En medio de la profunda tensión política y de una ola de protestas populares que ha generado el anuncio del resultado electoral en las elecciones presidenciales de Venezuela, el Gobierno de Nicolás Maduro ha optado por apretar el puño y radicalizar la respuesta del aparato chavista. El mandatario ha endurecido la represión y ha anunciado la creación de dos cárceles de máxima seguridad para castigar a quienes protestan por las denuncias de fraude electoral.
La respuesta de las fuerzas de seguridad ante la indignación pública ha dejado un número indeterminado de muertos -distintos balances de organismos en defensa de los derechos humanos los cifran entre 10 y 20-, decenas de heridos y cientos de detenidos. María Corina Machado, la líder de la oposición, emitió un comunicado pensado para la comunidad internacional, en inglés y publicado por el diario The Wall Street Journal, en el cual afirma que pasa a la clandestinidad y que es escribe esas líneas “temerosa” por su “vida y libertad”.