Foto: Ilustración – Archivo.
Por: Everth Sánchez Henao.
Un neivano que se movilizaba en su costosa bicicleta por la ruta de ‘Cara de Perro’ en el oriente de Neiva, fue víctima de los delincuentes, quienes con arma de fuego lo intimidaron y lo despojaron de su caballito de acero, en un nuevo acto de inseguridad que preocupa a las autoridades.
A las 5:00 de la mañana, este hombre – quien no quiso dar su nombre por seguridad – salió de su casa ubicada en el barrio Santa Sofía (norte de Neiva), luego se dirigió a una ruta muy conocida por todos los ciclistas de la ciudad, llamada ‘Cara de Perro’, más arriba del barrio Las Palmas, por la vía que conduce al reservorio y Vegalarga.
De repente iba por la vía destapada, a las 5:45 a.m., apenas empezaba a esclarecer y salir los primeros rayos del sol, cundo tres sujetos salieron del monte y lo interceptaron, uno de ellos sacó un arma de fuego y le apuntó, le dijo que entregara la bicicleta y se la robó.
“Yo iba solo, pero delante de mí habían otros ciclistas más, atrás también, una señora cerca iba trotando, pero de repente salió un joven del monte, corrió detrás de mí y de una vez pensé me robaron. Así fue él sacó un revólver y me amenazó”, contó con tristeza el ciclista.
En esos momentos de incertidumbre, angustia y tensión; el hombre le dijo a al delincuente que le dejara sacar los papeles que estaban en un pequeño bolso de la bicicleta, estaba tratando de hacer tiempo para que alguien lo auxiliara, en ese instante salieron otros dos tipos que le decían: “Rápido, quítesela o quémelo de una para que se la dé”, refiriéndose al joven armado para que concretara el hurto.
El neivano asustado y sin poder defenderse, no tuvo más opción que soltar la bicicleta la cual había comprado hace dos años y la tenía bien ‘engallada’ para hacer estas rutas de montaña y trocha.
“Los tipos se llevaron la bicicleta por el monte, una señora que iba cerca trotando al verme que me estaban robando comenzó a gritar –ladrones, ladrones-, cogió el celular y llamó a la Policía, pero ellos salieron corriendo”, contó.
En medio del pánico, la víctima comenzó a seguir a los delincuentes por la maleza, con el rastro de una luz que estaba destellando en la bicicleta que traída prendida por la oscuridad, pero al cabo de algunos metros dejó de parpadear y se perdió.
Llegaron las autoridades
Al cabo de algunos minutos arribaron los agentes de la Policía Metropolitana de Neiva, quienes en motos y patrullas comenzaron el seguimiento de los delincuentes que al parecer ya habían cometido este tipo de robos en la zona y estarían ubicados en la Comuna Diez.
“Ellos me hicieron un tiro, pero gracias a Dios no me pegaron, por eso solté la bicicleta, luego llamamos a la Policía, ellos llegaron y se fueron persiguiéndolos, por allá en el monte me encontraron la carimañola, seguro se les había caído o lo hicieron para despistarlos”, precisó.
Ahora este ciudadano se siente muy triste, porque ha perdido una herramienta preciada para su salud, ya que en ella hacía mucho deporte y mantenía en forma.
“Mi bicicleta es totalmente roja, es de ruta, la había acondicionado para eso, yo monto mucho bicicleta, los miércoles y viernes salgo para hacer esta ruta. Yo me fui temprano, una señora me iba a acompañar, pero no salió a las 5:00 y me fui, luego después del robo la señora alcanzó a llegar, pero ya era tarde”, explicó el ciclista afectado.
Actualmente las autoridades adelantan las labores de investigación del caso para tratar de dar con estos delincuentes, teniendo en cuenta que por esta ruta pasan muchas personas con ciclas costosas, en un flagelo de inseguridad que ha venido creciendo en los últimos años.
“Yo fui a la Sijin a realizar el reconocimiento de los rostros de los tipos, las autoridades les están haciendo seguimiento, Dios quiera que los capturen y ayuden a recuperar mi bicicleta que la quiero mucho”, puntualizó.