A medida que pasan los años se ratifica que la mujer siempre se ha caracterizado por ser protagonista en todos y cada uno de los hechos históricos que suceden no solamente en nuestro país, sino en Latinoamérica y en el mundo entero. Por eso hoy, es común ver sobresaliendo deportistas, actrices, escritoras, empresarias, científicas, astronautas, profesionales de la salud y dirigentes políticas, entre otras.
En diferentes oportunidades he destacado la labor que vienen haciendo colombianas muy distinguidas, sobresaliendo en los diferentes sectores de nuestra sociedad. Pero en esta ocasión quiero hacerle un homenaje a una venezolana berraca, que hoy tiene al régimen dictatorial de Nicolás Maduro contra las cuerdas: María Corina Machado, una mujer que lidera la oposición en el vecino país, organiza y asiste a todas las multitudinarias marchas de protesta, no le da temor por lo que le pueda suceder con tal de liberar a su pueblo de la opresión y fue la principal artífice de la plataforma digital donde sus compatriotas colgaron las actas electorales que sus testigos levantaron en las casi 30 mil urnas de votación, logrando un triunfo contundente e inobjetable.
Esta ingeniera industrial y madre de tres hijos, que estaba destinada a gerenciar la empresa de su familia, los abusos de Hugo Chávez en el 2004 le cambiaron su rumbo para ser una voz desafiante y convocar un referendo revocatorio Nal arrojando como resultado el apoyo de 4 millones de firmas, hasta erguirse lo que es hoy: una mujer que por su coherencia, credibilidad y valentía, se convirtió en el símbolo de libertad en su país, logrando que su tenacidad hiciera eco en cada venezolano, quienes la catalogaron como su única vocera.
Lo sucedido durante la última marcha de protesta, en donde motorizados pagados por el régimen la persiguieron y la secuestraron por unos minutos, logró que el mundo entero rechazara esa cobarde maniobra y obtuviera la admiración y el respeto que María Corina ya se ha ganado a nivel internacional. Además, no hay que desconocer que las amenazas de Donald Trump los llenó de miedo.
Machado, al enfrentarse sin temor primero a Hugo Chávez y ahora a Nicolás Maduro, y quien fue la primera líder en calificar al gobierno de “dictadura”, está reviviendo la esperanza enterrada de millones de venezolanos que desde hace años quieren un cambio de gobierno, sin importarle las constantes amenazas de muerte y de captura. Me identifico con su frase “Hasta el final”, que la ha convertido como en su consigna de este año, destacando su rol de hija, madre y abuela, siendo vista por sus compatriotas como la salvadora de su pueblo y en la dirigente de la oposición que se ha convertido en la “piedra en el zapato” para la dictadura venezolana. Tiene todo mi apoyo y admiración.
Tengo la esperanza que Edmundo González se posesione como el presidente de Venezuela que escogió el pueblo.
