Los padres, primeros maestros de sus hijos

El éxito escolar de los niños depende del acompañamiento permanente de los padres de familia, pues con la participación de ellos se brindarán las herramientas necesarias para afrontar los logros académicos. El éxito escolar de los niños depende del acompañamiento permanente de los padres de familia, pues con la participación de ellos se brindarán las herramientas necesarias para afrontar los logros académicos. LA NACION, Neiva ‘Los padres deben aprender a estimular la educación de sus hijos  generando hábitos de estudio, pues el colegio brinda conocimientos, experiencias, vivencias, que los enriquece intelectual, social y afectivamente, pero el trabajo en casa, el interés y el acompañamiento de sus padres son los que afianzan y ayudan a buscar herramientas para enfrentar los retos del aprendizaje en la etapa escolar’. La anterior es una de las conclusiones del trabajo adelantado por Marisol Herrera Herrera y Erika Lizeth Serrano, estudiantes de noveno semestre de       Pedagogía Infantil en la Universidad Surcolombiana, en la Institución Educativa María Cristina Arango en la sede “Mi Pequeño Mundo”, donde crearon la Escuela de Padres ‘Tu Compañía Enriquece Mi Crecimiento Personal y Escolar’, como un lugar de encuentro donde mediante el diálogo se informe a los padres de familia acerca de las dificultades que presentan sus hijos, además para generar en los padres confianza en sus propios hijos y permitirles que expresen sus sentimientos. Explican que para un niño es relevante el acompañamiento de sus padres tanto en sus actividades de la vida diaria como en las actividades escolares. Este interés ayuda a sus hijos en la autoestima y a tener éxito escolar. Pero en la actualidad la mayoría de los padres por las necesidades económicas se ausentan todo un día del hogar y los niños quedan en la escuela, o en manos de la televisión o al cuidado de otros familiares; es así como se van sintiendo solos y van perdiendo la motivación escolar. Los padres preocupados por cumplir laboralmente dejan la responsabilidad del proceso educativo a la Institución Educativa olvidándose que ellos son los primeros maestros, los primeros ejemplos y modelos a imitar; que la misión del padre y de la madre es ayudar al hijo a que se desarrolle hasta la plenitud. El proceso de aprendizaje de los niños es responsabilidad tanto de la Institución Educativa como de su núcleo familiar,  quienes a su vez  deben trabajar en equipo, para así lograr acciones positivas y gratificantes para el futuro de los niños, estas relaciones deben estar basadas  en el respeto, el amor y lo más importante el acompañamiento de los mismos padres, ya que es el fundamento principal del éxito escolar en los niños.  De igual manera,  su autoestima y seguridad  cobraran mayor fuerza  reflejándose en los actos y relaciones con el entorno de los niños; púes es probable que en muchas de las Instituciones Educativas algunos de los padres de familia no siempre estén participando y mostrando interés por la formación académica, social y emocional de los niños; para esto se crean lugares de reflexión y encuentro entre padres e hijos, recordándoles que las dificultades que se presentan en la formación académica de los hijos solo es uno de los pequeños inconvenientes que se pueden presentar en la ardua tarea de ser padre. Anoten Algunos tips para tener en cuenta a la hora de orientar sus tareas: 1. Papitos demostrar interés por sus hijos en la etapa escolar. 2. Tener  un lugar especial en el hogar  para realizar las tareas. 3. Ayudar a los hijos a planificar su tiempo de estudio, fije una hora. 4.  Elimine las distracciones como el televisor. 5. Hablar con los hijos  de la importancia que tiene cumplir con los deberes escolares y de esforzarse para obtener buenos resultados en el colegio. 6. Hacerles saber a los hijos que confían en sus capacidades para aprender. 7. Animar a los hijos a leer cada día, la lectura es la clave para el aprendizaje de toda la vida 8.  Asistir a las reuniones que convoque el colegio, manteniendo el contacto regular con el profesor del hijo y participar de manera voluntaria en las actividades del centro educativo, cuya finalidad es proporcionar herramientas para educar mejor  a los hijos. Los niños que cuentan con la presencia y el respaldo de sus padres son mejores estudiantes. Fotos Suministradas