de pertenencia alrededor de las fuentes hídricas de la ciudad. “El objetivo es conectar con la parte social y cultural de las personas”, dice Alejandro Ramírez, integrante de la organización.
“Nace de las ideas, sueños ocultos y convicciones de un mundo mejor”, así es la Corporación Ambiental Social y Científica, NunaHuil, un grupo de neivanos comprometidos con el medioambiente y la cultura que se han propuesto un desafío monumental: revivir el sentido de pertenencia y el amor propio de los habitantes de Neiva por el río del Oro a través del ´Festival Libro al Río’. Alejandro Ramírez Cerquera, director de proyectos de Nunahuil, junto a otros integrantes del colectivo, da vida a esta iniciativa que se enmarca en el macroproyecto “Revitalización del Río del Oro”.
El Festival Libro al Río es más que un evento cultural; es un llamado a la reflexión sobre la importancia de la naturaleza y la cultura en la identidad local. “Celebramos al lado de la ribera del río del Oro. Es fundamental visibilizar su impacto como fuente esencial que desagua en el emblemático río Magdalena”, explica Ramírez. Este espacio, que se ha visto afectado por el poco cuidado de sus alrededores y se suma la presencia de habitantes de calle y el consumo de psicoactivos, se transforma durante el festival en un punto de encuentro para la creatividad y el aprendizaje.
Espacio para las artes
La cita, que se desarrollará el próximo sábado 26 de octubre, de 10 de la mañana a 5 de la tarde, incluye diversas actividades que abarcan desde talleres de música y pintura hasta teatro y poesía. “Hemos incluido una actividad especial llamada ‘lecturaleza’, donde los participantes pueden disfrutar de un picnic literario rodeados de naturaleza. Este año, contamos con la presencia de la reconocida cantautora María Vanedi”, comparte Ramírez, resaltando el enfoque inclusivo y familiar del evento.
Bajo el liderazgo de Andrés Caicedo y Estefanía Ramírez Cerquera, fundadores de la corporación, el festival busca no solo entretener, sino también educar. El impacto ambiental y pedagógico del evento y sus actividades es significativo, pues se aspira a transformar la percepción que se tiene del Río del Oro.
“El objetivo es conectar con la parte social y cultural de las personas. Deseamos que el impacto ambiental inspire un cambio de mentalidad en la comunidad y fomente un sentido de pertenencia. Es fundamental cultivar el amor propio hacia nuestras fuentes hídricas y hacia todas las iniciativas que llevamos a cabo”, dice Ramírez.
Además del festival, la corporación realiza investigaciones, siembra de árboles endémicos y recolección de residuos, estableciendo un vínculo directo con la comunidad para resaltar la relevancia de la conservación ambiental.
En un contexto donde la cultura y el medio ambiente han sido relegados, el Festival Libro al Río surge como un faro de esperanza, motivando a los ciudadanos a reconectar con su entorno y sus raíces. “Queremos impactar especialmente a los niños, sembrando en ellos el amor y el respeto por su tierra”, concluye Ramírez. Así, el festival no solo celebra la literatura y el arte, sino que también invita a la comunidad a reflexionar y actuar en pro de un Neiva más consciente y unido.