Academia Huilense de Historia[1]
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Este 30 de diciembre se cumplen 50 años de la muerte de Luis Ignacio Andrade, uno de los políticos huilenses más influyentes a nivel nacional durante buena parte de la primera mitad del siglo XX.
Nació en Altamira, el 7 de febrero de 1894. Hijo de Anselmo Andrade Charry y de Quiteria Díaz. Fue separado de su familia cuando tenía escasos meses de vida. Su madre y tres de sus cuatro hermanos murieron en el Caquetá en el término de dos años. A su padre, quien también murió en el Yarí, lo conoció sólo cuando cursaba el último año de bachillerato.
Estudió Filosofía y Letras en la Universidad del Rosario. Fue subdirector de la Normal de Institutores de Neiva, vicerrector y rector del Colegio Santa Librada. Se desempeñó como Secretario General de la Gobernación del Huila, Diputado a la Asamblea Departamental, Representante a la Cámara y Senador por el Huila. Fue Gerente del periódico El Siglo, Ministro de Obras Públicas y de Gobierno en la administración de Ospina Pérez, embajador de Colombia ante El Vaticano en la presidencia de Laureano Gómez y ministro de Gobierno del designado Roberto Urdaneta Arbeláez. Además, jefe de la delegación de Colombia a los actos de coronación de la Reina Isabel II de Inglaterra y miembro de la Asamblea Nacional Constituyente, entre 1953 y 1957.
Casó en Tello con Felisa Manrique Miranda, el 21 de agosto de 1921. De su unión nacieron tres hijos: Gema, quien contrajo matrimonio con Alfredo Ángel Hermida; Zita, casada con Belisario Arciniegas García; y Felio, quien contrajo matrimonio con Ruth Blanco Blanco.
Andrade militó en el Partido Conservador al lado de Arcadio Charry, líder del sector de los nacionalistas, caracterizados por defender la línea ortodoxa del partido. Como tal, fue el rival político del también conservador, José Eustasio Rivera, quien aspiró, por la misma época y en varias ocasiones, a la Cámara de Representantes, impulsado por sus parientes, los generales Rivera, así como por Federico y Simón Arboleda, del sector de los históricos.
Luis Ignacio Andrade promovió y defendió la ideología del Partido Conservador, inspirado en los principios clásicos del conservatismo y de la filosofía escolástica. En tal virtud, se enfrentó a su copartidario y posterior jefe, Laureano Gómez, en 1933, porque éste promovía la candidatura a la presidencia del liberal Alfonso López Pumarejo, y consideraba que el proyecto de la “Revolución en marcha” sería un golpe mortal a la ideología conservadora. A mediados del siglo XX, cuando la violencia crecía sin control en los campos de Colombia, como ministro de Gobierno proclamaba que no era posible pensar en un acuerdo de paz con las guerrillas liberales porque sus jefes y los dirigentes del partido pretendían que los alzados en armas y los integrantes de la fuerza pública fueran considerados ante la ley en igualdad de condiciones. Para Andrade la paz era posible sólo en la medida en que todos los sectores de la sociedad se sometieran a la ley. Combatió la dictadura militar del General Rojas Pinilla, cuyo gobierno consideraba ilegítimo. Como se sabe, el golpe militar fue propiciado por los sectores ospinistas y alzatistas, del Partido Conservador, con el ánimo de defender sus intereses. Para Andrade, el golpe significó el quiebre de la Constitución; además, que el conservatismo perdiera el poder y que el presidente constitucional, Laureano Gómez, fuera desterrado.
A la muerte de Felisa, su esposa, ocurrida en Bogotá el 12 de noviembre de 1956, Andrade ingresó a la comunidad de los claretianos. Recibió los hábitos en el convento de Bosa, el 19 de marzo de 1957; hizo el noviciado en Italia y fue ordenado sacerdote el 20 de diciembre de 1959, en Roma. A finales de enero de 1960 regresó a Colombia y se dedicó a desarrollar un proyecto para beneficiar a los niños que habían quedado huérfanos por la violencia entre conservadores y liberales, en el Huila. Después de obtener del Instituto de Crédito Territorial un lote en el barrio Cándido Leguízamo, logró la construcción de un edificio en el que puso en marcha el Centro Piloto de Capacitación Laboral, destinado a la formación de niños, en 1964.
En el pensamiento del padre Luis Ignacio Andrade se aprecian cambios relacionados con los conceptos fundamentales de la vida. Por ejemplo, la paz dejó de ser el resultado del esfuerzo exclusivo del hombre, mediante el cumplimiento de la ley. En su criterio, la paz solo es posible en Cristo, gracias a la práctica de la justicia y la caridad. Respecto a su persona, se consideraba un milagro de la Gracia Divina, que lo había convertido en un hombre nuevo a los 65 años, gracias a que Dios, en su infinita misericordia, tuvo piedad de él.
El 30 de diciembre de 1966 murió en su convento, ubicado en la calle 6 entre carreras 3° y 2° de Neiva, frente al actual Hotel Chicalá.