Una mujer se encadenó frente a las instalaciones de la EPS Solsalud en Neiva, para reclamar por el no suministro de una medicina vital para su hija de 7 meses. Una mujer se encadenó frente a las instalaciones de la EPS Solsalud en Neiva, para reclamar por el no suministro de una medicina vital para su hija de 7 meses. LA NACIÓN, NEIVA Ante la demora prolongada en la entrega de los medicamentos que requiere su hija y la desatención a sus reclamos cada vez que visitaba la EPS Solsalud en busca de una solución, Andrea Rayo, madre de una menor de 7 meses, decidió encadenarse a las afueras de la entidad con su hija en brazos, para exigir la atención debida. Según la mujer, la rabia y la indignación la llevaron a realizar la protesta. La hija de Andrea es una niña de 7 meses, a quien desde los 19 días de nacimiento le fue diagnosticado Déficit de Factor 7, una patología de la sangre que consiste en el irregular funcionamiento o baja producción de una proteína con el mismo nombre y que hace que la sangre no alcance los niveles de coagulación indicados. “Decidí encadenarme porque la EPS Solsalud no quiere entregar oportunamente los medicamentos que necesita mi hija. La medicina es el coagulante Concentrado de Factor 7 de Baxter, que el médico Nelson Ramírez Plazas le formuló. Mi hija tuvo una operación debido a un hematoma en el cerebro que yo creo se produjo porque ha sido complicado darle la medicina, pues es un lío que ellos me la suministren. Ahora después de la operación ellos debían darme unas dosis para continuar el tratamiento y no me las han dado completas” señaló la mujer. Dosis La hija de Andrea debe recibir tres dosis semanales de Concentrado de Factor 7 de Baxter, que ella misma le suministra por medio de un catéter que tiene la menor a la altura del pecho. La medicina debe ser aplicada tres veces a la semana, es decir que en un mes son 12 las dosis que requiere la niña. Luego de la intervención quirúrgica, el médico Nelson Ramírez Plazas le formuló 36 dosis a la menor para los tres meses siguientes, pero en la EPS sólo le entregaron 24. “A mi hija no le querían dar la medicina después de la operación y el médico me decía que no me la daba de alta así, porque ella necesitaba el medicamento. Para entonces yo ya había puesto una tutela, porque mi hija fue operada el 5 de octubre y hasta el 5 de diciembre me entregaron las primeras 12 dosis que me duraron un mes. Eso fue después de que la tutela saliera a favor de mi niña. La segunda entrega me la dieron el 30 de enero, para ese día yo ya tenía la niña hospitalizada porque como no me habían entregado las siguientes 12 dosis, la niña se me había enfermado. Esas dosis se acabaron el 24 de febrero y tenían que entregarme las siguientes a mas tardar el 27 de febrero, y es la hora que no las he recibido, por todo este incumplimiento tomé la decisión de encadenarme, por que la salud de mi hija depende de esa medicina”, comentó la madre. Indignación El 6 de marzo, la gerente de la EPS Solsalud Neiva, Elvia Esperanza Castro, se comunicó con Andrea y la citó para buscar una solución. La reunión fue sorpresiva para la madre. “Me encontré con la gerente y ella me preguntó que cómo estaba utilizando el medicamento y yo le dije que como el Dr. Plazas me lo había indicado, que es utilizando la dosis indicada de cada frasco de Concentrado de Factor 7 y desechando lo que queda, pues el médico me dijo que esta droga una vez abierta, así quede algo de líquido debe botarse, porque eso se llena de bacterias y si lo utilizo puedo hasta matar a mi hija. Pero ese día la gerente se puso brava conmigo y me dijo que no era así, que cada frasco debía durarme para las tres dosis de la semana, que se podía utilizar lo que quedaba y que según esas cuentas, las 24 dosis que ya me habían entregado debían haberme durado dos meses y medio y hasta más, y que le daba pena pero Solsalud no respondía por el medicamento”, indicó Andrea. Solsalud LA NACIÓN ubicó a la gerente de la EPS Solsalud, Elvia Esperanza Castro y estas fueron sus apreciaciones frente a la situación. “El 6 de marzo que nos reunimos con la señora Andrea Rayo, ella nos explicó cómo le aplicaba las dosis a su hija y que era por orden expresa del médico. Esa situación nosotros no la conocíamos, por eso no teníamos previsto suministrar a esta fecha las siguientes dosis para la menor. Se está haciendo la gestión para conseguirlo, pues la fecha en que se haría la compra sería para el 15 de abril. Aspiramos a que a más tardar el viernes ya podamos contar con el medicamento y garantizar el suministro a la paciente”, indicó la funcionaria. Andrea permaneció hasta las 2:30 de la tarde encadenada en la entrada a las instalaciones de Solsalud. A esa hora la gerente de la EPS la atendió y se comprometió a gestionar el medicamento de la menor, para tenerlo en la ciudad antes del viernes próximo. “Espero que Solsalud me cumpla, aún me faltan 12 dosis y las siguientes 36 que formuló el médico para tres meses más de tratamiento. Porque sino es así, yo estoy dispuesta a protestar cuanto sea necesario por la vida de mi hija”, concluyó la mujer.