El caqueteño Jerson Andrés Bastidas Vargas logró la más alta puntuación en el concurso de méritos para proveer el cargo de personero de Neiva, por eso el Concejo Municipal lo designó para esta dignidad para los próximos cuatro años. En diálogo con LA NACIÓN, habló sobre sus prioridades.
CATERIN MANCHOLA
Jerson Andrés Bastidas Vargas es el actual director administrativo y financiero de la Personería de Manizales (Caldas), antes fue personero delegado de ese mismo municipio e, incluso, fue personero de Supía en dicho departamento. El joven, será el próximo personero de Neiva a partir del primero de marzo; ayer se hizo pública la resolución 008 de 2024 mediante la cual el Concejo le designa en esta dignidad, por haber obtenido la más alta puntuación durante todo el concurso de méritos.
Desde hace 17 años no vive en Neiva y se radicó en Manizales. Aunque terminó el bachillerato en la región opita y luego comenzó a estudiar derecho en la Universidad Surcolombiana, tuvo que trasladarse a la Universidad de Caldas. El caqueteño nunca antes había podido ejercer su carrera en Huila, donde vive su familia, le contó ayer a LA NACIÓN.
Personero, ¿qué le significa este nuevo reto, se lo esperaba?
Primero, muchas gracias por contactarme y por las felicitaciones, todavía estoy un poco impactado, no he terminado de asumir el tema. Para mí ha sido un proceso muy bonito porque me presenté sin ninguna expectativa, la verdad, vine a Neiva porque soy de acá y mi casa está aquí, y vine más con otro objetivo que precisamente guardar las esperanzas de ser personero por lo que uno conoce de estas dinámicas. Sin embargo, desde que salió el resultado preliminar de conocimiento tuve la grata sorpresa de ver que era el tercer puntaje más alto de los resultados, a partir de ahí tuve una verdadera expectativa e ilusión de que las cosas sí se podían dar. Fueron aproximadamente 40 días, con todos los altibajos que ustedes conocen; las reclamaciones, especulaciones y tutelas. Es una bendición y oportunidad de vida, pero también un reto. No tengo afinidad política alguna. Le doy gracias a Dios por el resultado.
Cuéntele a los neivanos sobre su experiencia profesional.
He ejercido como servidor público durante 10 años, siempre relacionado con temas de personerías, fui personero de Supía en Caldas, luego pasé a ser personero delegado de la Personería de Manizales y desde hace cuatro años soy el director administrativo y financiero de la Personería de ese mismo municipio hasta la próxima semana, ya pasé mi carta de renuncia para hacerse efectiva a partir del 2 de febrero. También ejerzo la docencia universitaria, cuento con dos especializaciones y maestría.
¿Cuáles serán las prioridades desde la Personería?
Cuando vi que las cosas sí serían posibles y que el proceso estaba siendo transparente, comencé a contextualizarme mucho más de la ciudad y he encontrado diferentes situaciones que me llaman mucho la atención y les dedicaré gran parte de mi tiempo. Uno tiene ver con todas esas situaciones aparentemente irregulares que ha advertido la actual administración que encontraron en el empalme. Un segundo aspecto es la gran cantidad de asentamientos humanos que hay en la ciudad. Y el tercero, la cultura ciudadana para incentivar los deberes, mayor conciencia.
Por último, ¿cuál será su posición frente a la administración de Casagua?
En el primer año de una Personería, hay que verificar qué es lo que quedó de la anterior administración municipal, qué recibió la administración actual, qué situaciones son definitivamente insubsanables y cuáles sí pueden ser mejoradas e intervenidas por la nueva administración. La posición que la Personería tendrá de cara a la administración actual será vigilante, en un primer momento, de las situaciones que está en cabeza de los actuales funcionarios poder mejorar, ya con el pasar de los meses, para julio, si las situaciones no tienden a mejorar ya se tendrá que entrar a manejar otra estrategia, en principio adelantar investigaciones preventivas, y si no hay respuesta por parte de los funcionarios tendríamos que entrar a un proceso disciplinario, pero eso sería una última instancia. No quiero para Neiva un órgano estrictamente sancionador, una instancia que persiga funcionarios, porque eso no le va a representar nada a la ciudad.
La experiencia
Su perfil
