Nathalie Lugo y Santiago Plazas, oriundos del Huila, han transformado sus vidas en una inspiradora aventura global. Desde hace dos años, residen en Bali, Indonesia, y han recorrido más de 20 países, demostrando que es posible trabajar de manera remota mientras se exploran nuevas culturas. A través de sus redes sociales, Nathalie y Santiago motivan a los jóvenes a seguir sus pasos, enseñándoles a gestionar sus finanzas de manera inteligente y responsable para alcanzar la libertad financiera. Esta es su historia.
Hernán Galindo
Nathalie y Santiago son una pareja de huilenses, que trabaja desde cualquier lugar del mundo. Colaboran con empresas internacionales y, al mismo tiempo, enseñan a los latinoamericanos a generar ingresos por Internet y a adquirir educación financiera para mejorar su calidad de vida. Juntos graban, editan y crean contenido en redes sociales, cursos, asesorías y plataformas virtuales que permiten a sus estudiantes aprender sobre negocios, marketing, trabajo remoto, finanzas, viajes, experiencias y desarrollo personal.
Ambos son oriundos de Neiva, Huila, donde actualmente viven sus padres y su familia, razón por la cual les gusta volver a su tierra cada vez que pueden. “Lo que más extraño de Neiva sin duda es la sazón de mi mamá, no hay mejor hotel en el mundo que el ‘Hotel Mamá’”, dijo Santiago, mientras que, Nathalie comentó que lo que más extraña es a su familia, su perrita y una buena parranda vallenata. “No hay mejor fiesta que las fiestas de San Pedro”, comentó desde Bali.
Un encuentro para la vida
Nathalie estudió en el Colegio La Presentación y Santiago en el Gimnasio La Fragua. Después de estudiar y vivir en Bogotá durante 6 años, Nathalie decide irse a pasar unas vacaciones con su familia en Neiva, donde conoce a Santiago quien se encontraba trabajando como ingeniero eléctrico en Neiva en ese momento después de haber terminado sus estudios en Bogotá también.
Desde ese día, empezaron a salir y después de 6 años decidieron casarse en Bali, Indonesia. “Bali es conocida como la isla de los dioses, una isla mágica que ahora es nuestro segundo hogar”, agregó Nathalie.
Aunque hoy se dedican al marketing y las finanzas, Santiago es ingeniero eléctrico y Nathalie es administradora de empresas de profesión. Estudiaron en la Universidad de Los Andes y trabajaron durante cinco años en reconocidas empresas de Colombia de forma presencial, donde tenían alto estrés y carga laboral.
Cuando llegó la pandemia, descubrieron el trabajo remoto y desde entonces nunca volvieron al trabajo de oficina tradicional.
“Nos dimos cuenta de que podíamos ganar tres veces más trabajando de forma remota y desde la comodidad de nuestra casa si trabajábamos para empresas internacionales”, contó Santiago. Ya no tenía sentido para nosotros ir a una oficina a cumplir horario, por eso decidimos irnos a viajar por el mundo, agregó Nathalie.
De viajeros a empresarios
Su intención inicial era simplemente seguir trabajando para empresas del exterior mientras viajaban, pero con el tiempo, sus amigos y conocidos comenzaron a preguntarles sobre este estilo de vida. Fue entonces cuando vieron la oportunidad de iniciar su propia empresa, compartiendo sus conocimientos y experiencias.
Santiago cuenta que “nunca había tenido redes sociales y no sabía nada sobre creación de contenido, pero ahora es un experto en marketing a pesar de no tener ningún título en esa área. Aprendí todo en los libros, por medio de cursos virtuales y viendo tutoriales de YouTube”.
“Me di cuenta de que ganaba más dinero en el trabajo remoto haciendo cosas más sencillas que siendo ingeniero en Colombia”, expresó entre risas.
Para lograr un contenido diferencial en redes es fundamental, según los emprendedores, ser auténticos y encontrar algo en lo que seas bueno y se pueda monetizar. “No tiene que ser algo que ames o te apasione, simplemente algo que se te dé bien y sea valioso para otros y les ayude a mejorar sus vidas de alguna forma”, concluyeron.
Por su lado, Nathalie nunca se consideró buena para los números y hoy se dedica a asesorar a mujeres de toda Latinoamérica para que puedan tener tranquilidad financiera para ellas y sus familias. “La mayoría de mis estudiantes son madres cabeza de hogar que tienen que asumir todos los gastos de sus hijos e incluso de sus padres”.
Ni en la Universidad de Los Andes me enseñaron educación financiera. “En Latinoamérica necesitamos mucha educación”, dice Nathalie. “Me tocó aprender de finanzas después de tomar muy malas decisiones financieras. Tenía muchas deudas, préstamos del Icetex y tarjetas de crédito que no sabía cómo pagar”. “Afortunadamente, hoy en día la tecnología nos da herramientas para que nosotros no tengamos que hacer los cálculos y solo nos tengamos que preocupar por trabajar y manejar bien nuestras finanzas”, sostuvo Nathalie.
¿Qué es un nómada digital?
Un nómada digital es una persona que obtiene sus ingresos mediante trabajos en línea y que no está vinculada a un lugar fijo. Además de ser una forma de empleo, este tipo de trabajo está asociado con un estilo de vida en el que el empleador permite que el trabajador resida en cualquier país.
La pandemia hizo que el concepto de nómada digital se hiciera muy conocido debido al cierre generalizado que enfrentaron empresas de todos los sectores para frenar la propagación del virus.
Actualmente, países como España, Portugal, Alemania, Tailandia e Indonesia reciben a millones de nómadas digitales y algunos incluso han implementado visas especiales para facilitar la entrada de estos trabajadores a sus países.
“Nosotros ganamos en dólares y gastamos en rupias, lo que nos permite viajar, ahorrar e invertir en activos que nos permitan tener libertad financiera en el futuro”, dijo Nathalie.
En su cuenta de Instagram, la pareja de opitas cuenta las ventajas de haberse convertido en nómadas digitales. “Nos gusta poder manejar nuestros propios horarios y poder escoger nuestro lugar de trabajo, ya sea en la casa o desde la playa”.
Las empresas de primer nivel valoran a las personas que saben hacer las cosas bien, más allá de contar con un título profesional. Por esta razón, aprecian el talento y no les importa desde dónde se realice el trabajo, siempre y cuando se cumplan los plazos establecidos, agregó.
Una vez construido su portafolio y perfil de trabajador digital, plataformas como Upwork, Torre, LinkedIn, Freelancer, Fiverr y Workana pueden ayudarle a encontrar vacantes remotas.
“Fuimos educados para pensar que una carrera profesional era la única forma de hacer dinero. Hay que cambiar esa estructura y aprovechar la tecnología a nuestro favor, que nos permite aprender muchas cosas gratis y acceder a opciones infinitas de ganar dinero sin tener un título o estar atados a una oficina”.