Después de las festividades en Neiva, es momento de volver a poner atención sobre las problemáticas de la ciudad. Las deficiencias viales aún persisten como en la carrera Primera entre calles Novena y Décima, donde los huecos dificultan la movilidad y representan un riesgo para los ciudadanos. Es hora de buscar soluciones para garantizar unas vías seguras para todos.
Armando Barrios
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¡Pasaron las fiestas! todos los neivanos y los turistas gozaron y bailaron al ritmo del Sanjuanero Huilense, comieron tamalito, lechona, asado y se disfrutaron los conciertos, ahora, es momento de volver a echarle un ojo, o dos, a las problemáticas de la ciudad de Neiva.
Las deficiencias por cuenta del mal estado de la malla vial, que se pueden ver en diferentes zonas de la ciudad, se mantienen vigentes, a pesar de que, la Alcaldía Municipal, ha ido subsanando ciertos sectores, realmente los esfuerzos, aún no han sido suficiente para que los neivanos, puedan transitar por unas vías seguras.
Para esta nueva versión de esta sección donde LA NACIÓN sale a las calles y escucha a los ciudadanos, el lugar seleccionado, fue la carrera Primera entre calles Novena y Décima, donde se encuentran huecos que dificultan visiblemente la movilidad, ya que estos se ubican en el centro de la vía, ocasionando lentitud y hasta incidentes y/o accidentes, siendo una zona de alto riesgo para la salud y bienestar de las personas que transitan por allí.
LA NACIÓN oye a la gente
María Jimena Córdoba, trabajadora del sector
“La verdad siento que este es un punto muy crítico, en cuanto al estado de la malla vial, pues yo llevo trabajando aquí hace casi 4 años, y estos huecos están presentes desde que conozco el lugar. En ciertas ocasiones los comerciantes han hecho como una especie de ‘vaca’ económica, para poder comprar cemento y rellenar, ya que afectan sus vehículos, además de que los costos para reparar estos daños siempre son Altos”.
Reinel Gómez, habitante del sector
“No ha habido una real intervención por parte de las entidades locales en este sector de la ciudad, son las personas con trabajos informales, las que han llenado (tapado) esto, lo que pasa es que cuando la comunidad hace este tipo de rellenos en temporada de lluvias, pues el cemento no resiste y el daño vuelve a aparecer más grande o más peligrosos”.