A sangre fría, hombres desconocidos atacaron a bala a Otoniel Ibarra Mosquera cuando se encontraba trabajando en una estación de servicio ubicada en el sector del Alto Garzón, en la salida hacia el corregimiento La Jagua. Aunque el islero fue llevado al Hospital Departamental San Vicente de Paúl, no sobrevivió. Las autoridades investigan los móviles del crimen.
En circunstancias que son investigadas por las autoridades judiciales, le fue arrebatada la existencia a un islero en jurisdicción del municipio de Garzón.
El crimen se registró en la noche del pasado lunes cuando Otoniel Ibarra Mosquera, de 34 años de edad, se encontraba trabajando en una estación de servicio ubicada en el sector del Alto Garzón, en la salida hacia el corregimiento La Jagua.
La arremetida
Cuentan testigos que hombres en motocicleta llegaron al lugar y se detuvieron cerca de su víctima. Posteriormente, desenfundaron un arma de fuego y lo hirieron en varias ocasiones. En ese instante, el afectado cayó al piso, mientras que sus verdugos emprendieron la huida con rumbo desconocido.
En medio de la confusión, sus compañeros trataron de auxiliarlo, logrando su traslado a un centro asistencial de la localidad.
No sobrevivió
Desafortunadamente, cuando llegó a la unidad de urgencias del Hospital Departamental San Vicente de Paúl, el personal médico confirmó que no tenía signos vitales. Los proyectiles que recibió su cuerpo afectaron sus órganos vitales, lo que desencadenó en su fallecimiento.
Tras lo ocurrido, fue informada la patrulla de la Policía para que se procediera con los respectivos actos urgentes. El CTI de la Fiscalía trasladó el cadáver del poblador al Instituto de Medicina Legal.
Se desconoce las razones que motivaron el hecho de sangre, por lo que un equipo de criminalística adelanta las pesquisas con el fin de esclarecer lo sucedido. Se analiza si el caso obedece a un acto de sicariato o si el homicidio habría sido producto de un intento de hurto.
Investigan
La Policía Judicial analiza las grabaciones de las cámaras de seguridad y las declaraciones entregadas por los presentes con el fin de individualizar e identificar a los responsables para dar con su captura.
En redes sociales, los allegados de Otoniel lamentaron lo sucedido y enviaron sentidos mensajes de solidaridad a su familia.
“Crímenes tras crímenes, robos tras robos, pero todo lo tapan con fiestas, no es justo lo que está pasando en el pueblo, qué inseguridad, Dios mío, ya no más. Amigo Otoniel Ibarra, Dios lo tenga en su santo reino y le dé mucha fortaleza a su familia, especialmente a doña Marleny. Qué tristeza, Dios”, escribió Kely Tatiana.
Por otro lado, César Augusto Collazos Vela precisó: “Amigo Otoniel Ibarra, su ausencia se hará notar, pero la felicidad que ha dejado detrás de sí nunca desaparecerá del todo. A familiares y amigos, que mis condolencias les aporten consuelo, y que mis oraciones aligeren su dolor por esta pérdida”.