El expresidente Álvaro Uribe protagonizó un tenso enfrentamiento en Medellín cuando jóvenes manifestantes lo recibieron con preguntas sobre casos de derechos humanos y falsos positivos. Uribe, quien visitaba San Antonio de Prado en apoyo a candidatos locales, denunció un sabotaje en su contra.
El expresidente, en medio de su recorrido, se encontró con manifestantes que llevaban una pancarta con la pregunta “¿Quién dio la orden 6.402?” relacionada con casos de falsos positivos investigados por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Uribe se acercó y cuestionó a los jóvenes sobre si tenían pruebas que lo vincularan con violaciones a los derechos humanos o esos casos.
Uribe afirmó que no se dejó intimidar y confrontó a los manifestantes, acusándolos de apoyar a una administración local implicada en actos de corrupción. “No vamos a cederles ni un milímetro de nuestra ciudad, se la robaron y tenemos que ayudar a recuperarla”, declaró Uribe.
Previamente, el expresidente había denunciado en sus redes sociales un supuesto sabotaje a su campaña política, con grafitis ofensivos en la iglesia y otros establecimientos. Aseguró que fue advertido de no visitar el lugar debido a la presencia de manifestantes del Pacto Histórico que se oponían a su presencia.