Jhony Santiago, un joven estudiante de Educación Física de Neiva, se encuentra en una situación crítica tras sufrir un grave accidente, aparentemente provocado por un hueco en La Toma. La motocicleta en la que viajaba fue robada tras el incidente. Su madre, Diana Polanco, denuncia presunta inacción de las autoridades competentes.
María Alejandra Ruiz Mallungo
@amperiodista
“No se trata del dinero, sino del dolor que siento como madre porque mi hijo se está muriendo, está entre la vida y la muerte, por un berraco hueco”, denuncia Diana Polanco Vidal, madre de Jhony Santiago Gómez Polanco, un joven neivano que, en horas de la madrugada del pasado domingo, luego de salir de trabajar, sufrió un grave accidente, según relata su madre, a causa de un hueco ubicado en la avenida La Toma de la ciudad de Neiva.
“Jhony Santiago iba en su moto a las 4:30 de la mañana sobre la avenida La Toma con carrera 12, entre la Granja Burger y el restaurante El Zoológico. Allí hay un hueco. Él tomó el hueco, voló y cayó frente al restaurante. La moto quedó encendida, como si tuviera vida propia; dio la vuelta, se dirigió sola hacia la izquierda y luego impactó contra el separador”, relata angustiada Diana.
Tras el accidente, Diana explica que la ambulancia que socorrió a Jhony Santiago no tardó más de dos minutos en llegar al lugar del siniestro. Los paramédicos, según dice la madre, luego de atender y estabilizar a Jhony, avisaron a Tránsito y a la Policía sobre la motocicleta que permanecía en el lugar. “La ambulancia llamó a la Policía y a Tránsito, informando que tenían un joven con heridas de gravedad y que la moto quedaba en la calle, solicitando que se acercaran a llevarla. Según el registro de la cámara, a las cinco de la mañana, la Policía nunca llegó y Tránsito tampoco, y la moto fue robada”, expone Diana.
Dudas y cuestionamientos
Sobre el particular suceso en el que la moto de Jhony Santiago fue hurtada, Diana tiene muchos interrogantes sobre la eficiencia y rapidez de las autoridades competentes cuando ocurren accidentes viales en la ciudad. “Hay algo que me genera curiosidad: pasó un taxi, se devolvió, paró frente al local comercial y el taxista se bajó para informar al vigilante de unos de los locales sobre lo ocurrido. Él permaneció en el lugar hasta que llegó la ambulancia, que se llevó a Santiago. Lo curioso es que el taxi no se fue; permaneció apagado en el lugar”, explica la madre y añade, “¿Qué es lo curioso? El taxista nunca se fue del lugar. ¿A quién llamó el taxista? ¿Por qué apagó el taxi después de que se llevaron a Santiago? Es una situación muy extraña. Hemos llegado a la conclusión de que probablemente el dueño del taxi llamó a los ladrones”.
Destacó que esta situación no sería inusual, considerando la grave problemática de inseguridad en la que se encuentra Neiva, especialmente en cuanto a hurtos. “Todos sabemos que Neiva tiene problemas serios (en seguridad). Los videos que me proporcionaron provienen de una cámara de seguridad instalada en uno de los establecimientos, pero solo me dejaron ver hasta las cinco de la mañana. Sin embargo, voy a solicitar las grabaciones de las cámaras de la Policía. Actualmente, no he podido presentar la denuncia por el robo de la moto, pero ya estoy gestionando eso”, mencionó Diana.
En coma inducido
Actualmente, Jhony Santiago se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Clínica Mediláser de Neiva, en la cama 12. El parte médico que le dieron a su madre explica que el joven, estudiante de Educación Física en la Universidad Surcolombiana y profesor en diferentes academias de crossfit, tiene trauma craneoencefálico severo y presenta mucha inflamación en el cerebro. “Según el parte médico, su cerebro está demasiado inflamado. Presenta cinco fracturas en la mandíbula y el brazo izquierdo fracturado, pero sus principales lesiones son en la cabeza. No lo han operado ni nada, porque está en estado crítico. La especialista que me dio el parte médico no podía informarme si Santiago despertará, ya que su situación es muy crítica”, dijo Diana.
Justicia
En medio del dolor y la incertidumbre, Diana y los familiares de Jhony Santiago planean realizar un plantón para hacer un llamado a la administración municipal, encabezada por Germán Casagua, alcalde de Neiva, para que actúen en materia de seguridad, tanto ciudadana como vial. “Realizaremos un plantón porque no me parece justo que, con todos los impuestos que pagamos aquí en Neiva, estemos sufriendo por ese hueco. Esperaron a que ocurriera algo fatal. Uno se da cuenta de que los agentes de tránsito, a toda hora, están quitándole la moto a personas que realmente la necesitan, que son honradas y trabajadoras. Entonces, ¿por qué no llegaron los de Tránsito y la Policía al lugar? Necesito que me den soluciones”, explicó la adolorida madre.
Finalmente, Diana expresó que exigirá respuestas a las autoridades competentes: “Voy a interponer una demanda al municipio y haré un plantón y todo lo que sea necesario. No se trata del dinero, sino del dolor que siento como madre porque mi hijo se está muriendo, está entre la vida y la muerte, por un berraco hueco. Solo pido justicia frente al accidente de Santiago”.
Sobre esta situación, Edna Johana Cruz, secretaria de Movilidad de la ciudad mencionó que hasta el momento no tienen conocimiento sobre el accidente, pues este no fue reportado a la línea de emergencia 123, ni a ninguna autoridad de tránsito. “Lo que conocemos es lo que se ha venido conociendo a través de declaraciones de las familias”.
Cifras de accidentalidad en Neiva
Edna Johana Cruz, secretaria de Movilidad de Neiva, argumentó que, según el consolidado estadístico del Observatorio de Seguridad Vial del municipio, un gran porcentaje de los siniestros viales se debe a imprudencias al conducir.
De los 3,855 siniestros viales registrados en los últimos cinco años, 227 ocurrieron en vías con condiciones deficientes, lo que representa el 6% del total. En contraste, 3,436 siniestros, equivalentes al 89.13%, tuvieron lugar en vías en buen estado. Esto sugiere que la siniestralidad no está directamente relacionada con el estado de las vías, sino que se atribuye, en gran medida, a la imprudencia vial al momento de conducir.