Las negociaciones de la Alianza del Pacífico entre México, Colombia, Chile y Perú concluyeron ayer lunes en el balneario mexicano de Playa del Carmen, donde ministros de Comercio y Relaciones Exteriores rechazaron las críticas brasileñas a este mecanismo.
"Hemos concluido las negociaciones de todo el acuerdo comercial y económico que comprende todas las disciplinas de integración económicas" en los sectores de bienes y servicios, así como de inversiones y compras públicas, dijo en conferencia de prensa Sergio Diaz-Granados, ministro de Comercio de Colombia.
En rueda prensa conjunta, los funcionarios que integran la alianza respondieron a las críticas de Brasil sobre que la Alianza del Pacífico no es un proyecto de integración profundo como lo es el Mercosur.
La Alianza del Pacífico "es el acuerdo más ambicioso, casi podríamos decir revolucionario en materia de integración" regional, dijo de su lado Alfredo Moreno Charmé, ministro de Relaciones Exteriores de Chile.
Aunque la palabra integración ha estado en la región durante mucho tiempo, las naciones latinoamericanas "no han podido pasar de la teoría, de la poesía y la canciones, sobre la integración, a algo efectivo", añadió el ministro chileno.
Los cuatro países que integran está alianza representan a más de 200 millones de habitantes, con tasas de crecimiento de las más altas del mundo y juntos son la sexta economía global, precisó Moreno.
Los países se unen porque tienen objetivos comunes y "en el caso nuestro, somos unos convencidos del libre comercio", señaló de su lado María Ángela Holguín Cuéllar, canciller colombiana, quien descartó que éste mecanismo interfiera con la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) porque se trata de un acuerdo meramente comercial que no incluye "ningún tipo de concertación política".
Los ministros de la Alianza del Pacífico, reunidos durante dos días en Playa del Carmen, alcanzaron un acuerdo que contempla desgravar de manera inmediata el 92% de bienes y servicios y 8% en plazos cortos y medianos.
La parte más sensible en la negociación correspondió a 1,4% del total de productos relacionados con bienes agropecuarios y cuyos plazos de eliminación arancelaria podrían llevar hasta 2030, explicó Ildefonso Guajardo, Secretario de Economía de México.
Los presidentes de estas cuatro naciones se reunirán el próximo 25 de septiembre en Nueva York para definir la fecha y el lugar de la firma del acuerdo comercial, prevista para el último trimestre del año.
