Los secretos de un país exitoso – Rafael Méndez Lozano

En reciente publicación del reportero Richard Anderson de la BBC de Londres titulada: “El poderío En reciente publicación del reportero Richard Anderson de la BBC de Londres titulada: “El poderío de la economía alemana: los secretos del  éxito”, se afirma que en Alemania, motor de la economía en Europa y segundo mayor exportador del mundo, se trabaja menos horas y los niños gastan menos tiempo en el colegio que en la mayoría de países desarrollados. El país ha soportado la recesión y es la única nación lo suficientemente rica para salvar el euro. ¿Por qué es la economía alemana tan poderosa y qué lecciones puede aportar? Anderson señala los siguientes factores que explicarían la situación: Primero.– La adopción, en su momento,  de una débil moneda circulante –el marco- con respeto al euro, esto trajo como resultado el abaratamiento de las exportaciones alemanas para los consumidores de ultramar y una balanza comercial con amplio superávit. Segundo.– El relativo bajo endeudamiento privado por parte de las empresas y personas naturales, quienes rehusaron gastar más allá de sus posibilidades, en contraste con lo sucedido en otros países europeos como Reino Unido, Italia, España y Portugal. En Alemania, gracias a este comportamiento cultural consumidores y empresarios no tuvieron necesidad de cortar bruscamente sus gastos al cesar los bancos sus préstamos durante la recesión. Tercero.- La reforma del mercado laboral de 2003, caracterizada por la protección al empleo, alto grado de confianza en la fuerza laboral  y empresas bien capitalizadas, permitió al gobierno social demócrata fortalecer sus vínculos con los sindicatos, obteniendo de éstos la  moderación necesaria para hacer frente a la inflación salarial. La reforma flexibilizó el mercado laboral de modo que mientras el desempleo campeaba en el resto de Europa, en Alemania apenas vario mínimamente, pues los trabajadores aceptaban trabajar menos horas a cambio de su estabilidad laboral. Andreas Woergoetter afirma que en Alemania “hay  una cultura de empresarios agradecidos que toman en cuenta los esfuerzos de los trabajadores”. Cuarto.–  Un sistema educativo que provee al mercado laboral de obra de mano altamente calificada. La jornada escolar en secundaria va hasta el mediodía, después de lo cual los escolares reciben entrenamiento vocacional. Los aprendices, jóvenes de ambos sexos entre los 15 y 16 años, dedican más tiempo a su entrenamiento laboral que al colegio. Después de 3 ó 4 años el aprendiz tiene garantizada su ubicación laboral. Si la persona posee sanas ambiciones y talento, puede ascender al nivel directivo aún en las más importantes empresas. Ahora bien, cabe contrastar la realidad alemana con lo vivido en un país como Colombia, no con el ánimo de copiar mecánicamente el modelo alemán, propósito irrealizable, sino de aprender con humildad y honestidad lecciones de vida que de ser debidamente asimiladas y aplicadas, mejorarían no sólo la competitividad de nuestro país sino la calidad de vida que bien merecen sus habitantes.