Por primera vez la madre de Lida Fernanda Pulido Tabares, quien fue encontrada sin vida el pasado 11 de abril en el tanque de su propia casa, habla y dice que “las piezas del rompecabezas no cuadran”, por lo que considera que no se trató de un suicidio. El resto de sus familiares, amigos, compañeros de trabajo y el mismo alcalde de Algeciras, Alexander Martínez Ballesteros, concuerdan en que se trató de un homicidio. LA NACIÓN viajó a Algeciras, Huila, y averiguó más sobre esta estremecedora historia.
Johan Eduardo Rojas López
Periodistamultimedia4@lanacion.com.co
Algeciras y el Huila, quedaron consternados con la muerte de Lida Fernanda Pulido Tabares, una joven estudiante de la Corporación Universitaria Minuto de Dios y contratista de la Alcaldía Municipal. Tras cerca de 48 horas desaparecida, lamentablemente fue hallada sin vida en el tanque de su propia casa. Desde ese instante los interrogantes se ‘carcomen’ lentamente a los ciudadanos que no consideran que se haya tratado de un suicidio como en un principio se dio a entender.
LA NACIÓN visitó el lugar de los hechos ubicado en la despensa agrícola del Huila y consiguió el testimonio de Lina Yisela Tabares Arias, madre de la joven, quien por primera vez habló sobre el ‘calvario’ que ha vivido durante estos casi quince días y dio detalles importantes sobre la misteriosa muerte de su hija.
Recordó con nostalgia el momento exacto en que su vida se encontró con la de Lida Fernanda hace 21 años, cuando ella solo era menor de 16 años. Desde allí su caminar fue más ameno y cargado de felicidad por contar con una familia incondicional, sin embargo, hoy se ve opacado por lo sucedido. Según contó, la joven nació fruto del amor que ha permanecido intacto desde que, junto con su actual y único esposo entabló una relación, quien para aclarar rumores, sí es el padre de Lida Fernanda.
Esa misma familia hoy atraviesa quizás uno de los dolores más grandes y es la ausencia de su hija que se ‘enreda’ en una misteriosa y casi que indescifrable investigación. Todo esto a raíz de que la brillante joven como la define su familia, inicialmente desapareció el 10 de abril desde la mañana y, posteriormente, fue hallada sin vida, por lo que, en un comienzo se habló sobre un presunto suicidio que hoy estaría siendo descartado por sus mismos allegados, familiares y ciudadanía.
“En la última semana ella sí estuvo como muy estresada porque estaban organizando lo del Centenario y tenían bastante trabajo acumulado, pero pues creo yo que era un estrés normal al ser su primera experiencia con ese puesto dentro de la Alcaldía y pienso que no era un estrés para quitarse la vida”, expresó Tabares Arias.
La angustia comenzó
Narró que se enteró de la situación tras una llamada que recibió a las 6:30 de la mañana de su esposo, quien le manifestó que ese miércoles 10 de abril, Lida Fernanda no había amanecido en su cama y había dejado sus pertenencias. Sin embargo, en aras de mantener la calma creyeron que se había ido para el gimnasio, pero la angustia arreció cuando se percataron que los zapatos deportivos estaban en su lugar.
“Yo vivo entre semana en El Pital donde laboro y empezamos a preocuparnos porque ella no era así, era muy juiciosa, siempre lo fue. Entonces ahí supimos que algo estaba pasando. Empezamos efectivamente a contactarnos con las amigas y con ninguna había tenido contacto, por tanto, nos fuimos desesperando y fue cuando arrancó la búsqueda de mi niña”, sostuvo.
Una corazonada que cayó como una puñalada
El jueves 11 de abril todos se preparaban para el segundo día de búsqueda, pero mientras que Lina Yisela Tabares Arias, su madre, se bañaba, sintió un pálpito que la llevó a encontrar a su hija de la manera que menos se lo esperaba y más dolorosa.
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“Yo entro a bañarme y el agua estaba normal, pero yo sentí un pálpito. Salí de bañarme y le pregunté a mi cuñada si habían revisado el tanque y ella me dijo que la niña no estaba ahí, pero yo quería descartar y le pedí a mi hijo que destapara el tanque que es de plástico y de mil litros de agua, el cual había que enroscarlo por fuera para poderlo tapar y en ese momento mi hijo gritó porque ahí estaba su hermana”, agregó.
¿Y las heridas?
Desde ese momento las múltiples preguntas no la dejan tranquila y la única realidad es que algo raro pasó, pues era imposible que la misma Lida Fernanda se metiera en el tanque y lo tapara, además que, jamás se subía a ese lugar. De allí que su familia piense que hubo fuerzas humanas involucradas o en su defecto, fuerzas extrañas.
Otra de las grandes dudas es que cuando el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, realizó el levantamiento, la joven presentaba unas lesiones en la parte baja del abdomen, “dos huequitos”, dice su madre.
“Esa noche llegué a mi casa a buscar los cuchillos que estaban completos, desordené el cuarto buscando con qué se hizo eso, fui al baño, saqué los papeles, regué la basura y saqué todo buscando alguna pista porque si ella se había propiciado esas heridas debían haber pruebas, pero no fue así. Además, si ella salió de su habitación y se subió al tanque, al menos una tinta de sangre debía haber quedado, pero no había nada. Entonces esas partes son las que no me cuadran”, argumentó la madre en medio del diálogo con LA NACIÓN.
Esas piezas del rompecabezas que no encajan por ningún lado han generado mayor zozobra y, por tanto, los días cada vez son más complejos para la familia que no solamente padece el vacío de una ausencia, sino que afrontan una incertidumbre agria.
“Uno está solo y empieza a recordar y extrañar su compañía, entonces cada día se siente más el vacío que dejó. En mi alma hay mucha tristeza, desolación y dudas. Tengo mil preguntas que no me dejan dormir y me hacen pensar que si yo hubiera estado tal vez hubiera podido hacer algo; si hubiera pensado antes en abrir ese tanque tal vez estaría viva y demás”, indicó.
Sin sospechosos
Aclaró que su hija no tenía novio, ni enemigos, por tanto, no tiene ningún sospechoso, pero todo es muy extraño pues nadie escuchó, ni vio nada. Todo fue muy raro.
“Mi esposo se levanta varias veces al baño y ese día precisamente cayó privado; enseguida del tanque duerme mi vecina que a veces pelea que el gato de mi casa no la deja dormir y ese día nadie escuchó nada. Tantas cosas pudieron haber pasado y son las dudas que me invaden porque no encuentro una explicación lógica. La verdad no desconfío de nadie, que yo sepa nosotros no tenemos enemigos, ella no tenía novio o algún pretendiente. No sospecho de ningún familiar para nada y de mi esposo nunca sospecharía”, precisó la mujer en medio de su dolor.
Señaló que otro punto que hay que tener en cuenta es que, por el tanque de su casa es fácil que cualquier persona ingrese y, de allí que, exista alguna posibilidad de que alguien haya entrado ese día.
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Sin respuestas
Tras varios días del suceso no le han entregado los resultados de la necropsia y no tienen conocimiento de nada frente a la investigación, de hecho, afirmó que la semana pasada se acercó a la Fiscalía del municipio, de donde salieron “regañados”.
“Nos dijeron que debíamos tener paciencia porque eso es demorado y no sabemos qué despacho va a tomar el caso. No sabemos a quién pedirle la información de la investigación. No hemos sido bien atendidos y la única conclusión es que mi hija ya no está y nunca más la voy a poder abrazar; anocheció y no amaneció. Yo pido que por favor haya agilidad en el trámite y que sea una investigación seria, que me demuestren que ella se mató como dicen. Necesitamos evidencias de que fue así”, concluyó.
Alcalde pide justicia
El mandatario de los algecireños, Alexander Martínez Ballesteros, también considera que se trató de un homicidio y pide que se esclarezca con prontitud lo sucedido con una de sus contratistas.
“Lamentablemente a la fecha no se ha podido esclarecer nada; nosotros estamos pidiendo por todos los medios y la población de Algeciras está requiriendo que se haga justicia y se puedan establecer los móviles y los responsables para que paguen por este crimen. Para nosotros es bastante lamentable que hayan pasado varios días y aún no tengamos ninguna noticia de qué fue lo que paso”, explicó.
Dijo que en el municipio hay zozobra porque no se conoce quienes fueron los responsables y muy posiblemente los asesinos están deambulando por las calles, además, se refiere a un asesinato debido a las mismas pruebas que brinda la madre, sin embargo, es consciente que hay que esperar los resultados de la investigación.
Una imagen que lo persigue
Jhoan René Pulido Tabares, hermano de Lida Fernanda, tiene viva la imagen de cuando abrió el tanque en donde la encontraron y hasta ese momento, siempre guardaba la esperanza de encontrarla con vida.
“Yo abrí el tanque y quedé en shock, lo único que hice fue gritar, le pegué al techo, a la pared, miraba hacia abajo y veía a mi familia gritando y llorando; fue un momento muy fuerte, una imagen muy dolorosa que me persigue”, corroboró.
El joven que dejó sus estudios universitarios en el Caquetá para volver a estar con su familia en este difícil momento, salió en defensa de su padre, quien para algunos es sospechoso del crimen. Especificó que la gente habla mucho y crea chismes, lo cual le parece una falta de respeto con el dolor ajeno dado que nadie tiene ni idea por el difícil momento que están pasando.
“Mi papá nunca haría eso. Él es el mejor padre que pudimos tener y ella era la niña consentida de él. Yo lo he visto afectado, él no es una persona que demuestre mucho sus sentimientos, pero ante este hecho es inevitable. Si fue un homicidio no hay solo una persona involucrada en esto porque una sola persona no la pudo subir hasta allá y a ella nunca le gustó subirse”, especificó el joven.
Finalmente, el secretario de Gobierno y Servicios Administrativos de Algeciras, Nelson Fernando González, se refirió al tema dado que la joven estaba adscrita a su dependencia y pidió respuestas frente a los interrogantes que todos tienen. “Pedimos que la imagen de ella no se convierta en un rostro de impunidad y que sean las autoridades competentes las que nos permitan esclarecer qué ocurrió”, puntualizó.
Mientras todos hoy esperan descifrar lo sucedió, la recuerdan como una joven callada, tímida, generosa, comprometida y muy soñadora, además atesoran una carta que había escrito días antes en donde agradecía por todo lo que tenía. Hasta ahora las autoridades competentes no se han referido al tema, ni han mostrado un avance significativo en la investigación.
LA NACIÓN, que viajó el fin de semana con un equipo periodístico al mando del veterano reportero Albatros Moro, publicará en las próximas horas a través de sus redes sociales un especial multimedia sobre esta extraña muerte que conmueve a los algecireños.